El robo de miles de medicamentos oncol¨®gicos amenaza con agravar el desabasto en M¨¦xico
El Gobierno afirma estar investigando la desaparici¨®n de casi 38.000 piezas, pero la sociedad civil y los familiares de pacientes cuestionan la opacidad y reclaman que se garantice el suministro
El suministro de quimioterapias a los hospitales mexicanos ha sufrido un nuevo golpe. El robo de 37.956 piezas de medicamento oncol¨®gico, ocurrido hace una semana en un almac¨¦n de Ciudad de M¨¦xico pero dado a conocer m¨¢s recientemente, amenaza con ahondar el desabasto que arrastra el sistema p¨²blico de salud desde finales de 2018. Algunos productos sustra¨ªdos son esenciales para tratar la leucemia, primera causa de mortalidad infantil en el pa¨ªs. El presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha tildado el suceso de ¡°muy raro¡± esta ma?ana y ha afirmado que se est¨¢ investigando. La sociedad civil y los familiares, sin embargo, cuestionan la opacidad de las autoridades y reclaman claridad sobre c¨®mo se va a asegurar el suministro de medicamentos en los pr¨®ximos meses.
El 4 de octubre en la madrugada un grupo de personas armadas entr¨® a las instalaciones de la empresa Novag, en el sur de Ciudad de M¨¦xico. All¨ª estaba almacenado el cargamento fabricado por Kemex, un laboratorio argentino al que el Gobierno ha comprado medicamentos recientemente para tratar de tapar los numerosos agujeros en el suministro, ante la escasez de fabricantes en M¨¦xico. Novag era la encargada de distribuirlos. La empresa no comunic¨® el robo hasta el mi¨¦rcoles 7 de octubre, tres d¨ªas despu¨¦s, seg¨²n inform¨® Cofepris, la dependencia encargada de vigilar la calidad de los productos farmac¨¦uticos.
Las autoridades tardaron otros dos d¨ªas en emitir una alerta sanitaria y en reunirse con los familiares. ¡°No entend¨ªa nada¡±, explica Elena Garc¨ªa, madre de Alejandro, un ni?o con leucemia, sobre la reuni¨®n. ¡°Cuando me entero de que no lo robaron ni ese d¨ªa ni el de antes sino hac¨ªa una semana me pareci¨® muy extra?o. ?Por qu¨¦ no decirlo antes y abiertamente?¡±, se pregunta Garc¨ªa. Israel Rivas, portavoz del movimiento de padres, lo describe como ¡°un cuento chino¡±: ¡°Nos dijeron: 'Ocurri¨® una tragedia. Un comando fuertemente armado encabezado por un tr¨¢iler y dos veh¨ªculos entr¨® a las instalaciones y se lo llev¨®¡±, recuerda.
El Gobierno ha reconocido que el robo puede tener consecuencias sobre el acceso a tratamientos de quimioterapia. ¡°Ese inconveniente pone de manera inmediata una insuficiencia de abastecimiento que llevar¨¢ algunas semanas en reponerse. La compa?¨ªa que se contrat¨®, el laboratorio en Argentina, est¨¢ obligada a cumplir con el contrato para M¨¦xico, independientemente de que haya sufrido esta adversidad¡±, ha dicho el subsecretario de Salud, Hugo L¨®pez-Gatell. En cualquier caso, el funcionario se ha declarado tranquilo porque ¡°hay otros seis laboratorios a los que se les han contratado todos estos productos¡±. L¨®pez Obrador, por su parte, se ha limitado a decir que se concluir¨¢ la indagatoria, sin dar m¨¢s detalles. ¡°Nos cost¨® trabajo conseguir estos medicamentos, los trajimos de Argentina (...). Entonces, se est¨¢ haciendo la investigaci¨®n, no puedo hablar m¨¢s sobre el tema por cuestiones del sigilo que se requiere¡±, ha declarado esta ma?ana.
Tan solo las 5.280 cajas robadas de ciclofosfamida, muy com¨²n en el tratamiento de la leucemia, son suficientes para cubrir la demanda anual de un centro como el Hospital de Especialidades Pedi¨¢tricas de Tuxtla, en Chiapas, que acoge a 250 ni?os con c¨¢ncer, seg¨²n fuentes m¨¦dicas. Los 4.005 frascos robados de daunorrubicina, otra quimioterapia para leucemias, bastan para cubrir un a?o y medio. ¡°Parece mucho si se mide por hospital pero es una cantidad m¨ªnima para lo que se necesita en todo el pa¨ªs¡±, relativiza una m¨¦dico del hospital de Tuxtla con 20 a?os de experiencia y que prefiere guardar el anonimato.
Aun as¨ª, Alejandro Barbosa, director de Nariz Roja, una ONG dedicada a suministrar medicamentos oncol¨®gicos a los hospitales, alerta de que este ¨²ltimo episodio va a agravar el problema ya existente. ¡°Con eso se iba a garantizar el abasto hasta finales de a?o. De por s¨ª el cargamento era insuficiente, pero por lo menos hab¨ªa algo. Ahora no y la pregunta es qu¨¦ va a hacer el Gobierno¡±, apunta.
La comunicaci¨®n sobre el robo de parte del Gobierno ha estado llena de confusi¨®n. En un primer comunicado enviado a los padres el viernes 9 de octubre, Cofepris inform¨® que los medicamentos de Kemex almacenados a¨²n no contaban con registro sanitario. Esa referencia a la falta de registro desapareci¨® en un escrito posterior, hecho p¨²blico el 10 de octubre. En marzo de este a?o, el Gobierno argentino oblig¨® a Kemex a retirar dos lotes de ciclofosfamida, uno de los medicamentos robados, tras detectar inconsistencias en el producto.
Cofepris ha advertido que los medicamentos son ¡°para uso exclusivo del sector salud¡± y que no se pueden adquirir en ¡°farmacias particulares, hospitales privados o a trav¨¦s de internet y redes sociales¡±. Las autoridades temen que los productos terminen en el mercado negro, donde el desabasto ha provocado un incremento sustancial de los precios. La ciclofosfamida se llega a vender a 8.000 pesos (unos 375 d¨®lares) el frasco, cuando hace un a?o estaba en 2.000 (menos de 100 d¨®lares), seg¨²n relat¨® a este peri¨®dico personal del hospital pedi¨¢trico de la ciudad de Oaxaca, al sur del pa¨ªs.
Algunos de los productos sustra¨ªdos necesitan mantenerse en temperaturas de entre dos y cuatro grados cent¨ªgrados, una cadena de fr¨ªo que puede haberse roto a ra¨ªz del robo. Pese al aviso de las autoridades, los padres de ni?os con c¨¢ncer dicen que ante la falta de medicamentos ellos no se pueden quedar de brazos cruzados. ¡°Mi hijo necesita daunorrubicina. Si no hay y veo que me la ofertan, la voy a comprar¡±, dice Elena Garc¨ªa.
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