Inmortales
La materia de la que forma parte nuestro cuerpo no es sino un hervido de ¨¢tomos y part¨ªculas en continua evoluci¨®n que constituyen el r¨ªo de Her¨¢clito, una corriente eterna siempre en evoluci¨®n en el que todos somos n¨¢ufragos y supervivientes
Acabo de saber de fuente de toda solvencia que en este plato de lentejas que tengo delante en la mesa hay ¨¢tomos que pudieron pertenecer a S¨®crates, a Luis XIV o a Jack el Destripador, a toda clase de h¨¦roes, santos y asesinos de la historia. No me extra?a nada, tal como vienen los telediarios. Siempre he cre¨ªdo que a la hora de ingerir alg¨²n alimento uno debe tomar precauciones, pero en este caso no se trata de un problema digestivo, sino de la cuesti¨®n de si somos o no inmortales. Seg¨²n una ley qu¨ªmica expresada por Lavoisier la materia no se crea ni se destruye, solo se transforma. As¨ª sucede con algunos que cre¨ªamos sabios y en el fondo son unos idiotas y con otros que parecen tontos y al final siempre se llevan la mejor tajada. La materia de la que forma parte nuestro cuerpo no es sino un hervido de ¨¢tomos y part¨ªculas en continua evoluci¨®n que constituyen el r¨ªo de Her¨¢clito, una corriente eterna siempre en evoluci¨®n en el que todos somos n¨¢ufragos y supervivientes. Arrastrados por ella todos hemos muerto y resucitado infinitas veces. Por otra parte, si la sabidur¨ªa de S¨®crates es ahora una lenteja en mi plato, tambi¨¦n en el cuchillo con el que corto el pan puede haber alguna part¨ªcula de la daga con que fue apu?alado Julio C¨¦sar. A los pies de la mesa est¨¢ mi perra esperando que le d¨¦ algo. As¨ª mueven tambi¨¦n el rabo los pol¨ªticos reclamando el voto de los ciudadanos. Al final, pasa lo de siempre. Derribadas por la qu¨ªmica las columnas del templo de la raz¨®n y de la fe lo ¨²nico que importa es que a uno las lentejas le sienten bien sabiendo que el hierro que contienen se form¨® en alguna estrella de una misteriosa galaxia y que despu¨¦s de atravesar infinitos seres vivos ha realizado una parada moment¨¢nea en nuestro cuerpo para seguir luego camino por el universo donde se posar¨¢ en otro cuerpo que va a resucitar dentro de millones de a?os.
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