Hay que amar sin miramientos
Los lectores escriben sobre el amor, las ratios en las aulas de los colegios, los h¨¢bitos de lectura y los problemas del tabaquismo
Dir¨ªa que el amor existe hasta en una sonrisa entre miradas, pero como persona de ciencias, la raz¨®n me indica que el amor es qu¨ªmica en nuestros cerebros. Aun as¨ª, es casi m¨¢gico el momento fugaz entre ese cruce de miradas, ese momento en el que dos almas bailan con m¨²sica diferente a un mismo comp¨¢s. Soy una enamorada del amor. Leo el amor en libros viendo pocas similitudes con la vida, pero el amor real es mucho m¨¢s interesante. En la monoton¨ªa vive y sobrevive frente a las adversidades y al m¨¢s ¨¢spero trato ajeno. Se dice que se pierde m¨¢s por miedo a no intentarlo, pero nuestras cabezas escudan el coraz¨®n. Yo amo, amo cada d¨ªa y a cada hora, amo odiando y amo con aburrimiento, amo con parsimonia y congoja, con dolor en el pecho y amo sin sentir nada. Quiero vivir por lo que amo y lo que podr¨ªa amar. Recuerdo lo que he amado con cari?o y miro aquellos te quiero que pude haber dicho. No s¨¦ si amo bien, pero s¨¦ que amo y alg¨²n d¨ªa espero ser amada de la misma forma. En tiempos donde hay muerte y la atenci¨®n es un privilegio, hay que amar sin miramientos. Yo amo.
Laura Herce Huete. Cizur Menor (Navarra)
Faltan aulas
Hace unos meses escuch¨¦ a la presidenta de la Comunidad de Madrid anunciar una bajada de ratios en las aulas. Recib¨ª la noticia con alegr¨ªa, ya que, como docente, soy consciente de la importancia de trabajar en grupos peque?os para conseguir una educaci¨®n individualizada y de calidad. Al solicitar una plaza para mi hija de 3 a?os en un colegio p¨²blico de mi barrio descubro que las plazas ofertadas han disminuido un 20% respecto del curso anterior. Y lo mismo ocurre en el resto de centros de la zona. El resultado es que decenas de familias nos hemos quedado sin plaza en los centros que hemos pedido, que son los m¨¢s pr¨®ximos a nuestras casas y nos encontramos en un limbo a la espera de que la Consejer¨ªa de Educaci¨®n nos d¨¦ una soluci¨®n. Medidas ambiciosas requieren inversiones ambiciosas y no simplemente recortar alumnos en cada clase sin ampliar el n¨²mero de aulas.
Isabel Mor¨®n Mu?oz. Madrid
Lectura poco valorada
?Realmente nadie se ha parado a pensar que la mayor¨ªa de los ni?os ven la lectura como algo aburrido por la forma en la que se lee en las aulas? ?Qu¨¦ clase de libros se escogen como lecturas obligatorias? Si ense?amos a los ni?os desde peque?os que leer en clase es algo vergonzoso, ya que si te equivocas todos se reir¨¢n de ti, al final acabar¨¢n odiando tener que leer cualquier texto. Luego nos sorprende encontrar ni?os sin creatividad, que est¨¢n todo el d¨ªa enganchados a un tel¨¦fono. Si tan solo supieran que a trav¨¦s de la lectura podemos vivir mil y una aventuras, viajar a miles de mundos y estar en la mente de millones de personajes, que manera m¨¢s mediocre de desaprovechar las p¨¢ginas de un libro.
Natalia Cruciug Berende. Gav¨¤ (Barcelona)
El tabaco: un asesino silencioso
Cada a?o, el tabaco mata a m¨¢s de siete millones de fumadores y a un mill¨®n de fumadores pasivos. ?Qu¨¦ culpa tienen los sufridores pasivos de lo que hacen los fumadores, que se asesinan diariamente? ?Hasta cu¨¢ndo los gobernantes dejar¨¢n de ser cobardes y el sentido com¨²n se impondr¨¢ para prohibir el fumar?
Luis Mariano Moreno ?cija. Getafe (Madrid)
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.