Ya no hay empat¨ªa
Los lectores escriben sobre la p¨¦rdida de un ser querido, la inversi¨®n en sanidad, los precios de los billetes de Renfe y el rastreo de los datos en internet
Hace un a?o, muri¨® mi esposa. N¨²ria Gasull era extraordinaria, sab¨ªa siete idiomas. Cuando trabaj¨® de azafata de tierra, recibi¨® a Eleanor Parker, la baronesa de Sonrisas y l¨¢grimas; a Twiggy, la modelo m¨¢s c¨¦lebre de los sesenta, y, cuando fue gu¨ªa de turismo, ense?¨® Barcelona a Bergman. Fue profesora de teatro y m¨²sica, escribi¨® narraciones cortas, sab¨ªa cocinar reinventando cada vez los platos del Ampurd¨¢n y la Costa Brava. Y tocaba a Rachm¨¢ninov, como pocos. La conoc¨ª en la universidad en octubre de 1975, cuando todo iba a ser posible y todo estaba por hacer. Vivimos juntos 45 a?os ...
Hace un a?o, muri¨® mi esposa. N¨²ria Gasull era extraordinaria, sab¨ªa siete idiomas. Cuando trabaj¨® de azafata de tierra, recibi¨® a Eleanor Parker, la baronesa de Sonrisas y l¨¢grimas; a Twiggy, la modelo m¨¢s c¨¦lebre de los sesenta, y, cuando fue gu¨ªa de turismo, ense?¨® Barcelona a Bergman. Fue profesora de teatro y m¨²sica, escribi¨® narraciones cortas, sab¨ªa cocinar reinventando cada vez los platos del Ampurd¨¢n y la Costa Brava. Y tocaba a Rachm¨¢ninov, como pocos. La conoc¨ª en la universidad en octubre de 1975, cuando todo iba a ser posible y todo estaba por hacer. Vivimos juntos 45 a?os de complicidades y emociones, de lecturas en el jard¨ªn; hemos llorado mil veces con Anna Magnani, hemos ascendido a los cielos con Barenboim en la Filarm¨®nica, con Gardiner, la Caball¨¦... La he llorado por todos los sitios, caminando y caminando hasta la extenuaci¨®n, ma?anas enteras en los parques, por la calle, en el metro, en la cola del supermercado y ahora escribiendo estas l¨ªneas. Pero nadie se ha acercado a preguntar si me pasaba algo.
Pedro Gonz¨¢lez Carranza. Barcelona
M¨¢s inversi¨®n en sanidad
¡°Espa?a no puede pagar nuestra sanidad¡±, escuch¨¦ en una tertulia. No soy un experto y no puedo rebatir tal afirmaci¨®n. Lo que s¨ª asegura la OMS es que Espa?a suspende en inversi¨®n sanitaria. Dos a?os despu¨¦s de la pandemia, la Atenci¨®n Primaria sigue con listas de espera y retrasos en las citas. Todos est¨¢n de acuerdo en que es necesario aumentar la financiaci¨®n para hacer frente a la actual situaci¨®n. Quiz¨¢s no sea el momento de buscar culpables, pero es evidente que no todas las comunidades han reaccionado de la misma forma y, en su mayor¨ªa, no han cumplido con la promesa de reforzar la inversi¨®n en sanidad para garantizar, mantener y mejorar el derecho universal a la salud.
Ram¨®n Cad¨®rniga Mao. Madrid
Cada vez menos trenes
?Enhorabuena, Renfe! En el trayecto entre C¨¢diz y Madrid cada vez hay menos trenes directos, y los pocos que hay cada vez son m¨¢s caros. En esta ¨¦poca, con una semana de antelaci¨®n es casi imposible conseguir un billete y, si lo consigues, es a un precio desorbitado. Sale mucho m¨¢s barato, a pesar del precio de la gasolina, ir en coche, aunque sea solo, que un billete b¨¢sico de Renfe. ?Bonita manera de promocionar el trasporte p¨²blico y la reducci¨®n de emisiones!
Santiago Lareo de la Cierva. El Puerto de Santa Mar¨ªa (C¨¢diz)
Proteger del rastreo
Google rastrea nuestra localizaci¨®n y la actividad que realizamos en internet. Estos datos le permiten tener un perfil detallado sobre sus usuarios ¡ªqu¨¦ les gusta e interesa, qu¨¦ p¨¢ginas frecuentan, qu¨¦ productos han comprado o est¨¢n valorando comprar...¡ª para luego venderlos a terceras empresas con el fin de ofrecerles publicidad personalizada. Google alega que ¡°no comparte informaci¨®n que pueda identificar personalmente a los usuarios¡±, aunque no ha negado que diariamente recopile enormes cantidades de datos. Los gobiernos y las grandes compa?¨ªas tecnol¨®gicas deben garantizar la seguridad digital de los usuarios mediante la creaci¨®n de un marco regulatorio que proteja los derechos personales y la privacidad por encima de los intereses econ¨®micos.
Paula Santolaya del Burgo. Madrid