Empieza el baile
En las elecciones catalanas, los partidos de ¨¢mbito estatal se juegan mucho m¨¢s que el Govern, y los movimientos t¨¢cticos regresan con toda nitidez
La gesti¨®n de la emergencia se ha llevado muchas energ¨ªas, ha justificado errores, ha desmesurado la cr¨ªtica a otros, concentrados como estamos en este dram¨¢tico monotema. Y la pol¨ªtica ha vivido instalada en esa excepci¨®n. Tuvimos elecciones en verano en Galicia y Euskadi cuando apenas sal¨ªamos de la desescalada, elecciones sin grandes sorpresas a priori, sin m¨¢s emoci¨®n que confirmar el acierto de las encuestas. El foco segu¨ªa en la pandemia.
Pero ahora vuelve Catalu?a al centro de la escena. Sean cuando sean finalmente las elecciones, los partidos de ¨¢mbito estatal se juegan mucho m¨¢s que el Govern, y los movimientos t¨¢cticos regresan con toda nitidez.
El partido peque?o del Gobierno de coalici¨®n de Espa?a busca desesperadamente diferenciarse del grande. Una estrategia que inici¨® a la vuelta del verano y que se ha intensificado en las ¨²ltimas semanas. Unidas Podemos, que pese a estar en el Gobierno sigue comunicando m¨¢s activismo que gesti¨®n, agita todas las banderas que lo identifican: del S¨¢hara a los desahucios, de la monarqu¨ªa a las fusiones bancarias. Y huye de un pacto con Ciudadanos con el que presentarse ante su electorado catal¨¢n en el que disputa territorio a ERC.
El PSOE contiene la respiraci¨®n y las formas hasta aprobar los PGE, pero no deja escapar ocasi¨®n de mostrarse como el crisol donde se funden todas las posturas, un mensaje de centralidad para una Catalu?a exhausta de confrontaci¨®n. De momento, quita importancia p¨²blicamente a las diferencias que exhibe su socio y es una inc¨®gnita si ambos partidos calibran el riesgo de que la situaci¨®n se les vaya de las manos. Ayer mismo, protagonizaron un nuevo choque sobre la gesti¨®n de los planes de reconstrucci¨®n.
La debacle de Ciudadanos en las elecciones generales corri¨® por cuenta de Albert Rivera, pero pasar de fuerza m¨¢s votada en Catalu?a a no se sabe bien qu¨¦ posici¨®n se imputar¨¢ ¨ªntegramente a In¨¦s Arrimadas, lo que complica el giro a la moderaci¨®n que lidera en su partido. El hueco que dejar¨ªan los naranjas vuelve a darle aires de primarias a la batalla catalana entre PP y Vox, con resultado incierto ahora mismo.
Y no sabemos qu¨¦ mella habr¨¢ hecho en el electorado el aterrizaje brutal en la realidad de la pandemia tras a?os de discursos identitarios. El Govern ha tenido que gobernar. Hac¨ªa mucho tiempo que eso no se somet¨ªa a elecciones. @PepaBueno
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