La Fiscal¨ªa de Nuevo Le¨®n confirma el hallazgo del cuerpo de Yolanda Mart¨ªnez
La joven, de 26 a?os, estaba desaparecida desde el 31 de marzo. Las autoridades, que sostuvieron durante semanas que se hab¨ªa ido por voluntad propia, localizan el cad¨¢ver en un terreno bald¨ªo a 30 kil¨®metros de donde se la vio por ¨²ltima vez
La Fiscal¨ªa de Nuevo Le¨®n ha tardado 38 d¨ªas en encontrar a Yolanda Mart¨ªnez Cadena. Las autoridades han localizado su cuerpo, ya en avanzado estado de descomposici¨®n, en un terreno bald¨ªo en Ju¨¢rez, un municipio en el extrarradio de Monterrey. El an¨¢lisis de ADN ha confirmado que el cad¨¢ver corresponde a la joven, de 26 a?os, as¨ª como la ropa y las pertenencias halladas en el lugar. Todav¨ªa no se ha precisado la causa de la muerte. Mart¨ªnez estaba desaparecida desde el 31 de marzo y durante semanas la Fiscal¨ªa estatal sostuvo que se hab¨ªa marchado por voluntad propia. Fue la insistencia de su padre, Gerardo Mart¨ªnez, y su lucha por encontrarla lo que oblig¨® a las autoridades a iniciar los rastreos. El hallazgo de Yolanda redobla la indignaci¨®n en un Estado asediado en las ¨²ltimas semanas por una crisis de desaparecidas.
En el momento en el que Gerardo Mart¨ªnez era ingresado el domingo en un hospital por una bajada de presi¨®n, despu¨¦s de semanas sin dormir, una vecina de Los Huertos encontraba el cuerpo de una joven al internarse a por le?a en un ¨¢rea de matorrales al sur de la zona metropolitana. La Fiscal¨ªa anunci¨® muy pronto que la ropa se correspond¨ªa con la que llevaba Yolanda el d¨ªa de su desaparici¨®n: blusa negra, pantalones de mezclilla y tenis blancos. El cad¨¢ver fue trasladado al servicio forense, donde las pruebas cient¨ªficas han confirmado este lunes la identidad de la joven.
El ¨¢rea del hallazgo est¨¢ muy cerca del domicilio familiar, a unos cuatro kil¨®metros de donde Yolanda viv¨ªa desde hac¨ªa un par de meses con su padre, su hermano, su t¨ªo y su abuela; pero a m¨¢s de 30 kil¨®metros del punto en el que se la vio por ¨²ltima vez. El 31 de marzo a mediod¨ªa, la joven sali¨® de la vivienda de su abuela materna en la colonia Constituyentes de Quer¨¦taro, en San Nicol¨¢s de los Garza. Su padre cree que sali¨® a entregar una solicitud de empleo, puesto que hab¨ªa ido a imprimirla y desde hac¨ªa un mes estaba buscando trabajo. A las 11.27 horas, la joven es captada caminando por una c¨¢mara sobre la calle Ismael Pintado hacia la avenida Conductores. A partir de ah¨ª, Yolanda se esfuma.
¡°Ah¨ª se la trag¨® la tierra, ah¨ª me la levantaron, me la desaparecieron y yo siento que ya no est¨¢, ?por qu¨¦? Porque son muchos d¨ªas. Yo pensaba encontrarla inmediatamente, pero no lo logr¨¦¡±, dijo Gerardo Mart¨ªnez a final de abril en una entrevista con EL PA?S. ¡°Cada vez que dicen ¡®un cuerpo encontrado¡¯, todos los padres que andamos en la b¨²squeda quisi¨¦ramos que no fuera ninguna, pero tiene que ser una. Ha pasado con Debanhi y Mar¨ªa Fernanda: no las buscaron a tiempo¡±, dice de corrido Mart¨ªnez.
Mart¨ªnez consigui¨® poner la denuncia por desaparici¨®n el 4 de abril ¡ªdespu¨¦s de varios d¨ªas de falla en el sistema por internet de la Fiscal¨ªa¡ª. Sin embargo, dos semanas despu¨¦s los agentes todav¨ªa no hab¨ªan iniciado la b¨²squeda. ¡°Yo pens¨¦ que no hizo efecto mi denuncia o que se les olvid¨®, as¨ª que llam¨¦ y me dijeron que siguiera en mi casa, que me fuera a trabajar, que yo ya hab¨ªa puesto la denuncia, que esperara¡±, explicaba Gerardo desesperado. Pasaron los d¨ªas y ni los investigadores llegaban ni su hija regresaba. As¨ª que Mart¨ªnez inici¨® solo los rastreos, solo repart¨ªa los carteles con el rostro de Yolanda.
Este hombre, amable y destrozado, repet¨ªa cada d¨ªa los recorridos que pudo haber hecho su hija: cronometraba los tiempos de espera en los autobuses, med¨ªa lo que tardaban los trayectos, tomaba varias rutas probando a ver qu¨¦ pudo hacer ella ese d¨ªa. Mientras, trataba de localizar c¨¢maras que hubieran podido grabarla.
Fue la insistencia de Gerardo Mart¨ªnez y la presi¨®n medi¨¢tica, disparada por el hallazgo del cuerpo de Debanhi Escobar, de 18 a?os, al interior de una cisterna, los que posicionaron la b¨²squeda de Yolanda. Pero no fue hasta un mes despu¨¦s de su desaparici¨®n que se ofreci¨® una recompensa por su paradero o que el gobernador, Samuel Garc¨ªa, recibi¨® a Gerardo. ¡°Con lo de Debanhi all¨¢ andaban toda la comitiva y yo estaba solo. Entonces, yo pens¨¦: ¡®Qu¨¦ bueno que busquen a esta ni?a, porque a lo mejor est¨¢ en el mismo lado que mi hija y aparecen todas¡±, dijo.
Los fallos se le acumulan a la Fiscal¨ªa de Nuevo Le¨®n. Las deficiencias en las b¨²squedas de Mar¨ªa Fernanda Contreras, Debanhi Escobar y Yolanda Mart¨ªnez han acorralado a la instituci¨®n, que se ha visto obligada a despedir a su fiscal Antisecuestros y al de B¨²squeda de Personas Desaparecidas. Todav¨ªa no hay una l¨ªnea de investigaci¨®n firme que explique qu¨¦ ocurri¨® el 31 de marzo con Yolanda o el 9 de abril con Debanhi. Tampoco hay rastro de Celeste Tranquilino, de 16 a?os, que desapareci¨® el mismo d¨ªa que Yolanda Mart¨ªnez y tambi¨¦n en Ju¨¢rez, cuando sal¨ªa de su escuela preparatoria. Ante la falta de resultados contin¨²an las cifras: 57 mujeres desaparecidas y 56 asesinadas en Nuevo Le¨®n en los primeros meses del a?o.
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