De buena familia

Durante d¨¦cadas o siglos, pertenecer a una buena familia era lo m¨¢s a lo que un ser humano pod¨ªa y deb¨ªa aspirar. Significaba, y significa, una elevada posici¨®n en la escala social, dinero y poder. M¨¢s poder cuanto m¨¢s dinero y m¨¢s dinero cuanto m¨¢s poder. Bien es cierto y conocido que las grandes fortunas no siempre han sido el resultado de un trabajo honrado, sino que m¨¢s bien han sido amasadas a veces gracias a actividades como la especulaci¨®n, la explotaci¨®n o la corrupci¨®n, pero, en este tema, el fin siempre ha justificado los medios. Apellidarse Pujol, en Catalu?a, durante d¨¦cadas, significaba pertenecer a la mejor de entre las buenas familias. Ahora la Justicia quiere sentar en el banquillo a todos sus miembros, acusados de una larga lista de delitos, de manera que, tal vez, se sienten en dicho banquillo como miembros de una muy buena y muy honorable familia, y se levanten de ¨¦l, si la Justicia los condena, como miembros de una organizaci¨®n criminal. Sea cual sea el final, siempre es reconfortante algo de justicia en medio de esta sociedad injusta y desigual en la que no es oro todo lo que reluce.

Sebasti¨¢n Fern¨¢ndez Izquierdo. Petrer (Alicante)