Riesgos en Argentina

La situaci¨®n econ¨®mica de Argentina registra niveles de emergencia: la inflaci¨®n anual supera el 50%, el peso pierde valor cada d¨ªa y la deuda externa se ha vuelto impagable. Las reservas internacionales que tiene el Banco Central no alcanzan para cubrir en marzo un vencimiento de 2.900 millones de d¨®lares (2.540 millones de euros) con el FMI, solo una peque?a parte de los 19.000 millones de d¨®lares que debe pagar durante todo 2022. En este contexto, Argentina est¨¢ urgida de dinero fresco y corre el peligro de buscarlo a cualquier precio. La reciente visita del presidente Alberto Fern¨¢ndez a Rusia es indicio inquietante de una diplomacia marcada por las urgencias y los inconvenientes que pueden derivarse de ella.

El presidente argentino viaj¨® a Rusia como primera parada de una visita de m¨¢s alto vuelo a China. Lo hizo en plena escalada de Mosc¨² sobre Ucrania y la consiguiente tensi¨®n con la UE y Estados Unidos. Fern¨¢ndez incluso lanz¨® dardos contra Washington, cuyo apoyo fue clave en las negociaciones con el Fondo. En su encuentro a solas con Putin, rompi¨® con la estrategia de la Canciller¨ªa, basada en un intercambio sin compromisos donde Argentina agradec¨ªa a Rusia la venta de la vacuna Sputnik V y las cl¨¢sicas llamadas a una agenda com¨²n multilateral. Fern¨¢ndez, en cambio, decidi¨® ir m¨¢s all¨¢. Propuso a Putin que Argentina fuese ¡°una puerta de entrada de Rusia en Am¨¦rica Latina¡± y a?adi¨®, en una reuni¨®n con Putin a solas en el Kremlin, que ¡°Argentina tiene que dejar de tener esa dependencia tan grande que tiene con el Fondo y Estados Unidos, tiene que abrirse camino hacia otros lados y ah¨ª Rusia tiene un lugar muy importante¡±. Las palabras de Fern¨¢ndez fueron publicadas por la agencia estatal de noticias argentina, Telam, la ¨²nica que acompa?a al presidente durante su gira. Y cayeron muy mal en Washington, donde Argentina necesit¨® meses de arduo trabajo diplom¨¢tico para conseguir un apoyo expl¨ªcito a las conversaciones con el FMI.

La idea que sostiene la pol¨ªtica exterior del Gobierno argentino es un multilateralismo a ultranza, que lo lleva a hablar con todos sin comprometerse con nadie. As¨ª se explica que, al mismo tiempo, Argentina pueda pedir el favor de Estados Unidos un d¨ªa para tomar distancia al siguiente. Pero la estrategia se vuelve problem¨¢tica cuando se ofrece una relaci¨®n de brazos abiertos a un pa¨ªs que hoy est¨¢ al frente de una escalada b¨¦lica que recuerda a las din¨¢micas de la Guerra Fr¨ªa. Ofrecer a Rusia una puerta de entrada a Am¨¦rica Latina no es solo favorecer la presencia de un actor que hoy discute con la Casa Blanca; es tambi¨¦n arriesgarse a caer en la misma trampa que se pretende evitar. Rusia ha dado sobradas muestras de sus aspiraciones expansionistas, no solo en la l¨ªnea que la separa de Europa, y Am¨¦rica Latina tambi¨¦n forma parte de esa estrategia global.