As¨ª afecta la falta de sue?o a la crianza

La falta de sue?o reparador es un cl¨¢sico asociado a la crianza de los hijos, sobre todo cuando los ni?os tienen menos de dos a?os. Pero, ?c¨®mo les afecta a los padres la carencia de descanso y la reducci¨®n de su espacio personal? Dormir pocas horas para atender las demandas de cuidado de los hijos, puede ir asociado al hecho de que los padres descuiden su bienestar f¨ªsico, olviden sus aficiones o aparquen su vida social. ¡°Muchas mam¨¢s con beb¨¦s comentan que apenas tienen tiempo para s¨ª mismas y que restringen sus relaciones sociales y aficiones, descuidando incluso su dieta y actividad f¨ªsica...

La falta de sue?o reparador es un cl¨¢sico asociado a la crianza de los hijos, sobre todo cuando los ni?os tienen menos de dos a?os. Pero, ?c¨®mo les afecta a los padres la carencia de descanso y la reducci¨®n de su espacio personal? Dormir pocas horas para atender las demandas de cuidado de los hijos, puede ir asociado al hecho de que los padres descuiden su bienestar f¨ªsico, olviden sus aficiones o aparquen su vida social. ¡°Muchas mam¨¢s con beb¨¦s comentan que apenas tienen tiempo para s¨ª mismas y que restringen sus relaciones sociales y aficiones, descuidando incluso su dieta y actividad f¨ªsica¡±, explica Silvia Arcas, psic¨®loga especialista en ni?os y adolescentes. ¡°Las repercusiones de la falta de sue?o¡±, prosigue la experta, ¡°en una persona que descuida as¨ª su salud y su necesario esparcimiento emocional son todav¨ªa m¨¢s negativas para su salud. Todo ello podr¨ªa degenerar en cansancio, irritabilidad, ansiedad, sentimientos de tristeza, impotencia por la percepci¨®n subjetiva de que no se disponen de los recursos para hacer frente a la situaci¨®n y, en los casos m¨¢s extremos, depresi¨®n¡±.

Ciertas situaciones pueden complicar el estado f¨ªsico, emocional y psicol¨®gico de los padres que carecen del descanso que precisan, debido a las demandas de tiempo y atenci¨®n que implica la crianza de los hijos. Como en el caso de que ¡°la mam¨¢ o el ni?o tengan un temperamento m¨¢s ansioso o alguno de ellos tenga problemas de salud. Tambi¨¦n influye el hecho de que la madre se encuentre sola en el ejercicio de las labores de crianza o est¨¦ poco apoyada por el padre¡±, sostiene Arcas. Otras preocupaciones que pueden interferir de forma negativa con el ansiado descanso reparador son los problemas econ¨®micos o laborales: ¡°As¨ª como tener m¨¢s hijos menores a cargo, que los padres sean primerizos o tengan dificultades conyugales, que son frecuentes, cuando los progenitores est¨¢n sometidos a un estr¨¦s continuo. Conviene mantener la perspectiva de que, aunque cuando el ni?o duerma m¨¢s horas por la noche, durante el d¨ªa estar¨¢ m¨¢s activo y necesitar¨¢ m¨¢s supervisi¨®n y atenci¨®n por parte de los padres. De manera que, la situaci¨®n no deja de ser agotadora cuando el beb¨¦ tiene m¨¢s de seis meses, porque aunque los progenitores puedan dormir m¨¢s tiempo seguido, tendr¨¢n que estar m¨¢s activos de d¨ªa, lo que puede provocar que acaben m¨¢s exhaustos y cansados¡±, a?ade Arcas.

C¨®mo minimizar la influencia de la falta de descanso en el bienestar de los padres

El reparto equitativo de las tareas con la crianza de los hijos es uno de los planteamientos que m¨¢s puede favorecer el descanso, sobre todo, de la madre durante los primeros meses de vida del beb¨¦. ¡°Aunque, el peque?o se alimente con lactancia materna, la mam¨¢ puede extraer la leche, que el pap¨¢ administrar¨¢ con biber¨®n en algunas tomas diurnas o nocturnas, de manera que se puedan repartir los turnos. Muchos padres se implican activamente en el cuidado de sus hijos y en la realizaci¨®n de tareas dom¨¦sticas, por lo que favorecen el descanso materno, al tiempo que fortalecen el v¨ªnculo no solo con su hijo, sino tambi¨¦n con su pareja, que se siente cuidada y apoyada. Si hay m¨¢s hijos, la atenci¨®n exclusiva del padre sobre ellos minimiza la posibilidad de que se sientan excluidos o desarrollen celos y otorga un espacio privilegiado para que la mam¨¢ se vincule pl¨¢cidamente con su beb¨¦. La intervenci¨®n del padre, durante esta fase, es important¨ªsima y puede ser una oportunidad de oro para crear una relaci¨®n m¨¢s especial con el resto de sus hijos¡±, argumenta Arcas.

Apostar por la flexibilidad y huir de la rigidez o el perfeccionismo, ayuda a gestionar a los padres la fase de la crianza que implica renunciar aparte de su tiempo personal y descanso. Por ello, conviene ¡°descartar las expectativas desmesuradas y poco realistas y aprender a establecer prioridades. Lo m¨¢s importante para el bienestar de los padres en esta etapa del crecimiento de sus hijos es una buena alimentaci¨®n, el descanso y los v¨ªnculos de calidad. Lo secundario es el cesto con toneladas de ropa sin planchar. Si el peque?o duerme, es momento de echar una siestecilla, escuchar m¨²sica, tomar un tentempi¨¦, leer un libro, pasear o tener una conversaci¨®n agradable. Lo dem¨¢s, puede esperar. Tambi¨¦n es conveniente establecer unas rutinas claras y estables en cuanto a cuestiones cotidianas del cuidado del ni?o, como la hora de la comida, del paseo, el juego o el ba?o para que los ni?os diferencien mejor entre la actividad del d¨ªa y el descanso durante la noche¡±, concluye la psic¨®loga.

Sentimientos de culpa y rechazo de los padres

Resulta habitual que, cuando los padres est¨¢n sobrepasados por la crianza de sus hijos y carecen del descanso que necesitan, el agotamiento pueda hacer aflorar sentimientos de culpa por su rol como progenitores e, incluso, de rechazo hacia el ni?o. Por ello, conviene recordar que ¡°cuando se tiene un hijo cambia toda la din¨¢mica familiar y desde el principio es aconsejable generar un apego seguro en el v¨ªnculo del ni?o con sus padres para favorecer su independencia. Hay que recordar que no importa la cantidad de tiempo que se dedica a los hijos sino la calidad. Tienen m¨¢s valor 15 minutos dedicados al ni?o plenamente que horas, pero de manera dispersa y sin una total atenci¨®n¡±, aconseja Evelyn Cano, pedagoga, psic¨®loga y responsable del Proyecto Abrazo.

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