Las familias buscan a ciegas a las v¨ªctimas de la tragedia: ¡°Necesito saber de mi hijo. Iban a mirar en la lista de cad¨¢veres¡±

Desesperaci¨®n y angustia ante la perspectiva de encontrar a un hijo, a un esposo, en la lista de fallecidos. Tras conocer la noticia del derrumbe de un vag¨®n en la l¨ªnea 12 del metro de Ciudad de M¨¦xico, decenas de familiares se han acercado al lugar del incidente para ara?ar cualquier informaci¨®n sobre el paradero de sus allegados. Otros acuden a la decena de hospitales a donde han sido trasladadas las v¨ªctimas. Hay al menos 25 muertos y 79 heridos.

Marisol Tapia, de 28 a?os, busca a su hijo, Brandon Geovanni Tapia, de 13 a?os, y a su esposo, Rigoberto Quiroz Garc¨ªa, de 28. Hab¨ªa hablado con ellos cinco minutos antes del accidente y le dijeron que ya estaban en Perif¨¦rico rumbo a casa. ¡°En lo que prend¨ª la tele, ya hab¨ªa sucedido la tragedia. Me vine en cuanto lo vi. Marqu¨¦, pero ninguno de los dos me contesta¡±, se?ala entre sollozos. Ella y su madre se encuentran a unos 50 metros de la Estaci¨®n Olivos donde ocurri¨® el accidente. Un filtro de polic¨ªa les impide acercarse m¨¢s. Y nadie les dice nada.

Tapia ha mandado a gente a buscar en el hospital. ¡°No me dan informes, pero necesito saber de mi hijo. No est¨¢ en la lista de lesionados, que iban a buscar en la lista de cad¨¢veres¡±, se?ala. Brandon vest¨ªa pantalones negros con franjas blancas, sudadera negra, mochila negra. Tambi¨¦n tiene un lunar en la cintura, en la parte izquierda, dice la madre. No se le ocurre alguna se?al que identifique a su esposo, pero ense?a una fotograf¨ªa de su celular. Viste camisa blanca y, bajo el cubrebocas, se le adivina una sonrisa.

A las puertas del hospital Belisario Rold¨¢n, familiares de heridos aguardan a que las autoridades sanitarias salgan a gritar las actualizaciones de la lista con los nombres de quienes son atendidos all¨ª. Lo hacen cada 15 minutos. El padre de Imer del ?guila, un hombre de 29 a?os que volv¨ªa de trabajar, espera nervioso escuchar el nombre de su hijo entre los atendidos. ¡°Vimos el accidente y le llamamos. Una persona respondi¨®, pero no sab¨ªa ad¨®nde se lo hab¨ªan llevado¡±, dice. La familia se ha repartido en varios hospitales sin ¨¦xito. ¡°No esper¨¢bamos que pasara algo as¨ª, estamos desesperados¡±. Su nombre no aparece en la lista que ha distribuido la secretar¨ªa de Gesti¨®n Integral de Riesgos, aunque hay algunos lesionados sin identificar.

Valentina tambi¨¦n espera novedades sobre su novio, Daniel Hern¨¢ndez, de 27 a?os, que volv¨ªa de trabajar en el metro. ¡°Lo dej¨¦ en la estaci¨®n para que tomara el metro de vuelta a su casa y luego pas¨® esto, me siento un poco culpable¡±, dice el padre de Valentina, mientras esperan que alguien en el hospital les diga c¨®mo est¨¢. Por una llamada a Locatel pudieron saber en qu¨¦ hospital estaba ingresado y que hab¨ªa sufrido una fractura abdominal. En la puerta del lugar no les dicen nada m¨¢s. La fiscal de Ciudad de M¨¦xico, Ernestina Godoy, ha llegado pasadas la una de la madrugada. Sin hacer declaraciones, ha entrado al centro mientras familiares de afectados le gritaban: ¡°?Que nos den informes, son nuestros familiares!¡±.

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