Denuncias de tortura y hostigamiento del gobernador: la pesadilla de Ang¨¦lica S¨¢nchez, la jueza presa en Veracruz
La Fiscal¨ªa estatal le acusa de delitos contra la fe p¨²blica y tr¨¢fico de influencia tras liberar a un hombre acusado de homicidio por no tener pruebas suficientes en su contra. Organizaciones civiles denuncian un atropello a la independencia judicial
Ang¨¦lica S¨¢nchez Hernandez era, hasta hace unos 20 d¨ªas, una jueza de control de la ciudad de Cosamaloapan, en el Estado de Veracruz. Llevaba 25 a?os trabajando en la justicia, pero una resoluci¨®n que emiti¨® a principios de este mes le ha llevado ahora a la c¨¢rcel. En apenas unos d¨ªas ha pasado a ser la presa m¨¢s debatida en todo M¨¦xico. Suspendida por el Poder Judicial estatal, la jueza es acusada por la Fiscal¨ªa estatal de delitos contra la fe p¨²blica y tr¨¢fico de influencia. Su defensa respalda el trabajo de la jueza durante su larga carrera y asegura que los ¡°hostigamientos¡± desde la justicia y el Gobierno estatal comenzaron despu¨¦s de que ella decidiera liberar a un hombre acusado de homicidio por no tener pruebas suficientes en su contra. S¨¢nchez ha recibido el respaldo de decenas de organizaciones civiles y juristas mexicanos que denuncian su arresto como un atropello a la independencia judicial.
La pesadilla de S¨¢nchez, de 57 a?os, comenz¨® el 27 de agosto del a?o pasado, cuando le toc¨® juzgar a una persona que ten¨ªa se?alamientos de ser parte del crimen organizado, un hombre llamado Itiel Palacios, alias El Compa Playa. El Ministerio P¨²blico le acusaba del homicidio de dos personas en un palenque en abril de 2018. En esa ocasi¨®n, la jueza fall¨® a favor de vincular a proceso al detenido por los dos asesinatos, seg¨²n cuenta una de las abogadas de S¨¢nchez, Sof¨ªa de Robina. Ante esa decisi¨®n, Palacios interpuso un amparo ante un juez federal, que pidi¨® que el proceso se restituyera porque se hab¨ªan usado pruebas recolectadas por la Fiscal¨ªa que no eran v¨¢lidas.
El caso de Palacios volvi¨® entonces a recaer el 3 de junio en S¨¢nchez, que ten¨ªa la orden de evaluar nuevamente la vinculaci¨®n a proceso. ¡°En su consideraci¨®n como jueza y a partir del estudio que hizo¡±, dice la abogada de la Defensor¨ªa P¨²blica, ¡°ya no ten¨ªa elementos de prueba suficientes para vincularlo y lo que correspond¨ªa era ponerle en libertad¡±. Esa decisi¨®n abri¨® la puerta a una serie de se?alamientos en su contra, encabezados por el gobernador Cuitl¨¢huac Garc¨ªa (Morena), que comenzaban por mentirosa y terminaban en corrupta. El mandatario estatal ha asegurado varias veces de que hay indicios que vinculan a la jueza con la defensa de Palacios, pero m¨¢s all¨¢ de las acusaciones p¨²blicas no ha mostrado una sola prueba.
El 5 de junio pasado, dos d¨ªas despu¨¦s de que ordenara la liberaci¨®n de Palacios, la jueza fue detenida en un operativo de la polic¨ªa estatal de Veracruz. Le acusaban supuestamente de disparar contra los agentes. Sin embargo, la mujer cont¨® luego que eso nunca hab¨ªa pasado, que hab¨ªa sido llevaba por polic¨ªas a un sitio donde la encerraron durante cinco horas con la cabeza tapada, la mantuvieron incomunicada y la torturaron psicol¨®gicamente. Adem¨¢s, asegur¨®, le obligaron a disparar un arma de fuego para simular el supuesto ataque. A las horas, S¨¢nchez fue liberada porque no hab¨ªa pruebas suficientes en su contra. Esta detenci¨®n irregular fue el puntapi¨¦ para que el Instituto Federal de la Defensor¨ªa P¨²blica se sumara a su defensa.
La pol¨¦mica sobre S¨¢nchez, egresada de la Universidad Veracruzana, trascendi¨® todas las fronteras nacionales. Diez d¨ªas despu¨¦s de aquella primera detenci¨®n, cuando un comando de la Guardia Nacional sin identificarse la volvi¨® a arrestar en un hotel de Ciudad de M¨¦xico, todas las alertas se encendieron. El pa¨ªs comenz¨® a hablar de ella, y decenas de organizaciones civiles, juristas y especialistas en el tema condenaron la persecuci¨®n por parte de la clase pol¨ªtica, puntualmente del gobernador Garc¨ªa y el presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, hacia ella y hacia todos los jueces. El caso se da en medio de una guerra que mantiene el Gobierno mexicano contra el Poder Judicial.
En este contexto, S¨¢nchez se someti¨® este mi¨¦rcoles a una audiencia para ver si la vinculaban a proceso. La jornada estuvo marcada otra vez por irregularidades. Por un lado, el juez no permiti¨® que la Defensor¨ªa P¨²blica representara a la jueza, argumentando que no pod¨ªa mezclar defensores p¨²blicos y privados. Tampoco permiti¨® que ingresara una delegaci¨®n de la Oficina en M¨¦xico del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos. La audiencia se hizo a puertas cerradas, pese a garant¨ªa de publicidad que existe en M¨¦xico respecto a los procesos judiciales. Despu¨¦s de varias horas, el tribunal opt¨® por vincularla a proceso por los dos delitos.
De Robina explica a este peri¨®dico que la acusaci¨®n por el delito contra la fe p¨²blica ¡ªque significa la falsificaci¨®n de un documento¡ª se debe a que, entre los papeles que complet¨® la jueza, introdujo en uno de ellos el n¨²mero de amparo err¨®neamente. ¡°Cuando mete el amparo se equivoca en un n¨²mero¡±, dice la defensora. ¡°El juicio de amparo que hizo constar no correspond¨ªan al quejoso ni la materia¡±, ha defendido la Fiscal¨ªa de Veracruz en un comunicado este mi¨¦rcoles. En cuanto al tr¨¢fico de influencias, lo que se le acusa es haber llamado y escrito correos electr¨®nicos al penal de Coahuila, donde estaba detenido Palacios, para pedir su liberaci¨®n despu¨¦s de que decidiera no vincularlo a proceso. ¡°Era parte de asegurarse de que sus decisiones se materialicen¡±, se?ala la abogada.
Uno de los puntos m¨¢s pol¨¦micos surgi¨® el fin de semana pasado, cuando el tribunal le dio un a?o de prisi¨®n preventiva por dos delitos a los que normalmente no se les otorga este tipo de medida por no ser considerados graves. El argumento del juez ha sido su falta de arraigo, ya que despu¨¦s de la primera detenci¨®n, la polic¨ªa busc¨® a la jueza en su domicilio, pero no la encontr¨®. Su abogada ha explicado que no se anim¨® a volver a su casa por miedo a que la volvieran a detener y a torturar.
El caso ha abierto un debate sobre la falta de independencia del Poder Judicial con respecto a los Gobiernos federal y estatal. Las l¨ªneas se han desdibujado a tal punto que Cuitl¨¢huac Garc¨ªa se erigi¨® estos d¨ªas como el m¨¢ximo defensor y vocero del trabajo de la Fiscal¨ªa y del juez que lleva el caso de S¨¢nchez. El gobernador incluso carg¨® este jueves contra la ONU por ¡°intromisi¨®n¡± por querer ¡°romper con la legalidad de un pa¨ªs libre y soberano¡±. Garc¨ªa acus¨® adem¨¢s al Alto Comisionado de Derechos Humanos de ¡°ignorar la Constituci¨®n¡± mexicana por buscar presenciar la audiencia judicial del mi¨¦rcoles. ¡°Sus pretensiones pudieron violentar una audiencia¡±, ha dicho.
La c¨¢rcel est¨¢ al alcance de cualquiera en Veracruz. Al menos una decena de pol¨ªticos opositores a Garc¨ªa fue encarcelada en los ¨²ltimos a?os con causas judiciales plagadas de irregularidades. All¨ª fue encerrado, y posteriormente liberado, el secretario t¨¦cnico del Senado, Jos¨¦ Manuel del R¨ªo, acusado de homicidio. Tres antiguos comisionados del Instituto Veracruzano de Acceso a la Informaci¨®n tambi¨¦n permanecen en prisi¨®n por delitos de coacci¨®n, abuso de autoridad y ejercicio indebido del servicio p¨²blico, acusaciones que recibieron despu¨¦s de haber hecho p¨²blicas informaciones que desataron el enojo del Gobierno estatal. Las detenciones retratan la situaci¨®n cr¨ªtica que se vive en un Estado donde todav¨ªa hay personas detenidas por ¡°ultraje a la autoridad¡±, un delito invalidado por la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n.
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