La humilde despedida de Li Keqiang
El modesto objetivo de crecimiento establecido por el primer ministro saliente es coherente con el desarrollo de un modelo sostenible que da prioridad a la creaci¨®n de 12 millones de empleos
En un contexto que deber¨ªa ser extremadamente favorable por la reapertura de la econom¨ªa china despu¨¦s de tres a?os de implantaci¨®n de la pol¨ªtica de covid cero, el primer ministro saliente de China, Li Keqiang, se ha despedido con una ...
En un contexto que deber¨ªa ser extremadamente favorable por la reapertura de la econom¨ªa china despu¨¦s de tres a?os de implantaci¨®n de la pol¨ªtica de covid cero, el primer ministro saliente de China, Li Keqiang, se ha despedido con una humilde meta de crecimiento del PIB para 2023 de tan solo el 5%, frente al 5,5% anunciado para 2022. Un objetivo tan conservador contrasta con la euforia de las semanas que siguieron a la repentina apertura de la econom¨ªa en los primeros d¨ªas de diciembre, as¨ª que la pregunta que nos hacemos es por qu¨¦.
En primer lugar, el Gobierno chino, especialmente el primer ministro entrante, Li Qiang, no quiere arriesgarse a incumplir el objetivo de crecimiento, como le sucedi¨® a Li Keqiang en 2022, cuando la econom¨ªa china apenas aument¨® un 3%. Aunque el consumo se est¨¢ recuperando, la demanda externa sigue siendo d¨¦bil y es dif¨ªcil saber si la inversi¨®n privada realmente llegar¨¢ a contribuir positivamente al crecimiento este ejercicio, dadas las dudas sobre el papel del sector privado en la econom¨ªa china y el sentimiento cada vez m¨¢s cauteloso por parte de los inversores extranjeros. Adem¨¢s, el sector inmobiliario sigue lastrando a la baja el crecimiento y es posible que siga as¨ª durante mucho m¨¢s tiempo.
En segundo lugar, el Gobierno chino no parece dispuesto a impulsar una pol¨ªtica fiscal excesivamente laxa para garantizar un mayor crecimiento, porque conllevar¨ªa una acumulaci¨®n adicional de deuda p¨²blica que ya ha alcanzado niveles sin duda preocupantes (notablemente superiores a los de Estados Unidos o la Uni¨®n Europea si se consolidan todos los actores p¨²blicos, incluidas las empresas). Por ¨²ltimo, en t¨¦rminos de pol¨ªtica monetaria, el espacio que le queda al banco central chino para apoyar la econom¨ªa es siempre m¨¢s limitado, dado el renovado empuje de la Reserva Federal estadounidense en subir tipos. M¨¢s all¨¢ de la meta de crecimiento, el Gobierno parece decidido a impulsar un cambio estructural en la econom¨ªa china, profundizando en la sostenibilidad, sobre todo en lo que se refiere a mitigar los efectos del cambio clim¨¢tico y la seguridad alimentaria. Este nuevo enfoque orientado a la calidad del crecimiento no podr¨ªa llegar en mejor momento, puesto que China ya no encuentra f¨¢cil crecer a ritmos elevados y, de empujar la m¨¢quina fiscal o monetaria, probablemente s¨®lo conseguir¨ªa mayores desequilibrios financieros.
En este contexto, la seguridad laboral se ha convertido claramente en uno de los objetivos m¨¢s importantes de la nueva etapa. El informe final del Gobierno de Li Keqiang se centr¨® en gran medida en la necesidad de crear puestos de trabajo, con un objetivo de generaci¨®n de 12 millones de empleos, superior a los 11 millones fijados en los ¨²ltimos cinco a?os, con la excepci¨®n de 2020 como consecuencia de los efectos de la covid-19. El objetivo de crear m¨¢s empleo refleja la preocupaci¨®n del Gobierno por la evoluci¨®n del mercado laboral, especialmente para los trabajadores j¨®venes, de los cuales casi el 20% estaban desempleados en la primavera de 2022. En otras palabras, el Gobierno quiere asegurarse de que el actual impulso de generaci¨®n de empleo derivado de la reapertura se mantenga a lo largo de 2023.
La importancia de que Li Keqiang haya puesto el acento en su discurso m¨¢s en la creaci¨®n de empleo que en el crecimiento de la econom¨ªa estriba en los dif¨ªciles tiempos que est¨¢ viviendo el pa¨ªs, lo que explica por qu¨¦ las autoridades chinas muestran m¨¢s inter¨¦s que nunca en reactivar la inversi¨®n directa extranjera, especialmente en sectores con alta generaci¨®n de empleo. Los avances actuales hacia la diversificaci¨®n de la cadena de suministro a nivel global no ayudar¨¢n a China a alcanzar el objetivo de creaci¨®n de los 12 millones de empleos fijados por Li Keqiang en su informe anual. Parece claro que, aparte de las empresas extranjeras, el pr¨®ximo primer ministro, Li Qiang, necesitar¨¢ todo el apoyo del sector privado para conseguir generar ese nivel de puestos de trabajo, lo que probablemente explica la exhortaci¨®n del presidente Xi Jinping hacia este sector, con un claro cambio en la narrativa.
El objetivo de crecimiento del 5% es, por tanto, coherente con los desaf¨ªos actuales a los que se enfrenta la econom¨ªa china y con otorgar cada vez mayor importancia al crecimiento sostenible, m¨¢s all¨¢ de una meta num¨¦rica concreta. La creaci¨®n de m¨¢s puestos de trabajo es parte esencial de la nueva narrativa de crecimiento de China, puesto que la falta de empleo, especialmente para los m¨¢s j¨®venes, puede representar una losa para el futuro de la econom¨ªa del pa¨ªs, pero tambi¨¦n para el partido. La clave de ese nuevo escenario la tiene el sector privado, vapuleado por la pandemia pero tambi¨¦n por las medidas de control cada vez m¨¢s r¨ªgidas por parte del Gobierno y, en menor medida, las empresas extranjeras que en un buen n¨²mero de casos se est¨¢n repensando su presencia en China en aras de una mayor diversificaci¨®n.