※Quiero bajar una feria, cons赤gueme un helic車ptero§; formas de extorsi車n desde la c芍rcel
La coerci車n en muchas c芍rceles de M谷xico es, cuando menos, tolerada. Autoridades y custodios saben que sucede y no hacen nada para impedirlo
- Quiero bajar una feria, cons赤gueme un helic車ptero.
Entonces va la borrega 每forma en la que llaman en la c芍rcel a los presos que funjen como mensajeros每 al 迆ltimo de los dormitorios donde, en una mesa, se encuentran exhibidos los celulares para renta. Hace la fila, paga por un d赤a del ※helic車ptero§ y con tel谷fono en mano cruza el patio, se mezcla entre los dem芍s presos y lo entrega al extorsionador. ?l, a cambio, le da ...
- Quiero bajar una feria, cons赤gueme un helic車ptero.
Entonces va la borrega 每forma en la que llaman en la c芍rcel a los presos que funjen como mensajeros每 al 迆ltimo de los dormitorios donde, en una mesa, se encuentran exhibidos los celulares para renta. Hace la fila, paga por un d赤a del ※helic車ptero§ y con tel谷fono en mano cruza el patio, se mezcla entre los dem芍s presos y lo entrega al extorsionador. ?l, a cambio, le da cien pesos por el mandado.
El extorsionador se va a su dormitorio, ah赤 lo espera su compa?ero quien fingir芍 la voz de la v赤ctima y comienzan a marcar aleatoriamente:
- Bueno s赤# ?qui谷n habla?
Fingen entonces la voz de una ni?a secuestrada, despu谷s cambian la voz al supuesto secuestrador:
- Si quiere volver a ver a su hija deposite en Coppel 20.000 varos [pesos] hoy. La vamos a estar viendo, comadre. Afuera de su casa est芍 mi gente.
Cuelgan, el interlocutor no cay車 en la extorsi車n. Vuelven a intentar con otro n迆mero. Tienen todo el d赤a#todos los d赤as.
La extorsi車n en muchas c芍rceles de M谷xico es, cuando menos, tolerada. Autoridades y custodios saben que sucede y no hacen nada para impedirlo. De hecho, hasta participan siendo ellos mismo quienes rentan los celulares o permiten su entrada a prisi車n. Pero, ?por qu谷 es tan com迆n la corrupci車n en los centros penitenciarios? La respuesta la saben en el Gobierno: por las condiciones laborales del personal de custodia y las condiciones de internamiento de las personas privadas de la libertad.
Las jornadas de trabajo son extenuantes, desde el trayecto para llegar a los Centro Penitenciarios que normalmente est芍n fuera de las ciudades o en las periferias, hasta los horarios que generalmente son de 24 x 48 horas, en las que las personas dedicadas a la seguridad est芍n en constante riesgo, exposici車n a la violencia y estr谷s, lo que repercute en un desgaste f赤sico y mental que no es atendido por las autoridades administrativas. A esto se le suman sus bajos sueldos que, en los penales locales, ronda los 8.000 pesos al mes, es decir, apenas por encima del salario m赤nimo, que poco compensa el riesgo y la calidad de vida que obtienen por su trabajo.
Adem芍s, los custodios tienen la certeza de que los inhibidores de se?al del Centro Penitenciario ※misteriosamente§ no sirven y las autoridades administrativas no los reparan.
- Si no dejo pasar el celular yo, lo va a dejar pasar mi compa?ero. Igual van a hacer sus llamadas y 谷l se va a quedar la lana.
Es como si la mesa estuviera puesta: corrupci車n por necesidad o por conveniencia. Si no lo hacen por dinero, lo hacen por amenazas de los presos o de sus propios jefes, porque la corrupci車n por extorsi車n no se queda en el personal de custodia. Es una cadena que, para poder existir, necesita la complicidad de los altos cargos. Por otro lado est芍n las condiciones carcelarias. Todo en la c芍rcel cuesta, hasta el papel de ba?o. No exagero: las autoridades pasan lista tres veces al d赤a y lo com迆n es que cada reo entregue a las autoridades cinco pesos por cada pase.
Desde su ingreso, los internos tienen que chambear para conseguirse la vida ah赤 dentro y la realidad es que en los centros penitenciarios existen escasas posibilidades de trabajo legal y remunerado. Entonces, en esa micro sociedad, los m芍s pobres les hacen la comida o la limpieza a los que tienen con qu谷 pagarlo. Otros trabajan como mulas llevando y trayendo recados, celulares, droga, arriesg芍ndose al castigo a cambio de propinas. Otros m芍s delinquen desde ah赤, desde la c芍rcel, que tendr赤a que ser el lugar m芍s controlado por el Estado.
En resumen: extorsionan porque los celulares entran por corrupci車n, corrupci車n facilitada por el Estado con las condiciones laborales que da al personal de custodia. Extorsionan porque los inhibidores de se?al no sirven y las autoridades no los arreglan. Extorsionan porque no hay capacitaci車n para el trabajo ni trabajo remunerado dentro de prisi車n y subsistir ah赤 cuesta cada d赤a. Extorsionan tambi谷n porque no hay consecuencias: todos, Estado y delincuencia, est芍n coludidos para que eso suceda.
Ante el aumento de un 47% en las extorsiones durante este sexenio, o赤 perpleja las medidas que proponen la Secretaria de Seguridad Ciudadana, Rosa Icela Rodr赤guez, y la Secretaria de Gobernaci車n, Luisa Mar赤a Alcalde: una iniciativa de reforma Constitucional que propone que la extorsi車n se eleve a delito grave, aumentar las penas y evitar que los delincuentes salgan libres con facilidad.
?Tar芍n!
?Ignoran de verdad la perversidad del sistema de Justicia del que forman parte?
Una idea m芍s eficiente puede ser mejorar las condiciones laborales del personal de custodia, hacerse cargo de las condiciones paup谷rrimas y la corrupci車n al interior de los centros penitenciarios y activar los inhibidores de se?al en las c芍rceles. Pero eso requiere, justo, asumir la responsabilidad estatal en el aumento de las extorsiones.