Una oleada de amenazas y ataques enciende todas las alarmas entre los periodistas de Guerrero
Periodistas y trabajadores de la comunicaci車n exigen protecci車n mientras que la violencia se recrudece en el Estado, especialmente en la ciudad de Iguala
A Manuel lo describen como un ※muchacho humilde§ que se acercaba al Diario de la Tarde de Iguala con una ※motito que acababa de comprar§ para llevarse algunos ejemplares del peri車dico.
〞Dame 300.
Vend赤a durante la tarde en Iguala de la Independencia y por las ma?anas en las poblaciones aleda?as. Con eso iba tirando, hasta que sus restos aparecieron esparcidos junto a una carretera. Hab赤a sido asesinado y descuartizado por un grupo armado que se disputa la ciudad, punto estrat谷gico de comunicaci車n entre varios Estados. Manuel fue el 迆ltimo repartidor que corri車 esa suerte, ...
A Manuel lo describen como un ※muchacho humilde§ que se acercaba al Diario de la Tarde de Iguala con una ※motito que acababa de comprar§ para llevarse algunos ejemplares del peri車dico.
〞Dame 300.
Vend赤a durante la tarde en Iguala de la Independencia y por las ma?anas en las poblaciones aleda?as. Con eso iba tirando, hasta que sus restos aparecieron esparcidos junto a una carretera. Hab赤a sido asesinado y descuartizado por un grupo armado que se disputa la ciudad, punto estrat谷gico de comunicaci車n entre varios Estados. Manuel fue el 迆ltimo repartidor que corri車 esa suerte, pero antes de 谷l, un chico apodado El Canelo, El赤as, y as赤, hasta sumar cinco repartidores, fueron asesinados por el simple hecho de vender un peri車dico local que hab赤a informado sobre la lucha entre las distintas facciones enfrentadas.
La ola de violencia que se vive en el Estado de Guerrero por parte del crimen organizado ha pillado a los periodistas y a los trabajadores ligados a la informaci車n en medio de un fuego cruzado. Este mi谷rcoles la Asociaci車n de Periodistas del Estado de Guerrero (APEG) se manifest車 frente al Palacio de Gobierno y la Fiscal赤a del Estado, al tiempo que lanzaba un comunicado en el que piden a las autoridades municipales, estatales y federales que tomen cartas en el asunto frente a una nueva ristra de amenazas que han sufrido los reporteros de Guerrero a trav谷s de redes sociales.
El 2 de agosto, fue asesinado en Iguala Pablo Morrugares, del diario de noticias digital PM, quien tambi谷n hab赤a recibido amenazas v赤a redes. En el ataque, llevado a cabo con armamento de alto calibre, tambi谷n mataron a su escolta. Los periodistas denuncian su indefensi車n frente al recrudecimiento de la violencia. Julio C谷sar Zubillaga es el director del Diario de la Tarde de Iguala, lugar del que se ha visto obligado a desplazarse a ra赤z de las amenazas recibidas. ※Nos hicimos eco del ataque en el que muri車 Morrugares, y como respuesta, dos d赤as despu谷s, atacaron a balazos nuestro taller de rotativas§, cuenta Zubillaga, cuyo peri車dico se ha visto obligado a suprimir su versi車n impresa a ra赤z de la balacera.
Zubillaga explica que, al tratarse de violencia ocasionada por el crimen organizado, las autoridades estatales se ※lavan las manos§ y apuntan a los niveles federales como responsables de la salvaguarda de la labor period赤stica. Aunque se han tomado algunas medidas por parte del Estado, como acompa?amiento policial en el desempe?o del trabajo y los llamados botones del p芍nico, estas medidas son ※insuficientes§ para el director de la Tarde de Iguala. ※Un homicidio se comete en segundos, y mediante el bot車n del p芍nico, se avisa a las autoridades, pero pueden tardar varios minutos en llegar§, argumenta.
El Estado de Guerrero acumula una bater赤a de ataques contra la prensa. En los 迆ltimos 5 a?os, han sido asesinados siete periodistas y un documentalista extranjero. La situaci車n ha ido a peor, asegura un portavoz de la APEG por tel谷fono. En lo que va de 2020, las agresiones contra la prensa suman 21, entre ellas 3 asesinatos, seg迆n el recuento que hace la asociaci車n. ※Sin ir m芍s lejos, el pasado fin de semana se registraron seis muertes por ejecuciones, algunas de ellas con desmembramientos§, dice Zubillaga. Tanto 谷l como desde la APEG indican que debido a esta situaci車n, hay noticias que han dejado de cubrirse como antes: ※No existe la misma libertad para ejercer nuestra labor§.
Natividad Ambrosio es otra reportera de Guerrero amenazada desde hace m芍s de 5 a?os. Con el aumento de la violencia en Iguala, tambi谷n se vio desplazada del lugar y afirma que ya no cubre apenas las notas sobre ejecuciones y violencia relacionadas con el crimen. Tambi谷n afirma que las autoridades no lo ponen f芍cil. ※Sobre todo pedimos que se respete nuestra profesi車n, a veces los gobiernos no toleran las cr赤ticas o las evidencias de corrupci車n§, cuenta. Muchas veces los ataques llegan desde esa orilla. ※Nos atacan verbalmente o nos desacreditan, nosotros pedimos respeto a nuestra labor§, dice. Y concluye: ※No pueden hacer de Iguala una zona de silencio§.
Del relato que Zubillaga da, se deduce que la situaci車n en Iguala es, cuanto menos, delicada.
〞?C車mo vive alguien en estas circunstancias?
〞Sin dormir, angustiado y con el temor permanente de que en cualquier momento puedo sufrir un ataque. Muchos disparan desde motos, imag赤nate cada vez que voy en mi veh赤culo y una se acerca, o que llego a un restaurante y hay una camioneta con aspecto dudoso. En todas partes acabas viendo sicarios y asesinos.
Zubillaga tiene familia. Se ha llevado con 谷l a sus hijos aprovechando que la escuela ahora es telem芍tica y as赤 ※alejarlos de la tragedia§ que vive. A迆n en medio de todo este infierno, hay cosas que merecen la pena: ※Mi pensamiento hoy es disfrutar de mis hijos y mi familia porque no s谷 hasta cuando voy a poder hacerlo, es lo 迆nico positivo que puedo sacar de esta situaci車n§.