Cuomo se rinde

Las conclusiones de la investigaci¨®n realizada por la fiscal general del Estado de Nueva York dejaron poco margen de duda sobre el trato vejatorio del gobernador Andrew Cuomo hacia algunas mujeres que han trabajado en su equipo y lo forzaron, ayer, a presentar su dimisi¨®n. Al pol¨ªtico dem¨®crata, que estaba en su tercer mandato y que en 2018 endureci¨® las leyes para combatir el abuso sexual, no le quedaba otra salida y su partido le exig¨ªa la retirada. Once mujeres han ofrecido su testimonio para la elaboraci¨®n del contundente informe hecho p¨²blico la semana pasada. Su empecinamiento en mantenerse en el cargo solo pod¨ªa perjudicar a los dem¨®cratas: al final ha cedido a la presi¨®n.

En un a?o, el gobernador, cuyas ruedas de prensa diarias recibieron el aplauso por su firmeza ante la crisis de la covid y su posicionamiento contrario al negacionismo de la pandemia del entonces presidente Trump, se ha convertido en un foco de problemas. Su gesti¨®n de la pandemia, adem¨¢s, ha sido puesta en duda al confirmarse que no contabiliz¨® en el censo de ancianos fallecidos aquellos que fueron trasladados desde las residencias a los hospitales. La Administraci¨®n del Estado de Nueva York contabiliz¨® 8.500 muertos en residencias, pero la cifra real asciende a 15.000.

Desde que salt¨® la primera acusaci¨®n en diciembre de 2020, a la que se a?adieron nuevos testimonios y denuncias en febrero y marzo, la presi¨®n contra Cuomo no ha cesado. De nada le ha servido la versi¨®n que ofreci¨® en un comunicado hace cinco meses en el que afirmaba que lo que ¨¦l consideraba ¡°bromas¡± ha resultado que ¡°her¨ªan sensibilidades¡±. Las pruebas que lo se?alan resultan abrumadoras y van m¨¢s all¨¢ de comentarios, puesto que hubo besos no consentidos y tocamientos. Los acercamientos sexuales por parte de un jefe hacia sus subordinadas hoy no se aceptan como simples gajes del oficio. Esta semana la dimisi¨®n de su colaboradora m¨¢s cercana y mano derecha, Melissa DeRosa, subray¨® a¨²n m¨¢s la incongruencia de que Cuomo se mantuviera aferrado a su silla, dispuesto incluso a combatir un impeachment.

Cuomo pasa a ser uno m¨¢s de la lista de pol¨ªticos que se han comportado como si todo les fuera permitido. Como el fiscal general Eric Schneiderman, que abandon¨® su puesto por acusaciones de violencia y abusos. Tres a?os despu¨¦s del movimiento Me Too, todav¨ªa siguen existiendo muchas conductas inaceptables hacia las mujeres que no consiguen ser erradicadas. Pero ahora pasan factura. La salida de Cuomo permite, adem¨¢s, la llegada de la que va a ser la primera gobernadora del Estado de Nueva York, Kathy Hochul. El mundo es definitivamente otro.