El sem¨¢foro que ya no fue

En el Diario Oficial de la Federaci¨®n del pasado 27 de julio se public¨® el ¡°Acuerdo por el que se da a conocer el medio de difusi¨®n de la nueva metodolog¨ªa del sem¨¢foro por regiones para evaluar el riesgo epidemiol¨®gico que representa la enfermedad grave de atenci¨®n prioritaria COVID-19¡±. La brevedad del texto es inversamente proporcional a la longitud de su t¨ªtulo. En su parte sustantiva, dispone que la Secretar¨ªa de Salud dar¨¢ a conocer la nueva metodolog¨ªa en el sitio web coronavirus.gob.mx/sem¨¢foro y que dos semanas despu¨¦s de haber recibido la ¨²ltima dosis, las personas vacunadas contra el virus SARS-CoV-2 dejar¨¢n de ser consideradas poblaci¨®n vulnerable.

De manera por dem¨¢s importante, en el segundo art¨ªculo transitorio se abroga el anexo ¡°Sem¨¢foro por regiones¡± del ¡°Acuerdo por el que se establece una estrategia para la reapertura de las actividades sociales, educativas y econ¨®micas, as¨ª como un sistema de sem¨¢foro por regiones para evaluar semanalmente el riesgo epidemiol¨®gico relacionado con la reapertura de actividades en cada entidad federativa, as¨ª como se establecen acciones extraordinarias¡±, publicado en el Diario Oficial de la Federaci¨®n del 14 de mayo de 2020. En la p¨¢gina web citada se public¨® la versi¨®n 6.1 de los ¡°Lineamientos para la estimaci¨®n de riesgos del sem¨¢foro por regiones Covid-19¡±, de fecha 27 de julio del 2021. Por lo mismo me parece posible considerar que hasta su modificaci¨®n, lo dispuesto en estos lineamientos ser¨¢ la metodolog¨ªa que regir¨¢ lo relacionado con el sem¨¢foro y una parte importante de sus implicaciones.

Lo primero que llama la atenci¨®n de la nueva metodolog¨ªa es el modo en que se da a conocer. El acuerdo del secretario de Salud no dispone cu¨¢l es esta, en tanto remite a la citada p¨¢gina de internet. Ser¨¢ por este medio, y no por el Diario Oficial como se den a conocer normas jur¨ªdicas que imponen ¨Ccomo luego expondr¨¦¡ª obligaciones jur¨ªdicas a las autoridades y a los particulares. Aqu¨ª hay ya un primer problema, no derivado de un entendimiento forzado de las formas jur¨ªdicas, sino simplemente de las maneras en las que debe operarse para que las determinaciones sean finalmente v¨¢lidas y produzcan los efectos deseados.

Con independencia de este tropiezo t¨¦cnico, ?cu¨¢l es el contenido de los lineamientos para la estimaci¨®n de los riesgos del sem¨¢foro? Los mismos pueden agruparse en tres categor¨ªas: los relacionados con los cambios en los indicadores; los vinculados con el modo y forma de construir y emitir la informaci¨®n de los riesgos, as¨ª como los relativos a sus efectos jur¨ªdicos. En cuanto al primer aspecto, se calibraron los indicadores de riesgo en los puntos de corte para comprender lo siguiente: n¨²mero de reproducci¨®n efectiva de COVID-19; las tasas de incidencia de casos estimados activos, de mortalidad y de casos hospitalizados por 100.000 habitantes. Asimismo, se consideraron los porcentajes referentes a las camas generales ocupadas en los hospitales de la red hospitalaria para la atenci¨®n de infecciones respiratorias agudas graves, al de camas con ventilador ocupadas en los hospitales de la misma red hospitalaria y al semanal de positividad al virus SARS-CoV-2.

Por su parte, se consideraron las tendencias de casos hospitalizados, de casos de s¨ªndrome covid-19 y de la tasa de mortalidad por 100.000 habitantes como en los umbrales de puntaje total. Finalmente se modific¨® la forma de ponderar estos valores de un modo que, para decirlo de manera clara, expresamente busca que ¡°las entidades transiten entre niveles de riesgo bajo y moderado la mayor parte del tiempo, y que pasar a los niveles de riesgo epid¨¦mico alto y m¨¢ximo, se entienda como una verdadera alerta sanitaria¡±. Lo anterior busc¨® alcanzarse al distribuir homog¨¦neamente el puntaje total, de forma que la mitad del puntaje abarca los niveles de menor riesgo (bajo y moderado) y el otro 50% abarca los niveles de mayor riesgo (alto y extremo).

En cuanto a la manera de recoger y producir la informaci¨®n, los lineamientos disponen que los cortes se llevar¨¢n a cabo los lunes de cada semana a partir de los datos que rindan las entidades federativas de acuerdo con los respectivos sistemas de informaci¨®n para la vigilancia y atenci¨®n de la emergencia sanitaria. A partir de lo anterior, los martes se verificar¨¢n el an¨¢lisis y preparaci¨®n de los datos capturados, los mi¨¦rcoles se enviar¨¢n a las autoridades sanitarias de las entidades federativas a fin de que los jueves los analicen, y puedan publicarse por la Secretar¨ªa de Salud los viernes de cada quince d¨ªas, para comenzar su vigencia a partir del siguiente lunes.

En lo que hace a la vinculaci¨®n al sem¨¢foro construido con base en los lineamientos, hay dos aspectos a se?alar. El primero es que lejos de imponer una condici¨®n de obligatoriedad sobre las autoridades, se dispone que ¡°las entidades federativas deber¨¢n presentar su plan de implementaci¨®n, seguimiento y vigilancia a las actividades socioecon¨®micas de acuerdo con el nivel de riesgo epid¨¦mico¡±, ello debido a que las mismas son consideradas como gu¨ªa ¡°para las poblaciones y las autoridades sanitarias locales para la toma de decisiones en el ¨¢mbito personal y colectivo¡±. A esta notable ambig¨¹edad, se suma otra m¨¢s compleja y determinante.

Al presentar el sem¨¢foro por colores, en la gu¨ªa se relacionan en t¨¦rminos matriciales los niveles de riesgos y las actividades prohibidas. Sin embargo, esto se hace de manera ejemplificativa y, tal vez por ello, con un lenguaje altamente equ¨ªvoco. En cuanto a lo ejemplificativo hay un problema serio, pues al haberse abrogado el anexo del acuerdo publicado en el Diario Oficial del 14 de mayo de 2020, la determinaci¨®n del sem¨¢foro qued¨® reducida a lo que prevea el propio acuerdo del 27 de julio pasado. Dicho de otra forma, no hay ning¨²n documento al cual remitirse, de manera que las ejemplificaciones terminan por ser meras sugestiones. Lo que se perdi¨® fue la capacidad de correlacionar los colores con las actividades y la descripci¨®n de estas. En cuanto al problema del lenguaje utilizado en lo que de cualquier manera siguen siendo ejemplos, los efectos son igualmente graves. En los supuestos de color verde habr¨¢ movilidad sin restricciones, en los amarillos la disminuci¨®n ligera en el espacio p¨²blico, en la naranja reducci¨®n de movilidad comunitaria y en los rojos se ordena quedarte en casa.

Visto en su conjunto, el acuerdo genera m¨¢s problemas que soluciones. La fuente jur¨ªdica de los lineamientos es inadecuada; la abrogaci¨®n del anexo anterior ¨Cm¨¢s all¨¢ de sus propios problemas inherentes¡ª deja vac¨ªos que el nuevo ordenamiento no llena; el lenguaje utilizado es ambiguo y provocar¨¢ serios problemas interpretativos. Finalmente, el uso de un lenguaje que, simult¨¢neamente alude tanto a la obligaci¨®n como a la mera gu¨ªa, ¨²nicamente enreda las ya de por s¨ª confusas y complejas condiciones que en el pa¨ªs se est¨¢n realizando para enfrentar la pandemia. Como en otras ocasiones, nuestras autoridades federales perdieron una buena oportunidad para hacer valer sus atribuciones. Ah¨ª donde debi¨® haber habido conocimientos t¨¦cnicos, incluidos los jur¨ªdicos, termin¨® por haber improvisaci¨®n. Los costos de tan mal actuar desafortunadamente ser¨¢n visibles en las pr¨®ximas semanas y en los a?os por venir.

@JRCossio

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