No es delito

A veces, cuando salgo a correr, paso por delante de una parroquia de nombre curioso: Parroquia de Todos los Santos y Todas las ?nimas. Siempre imagino un c¨®nclave de gente pregunt¨¢ndose: ¡°?C¨®mo le ponemos?¡±. ¡°Santa Rita¡±, dice uno. ¡°No, muy trillado¡±, dice otro. ¡°?Sagrado Coraz¨®n?¡±. ¡°No, muy pretencioso¡±. Hasta que alguien da con el nombre que cubre el inmenso espectro de posibilidades: ¡°Vamos con Todos los Santos y Todas las ?nimas, y quedamos bien con el para¨ªso completo¡±. Cuando hace un par de semanas el papa Francisco dijo en una entrevista con Associated Press que ¡°ser homosexual no es un delito, es una condici¨®n humana¡±, la frase subi¨® a la portada de todos los diarios. Pero el hombre agreg¨®, en letra chica: ¡°No es un delito, pero s¨ª es un pecado¡±. Pens¨¦ en la parroquia y en esa manera tan astuta de matar dos p¨¢jaros ¡ªo m¨¢s¡ª de un tiro. Las relaciones entre personas del mismo sexo est¨¢n prohibidas, castigadas con sentencias diversas ¡ªmeses o a?os de prisi¨®n, castigos corporales, pena de muerte¡ª, en unos sesenta y ocho pa¨ªses. Algunos, no la mayor¨ªa, son cat¨®licos. La cantidad de cat¨®licos en el mundo es de 1.600 millones de personas. Hay que asumir que parte de ellas son gays y que, como creyentes, siguen los lineamientos que dicta su religi¨®n. Ahora, en un solo malabar, el jefe de su Iglesia se ha asegurado, mientras se hace pasar por tipo progre ¡ªno, ?c¨®mo les van a dar azotes?, qu¨¦ barbaridad¡ª, de mantenerlos en su corral, record¨¢ndoles ¡ªsobre todo a los fieles gays que no viven en pa¨ªses que los criminalicen: la inmensa mayor¨ªa¡ª que, si bien tienen derecho a estar exentos de que los encarcelen o los aniquilen en la tierra, su fe les tiene preparado un castigo mayor, una condena infinita: el pecado no termina nunca. Hay que ser inteligente, la verdad.