La libertad era esto

Elegir d¨®nde, c¨®mo o con qui¨¦n vivir. Optar por una profesi¨®n o dedicaci¨®n. Profesar, o no, una religi¨®n. Pensar y expresar lo que opinas, reunirte, leer, aprender, estudiar, informarte o informar sin temor. Tener o no tener pareja o hijos. Moverte sin fronteras, alambradas o muros. Elegir a tus representantes pol¨ªticos, al presidente de tu comunidad o a tus amigos. Poder mantener, si eres mujer, un embarazo no deseado o interrumpirlo sin temor a la c¨¢rcel o a la muerte. Poder tener una muerte digna si el sufrimiento es insoportable. En resumen, poder ser due?o de tu vida, de tus pensamientos ...

Elegir d¨®nde, c¨®mo o con qui¨¦n vivir. Optar por una profesi¨®n o dedicaci¨®n. Profesar, o no, una religi¨®n. Pensar y expresar lo que opinas, reunirte, leer, aprender, estudiar, informarte o informar sin temor. Tener o no tener pareja o hijos. Moverte sin fronteras, alambradas o muros. Elegir a tus representantes pol¨ªticos, al presidente de tu comunidad o a tus amigos. Poder mantener, si eres mujer, un embarazo no deseado o interrumpirlo sin temor a la c¨¢rcel o a la muerte. Poder tener una muerte digna si el sufrimiento es insoportable. En resumen, poder ser due?o de tu vida, de tus pensamientos y de tus acciones con responsabilidad, esto es lo yo cre¨ªa que era la libertad. Pues estaba equivocado. Resulta que libertad es ir de misa a los toros, pasando por la cervezita en la terraza, con una pulserita en la mu?eca. Qui¨¦n lo hubiera dicho.

Sebasti¨¢n Fern¨¢ndez Izquierdo. Petrer (Alicante)

Doble peaje

A ver si me entero. Por un lado, el Gobierno de S¨¢nchez acord¨® no renovar las concesiones de las autopistas de peaje para que fueran gratuitas, y por otro, se nos anuncia que pagaremos peaje por las autov¨ªas a partir de 2024. Como dir¨ªa Jos¨¦ Mota, las gallinas que entran por las que salen, lo que se pierde por lo que se gana. Pero hay un detalle que se olvida: las autov¨ªas, como el resto de carreteras nacionales, ya las hemos pagado v¨ªa impuestos, por lo que cobrar ahora un peaje supone recaudar dos veces por lo mismo, una suerte de doble imposici¨®n por v¨ªa asf¨¢ltica. Sin olvidar ese otro principio asentado en nuestro ordenamiento jur¨ªdico que dice Non bis in idem, no se puede sancionar dos veces a una persona por el mismo hecho, y que bien podr¨ªa aplicarse por analog¨ªa. No s¨¦, pero si echamos cuentas, a m¨ª me sale a devolver.

Gonzalo de Miguel Renedo. Logro?o

La ley de ¡®riders¡¯

Ser rider es un trabajo flexible y a la vez muy duro. La nueva ley de riders mejora sustancialmente sus condiciones laborales de falsos aut¨®nomos, aunque no gusta a todo el colectivo. La ley supone, entre otros, protecci¨®n ante incapacidad, vacaciones pagadas y desempleo. Adem¨¢s, har¨¢ que el algoritmo utilizado para asignarles las tareas sea transparente. Pretender derechos, sin asumir obligaciones, resulta asim¨¦trico. Y el ¡°aut¨®nomo mejorado¡± que proponen, discrimina a los aut¨®nomos actuales. Esta ley es un triunfo, no un ataque. Recordemos que todo empez¨® cuando un rider denunci¨® a una plataforma para que lo reconocieran como empleado.

Paula Fern¨¢ndez. Santa Perpetua de Mogoda (Barcelona)

Perplejidad

El art¨ªculo de opini¨®n de Antonio Ca?o publicado el mi¨¦rcoles me produjo perplejidad. Tildar a la izquierda de trumpista habiendo sido testigo de la campa?a de Isabel D¨ªaz Ayuso en Madrid y de haber visto las formas de los diputados de la derecha en las sesiones parlamentarias no es para menos. El Gobierno de coalici¨®n habr¨¢ cometido errores, pocos, para todo lo que les ha ca¨ªdo encima, la ¡°herencia recibida¡± y el ser pioneros, pero creo que de trumpismo no se les debe acusar.

Ana Romo. Barcelona

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