Encuesta crucial

Pregunt¨¦ a varias personas si aceptar¨ªan conocer la fecha y hora exactas de su muerte. Suger¨ª la posibilidad de que el dato constase en un documento oficial que todo reci¨¦n nacido recibir¨ªa de manos de un funcionario del Ayuntamiento presente en el paritorio. A ninguno de los encuestados agrad¨® la idea de vivir obsesionado con una cuenta atr¨¢s. Hubo quienes vacilaron; pero, despu¨¦s de imaginarse la situaci¨®n con detenimiento, se pronunciaron a favor de permanecer en la comodidad de su incertidumbre. En lo que estuvieron todos conformes fue en la convicci¨®n de que, conocida la provisi¨®n de d¨ªas, cambiar¨ªamos de estrategia vital. A buen seguro aprovechar¨ªamos el tiempo disponible en funci¨®n de criterios pr¨¢cticos. El consentimiento en el tedio alcanzar¨ªa rango de imprudencia temeraria. Con toda probabilidad conceder¨ªamos m¨¢xima importancia a muchas cosas que ahora nos cuesta poco posponer y al fin entender¨ªamos lo superfluas que son otras tras las que corremos desalados. Uno gestionar¨ªa con m¨¢s cabeza la angustia existencial y conocer¨ªa con precisi¨®n la hora de dejar resueltos sus asuntos administrativos y testamentarios.

Quiero creer que evitar¨ªamos un sinn¨²mero de conflictos. ?Para qu¨¦ meterme en porf¨ªas si el pr¨®ximo viernes estar¨¦ criando malvas? Como los condenados a la pena capital a quienes se concede un ¨²ltimo deseo, presiento que, cercanos al desenlace, nos inclinar¨ªamos por elegir alg¨²n disfrute: el viaje al pa¨ªs que siempre quisimos conocer, una fiesta por todo lo alto, la relectura de un libro venerado... Un aguafiestas me replic¨® que, si ya no hay margen para un juicio y un castigo, podr¨ªamos permitirnos toda suerte de fechor¨ªas. All¨¢ ¨¦l. Yo me inclinar¨ªa en el instante final por algo que nos diese gusto a mi gente y a m¨ª. Y que la suerte, seg¨²n reza un aforismo de Isabel Bono, ¡°me encuentre dentro de casa con el paraguas abierto¡±.