La clase media como virus social
Los lectores escriben sobre las aspiraciones econ¨®micas, el tiempo que pasamos frente a una pantalla, el anuncio de Feij¨®o de derogar leyes, el fin de Ciudadanos y las campa?as electorales
A mi entender, eras de clase media cuando ten¨ªas las riendas de tu vida, autonom¨ªa para realizar proyectos vitales con tu sueldo. Dicha aspiraci¨®n ya no existe hoy en los j¨®venes asistidos por sus familias para emanciparse en la treintena, un drama que es previo a 2019. Y es lo que ...
A mi entender, eras de clase media cuando ten¨ªas las riendas de tu vida, autonom¨ªa para realizar proyectos vitales con tu sueldo. Dicha aspiraci¨®n ya no existe hoy en los j¨®venes asistidos por sus familias para emanciparse en la treintena, un drama que es previo a 2019. Y es lo que me hace pensar que ese sentimiento de ser de clase media es un virus, porque si bien dicha clase puede ser un estado social satisfactorio, en ¨¦pocas de pobreza o de incertidumbre tambi¨¦n puede f¨¢cilmente convertirse en un espacio moral de frustraci¨®n cuando se nutre de individuos y de familias que no han conseguido ser lo que su formaci¨®n les hac¨ªa pensar, llegar a un estado de bienestar. Es cierto que tenemos que luchar cada uno contra la apat¨ªa que nos transmiten tantos embrollos pol¨ªticos, pero hay que reconocer que es necesario no llegar a lo que estamos viendo en Francia, como pa¨ªs pr¨®ximo. Y tambi¨¦n es necesario decir a todos los pol¨ªticos que no est¨¦n solo presentes en tiempos electorales.
Mar¨ªa Luisa Alonso Alcal¨¢. Zaragoza
Dictadura de las pantallas
Vivimos en la dictadura de las pantallas. Entre los mileniales son muy pocas las excepciones. Hemos remplazado todo por una pantalla. Cuando te levantas, con el despertador en tu m¨®vil; en el trabajo, con el ordenador en la oficina; para tomar notas personales, en WhatsApp o en la aplicaci¨®n de notas; con tu tel¨¦fono, para pedir un men¨² en un restaurante con el QR. Le¨ªa que en Suecia los ni?os utilizar¨¢n menos ordenadores durante su tiempo en la escuela. Menos mal: ya tendr¨¢n tiempo de pasar sus vidas frente a una pantalla cuando sean adultos.
Jos¨¦ Enrique Val Montros. Valencia
Derogadores
La derecha y la ultraderecha nos hablan de sus intenciones de derogar leyes aprobadas en esta legislatura, leyes que protegen a minor¨ªas, que amparan a quienes no quieren sufrir, que dignifican la memoria de perdedores y represaliados, o protegen a los trabajadores. Tan solo hablan de eso, no nos hablan, ni probablemente nos hablar¨¢n, de las leyes que mejorar¨¢n nuestra vida, proteger¨¢n a los desfavorecidos, nos har¨¢n m¨¢s felices. ?Gobernar para derogar! ?Qu¨¦ miseria!
Jos¨¦ A. Mart¨ªnez Lamoca. Madrid
Ciudadanos pudo ser
Me han impactado algunas im¨¢genes ofrecidas por este grupo pol¨ªtico durante los ¨²ltimos a?os: el desnudo de Albert Rivera en la campa?a catalana de 2006, la victoria de In¨¦s Arrimadas en Catalu?a en 2017, los 57 esca?os del Congreso en las generales de abril 2019, su rechazo a cogobernar con el PSOE y su incapacidad por presentar candidaturas en las pr¨®ximas elecciones. Ciudadanos pudo haber centrado la pol¨ªtica espa?ola siendo firme alternativa a populares y socialistas. Hay quien opina que no les dejaron; prefirieron mirar hacia la derecha. Me pregunto si no pudieron o no supieron.
?ngel Andr¨¦s Villuendas. Barcelona
?Excentricidad?
Sin ser partidaria de debates a dos, o¨ªr a Borja S¨¦mper decir que Espa?a no est¨¢ para excentricidades me parece un insulto a la inteligencia ¡ªy ya van muchos¡ª, despu¨¦s de la pasada campa?a electoral de su partido basada en ETA.
Rosa Mar¨ªa Ballestero B¨¢ez. Madrid