El discurso del jefe del Ej¨¦rcito en un acto de la Comisi¨®n de la Guerra Sucia desconcierta a las v¨ªctimas

Parec¨ªa un acto protocolario, la celebraci¨®n de un hito en M¨¦xico, la apertura de instalaciones y archivos militares a la Comisi¨®n que investiga la Guerra Sucia. El Gobierno hab¨ªa convocado a la prensa en el Campo Militar N¨²mero uno, que comparten la capital y el Estado de M¨¦xico, una ciudad dentro de otra. La idea era celebrar el cambio de paradigma, la transparencia de las Fuerzas Armadas. Y as¨ª ha empezado hasta que, de repente, el ambiente se ha enrarecido.

Despu¨¦s de los discursos de v¨ªctimas, familiares y del subsecretario de Derechos Humanos de la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n, Alejandro Encinas, el general Luis Crescencio Sandoval, jefe del Ej¨¦rcito, ha tomado a palabra. Lejos del tono de los anteriores, Sandoval ha adoptado un discurso que reivindicaba a las Fuerzas Armadas, incluso durante la Guerra Sucia, las casi tres d¨¦cadas de represi¨®n orquestada desde el Estado, ejecutada en buena parte por el mismo Ej¨¦rcito.

¡°Se encuentran presentes militares y familiares que fueron afectados por los hechos ocurridos en aquel entonces¡±, ha dicho el secretario. ¡°Con orgullo les expreso que L¨®pez Obrador autoriz¨® a inscribir los nombres de militares fallecidos con motivos de los hechos del pasado en el monumento a los ca¨ªdos de las Fuerzas Armadas, como un tributo y un sentido homenaje a los soldados que cumplieron con su deber aun a costa de su vida¡±, ha a?adido.

Ha sido pr¨¢cticamente el final de su intervenci¨®n, abucheada por familiares y sobrevivientes de la represi¨®n estatal, que han elevado sus pancartas y ensayado un canto gritado mil veces: ¡°Vivos se los llevaron, vivos los queremos¡±. Desde la tribuna, Micaela Caba?as, hija del l¨ªder guerrillero asesinado Lucio Caba?as, registraba lo que ocurr¨ªa con su celular. Minutos antes, Caba?as hab¨ªa contado c¨®mo ella y su madre estuvieron detenidas all¨ª mismo, en el campo militar, hace 48 a?os. C¨®mo violaron y torturaron a su madre: ¡°Ella me dec¨ªa que los militares me tomaban de un pie y me pon¨ªan una pistola en la cabeza. ¡®Dinos donde est¨¢ Lucio, dinos¡¯, dec¨ªan¡±. Micaela Caba?as ten¨ªa entonces dos meses y su madre, 14 a?os.

El tono de Sandoval ha sorprendido y enfadado a las v¨ªctimas y sus familias, que han sufrido la ignorancia del Estado durante d¨¦cadas. La Comisi¨®n, creada por voluntad del presidente, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, supone para ellos la ¨²ltima oportunidad de que se haga justicia, de conocer el contenido de archivos de la ¨¦poca, de ubicar los espacios por donde pudieron pasar los suyos durante la represi¨®n.

Alicia de los R¨ªos, hija de una mujer desaparecida en la d¨¦cada de 1970, ha escuchado el discurso del jefe militar tambi¨¦n desde la tribuna. Su intervenci¨®n ha precedido la del general. En entrevista con EL PA?S al acabar el evento, la mujer ha se?alado su enfado por el intento de Sandoval de igualar a las v¨ªctimas militares con las de la contrainsurgencia. ¡°Ellos iban a combatir civiles, quer¨ªan exterminarlos. Su actuar no era defensivo, era tendente al exterminio, lo cual nos diferencia¡±, ha argumentado.

De los R¨ªos ha a?adido: ¡°Si su prop¨®sito es inscribir en la historia dorada patri¨®tica a los soldados ca¨ªdos, la nuestra por la verdad y la justicia¡±. Para la mujer, ¡°las tensiones contin¨²an porque es un conflicto vivo. Viendo todo el evento¡­ Lo de Sandoval es un reflejo de las tensiones no resueltas, las demandas no resueltas. Estamos intentando romper inercias. Es lo que hemos visto hoy, una inercia, una resistencia a aceptar a nuestros familiares opositores como protagonistas de la historia¡±.

Una buena noticia

M¨¢s all¨¢ del discurso de Sandoval, el evento ilustra una buena noticia: la apertura de archivos e instalaciones militares para el escrutinio de los expertos de la Comisi¨®n de la verdad. Como ha dicho L¨®pez Obrador en su intervenci¨®n, posterior a la del general secretario, ¡°es un acto de esperanza, un acto para buscar entre todos cerrar una etapa, una historia negra de sufrimiento, de represi¨®n¡±.

Antes que el mandatario, el subsecretario Encinas ha intentado describir la magnitud del aparato represivo. ¡°En este lugar, en junio de hace 46 a?os, se instal¨® una de las organizaciones represivas m¨¢s temidas de este pa¨ªs, la Brigada Blanca, integrada por Direcci¨®n Federal de Seguridad, Polic¨ªa Judicial Federal, la polic¨ªa del Distrito Federal y la Polic¨ªa Militar. Desde aqu¨ª, hace 51 a?os se implement¨® el Plan Telara?a, para desarticular las guerrillas de Lucio Caba?as y Genaro Rojas. Desde Lomas de Sotelo (as¨ª se conoce al cuartel general del Ej¨¦rcito) se emiti¨® un telegrama a Chilpancingo, ordenando hostigar, capturar o exterminar a las guerrillas que actuaron en esa regi¨®n¡±, ha dicho.

En entrevista con este diario, Aleida Garc¨ªa, integrante de la Comisi¨®n, detalla los caminos a explorar en los pr¨®ximos meses. ¡°Junto con la Comisi¨®n Nacional de B¨²squeda haremos reconocimiento de algunos sitios, se?alados por sobrevivientes como lugares de detenci¨®n, donde estuvieron personas desaparecidas, el Campo Militar N¨²mero Uno, Pie de la Cuesta en Guerrero¡­ Uno de los objetivos es identificar los espacios donde pudo haber detenidos. Sobrevivientes hablan de s¨®tanos, por ejemplo¡­ Ese reconocimiento se va a hacer junto a ellos¡±, explica.

Otro de los caminos es la b¨²squeda documental. ¡°Hay una lista de posibles fondos documentales¡±, a?ade la experta, ¡°el equipo t¨¦cnico identific¨® algunos: el archivo del Estado Mayor Presidencial, el archivo del Estado Mayor de la Secretar¨ªa de la Defensa Nacional, el Segundo Batall¨®n de Polic¨ªa Militar, el del batall¨®n de Fusileros paracaidistas y tambi¨¦n de algunas zonas militares, adem¨¢s de lo que est¨¢ concentrado aqu¨ª en Ciudad de M¨¦xico¡±.

Para Camilo Vicente Ovalle, parte del equipo t¨¦cnico que menciona Garc¨ªa y uno de los mayores conocedores de la represi¨®n en Guerrero, ¡°la apertura es importante, nunca hab¨ªa sucedido. Y que el inicio sea en el Campo Militar N¨²mero Uno es relevante¡±, defiende.

¡°Una de las grandes tareas pendientes es cuantificar el n¨²mero de personas que pudieron haber pasado por all¨ª, sujetas de desaparici¨®n transitoria¡±, dice en referencia a la instalaci¨®n militar. ¡°F¨ªjate, solo en el caso de Guerrero, se identific¨® 205 o 206 personas sobrevivientes que pasaron por alguna de las instalaciones de fuerzas de seguridad civiles o militares¡±.

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