Crece la violencia sexual

Una media de dos agresiones sexuales por d¨ªa. Las estad¨ªsticas del hospital Cl¨ªnic de Barcelona, el centro de referencia para la atenci¨®n de las violaciones en la capital catalana, muestran una evoluci¨®n preocupante: no solo constatan un aumento de los casos sino tambi¨¦n un mayor uso de la violencia f¨ªsica, un aumento de las violaciones en grupo y m¨¢s casos de ...

Una media de dos agresiones sexuales por d¨ªa. Las estad¨ªsticas del hospital Cl¨ªnic de Barcelona, el centro de referencia para la atenci¨®n de las violaciones en la capital catalana, muestran una evoluci¨®n preocupante: no solo constatan un aumento de los casos sino tambi¨¦n un mayor uso de la violencia f¨ªsica, un aumento de las violaciones en grupo y m¨¢s casos de amnesia por consumo de drogas o por sumisi¨®n qu¨ªmica. Son indicadores muy negativos de una deriva que muchos expertos relacionan con la influencia de la pornograf¨ªa y de ciertos contenidos machistas que circulan a trav¨¦s de las redes sociales. La publicaci¨®n de estos datos ha coincidido con la noticia de que m¨¢s de un millar de alumnos de entre 10 y 17 a?os de una decena de centros escolares de Guip¨²zcoa ¡ªtambi¨¦n ha habido denuncias en Cantabria y Madrid¡ª hab¨ªan sido captados para unos chats de WhatsApp a trav¨¦s de los cuales recib¨ªan contenidos pornogr¨¢ficos violentos junto a mensajes machistas y consignas de extrema derecha.

Los datos recopilados por la Unidad de Violencia Sexual del Cl¨ªnic componen una elocuente radiograf¨ªa de las formas que adopta la violencia sexual en una gran ciudad y plantea la urgencia de profundizar en las causas de la actual evoluci¨®n hacia formas de agresi¨®n sexual m¨¢s crueles y violentas. Entre enero y octubre, el hospital atendi¨® a 588 v¨ªctimas (524 mujeres y 64 hombres), un 5,6% m¨¢s que en el mismo periodo de 2022. Un tercio de las v¨ªctimas hab¨ªa sufrido encarnizamiento f¨ªsico, lo que agrava las secuelas de la propia violencia sexual. Concretamente, el 37% de las mujeres y el 25% de los hombres presentaban lesiones como quemaduras, hematomas, mordiscos, fracturas o esguinces genitales, cuando el a?o anterior los porcentajes fueron del 20% y el 18,5% respectivamente. Casi la mitad de las v¨ªctimas (45,8%) ten¨ªan menos de 25 a?os, aunque tambi¨¦n hab¨ªa una anciana de 81 a?os. El 45% ten¨ªan dificultades para recordar por consumo de drogas o por sumisi¨®n qu¨ªmica. Los casos de amnesia total han pasado en un solo a?o del 4,5% al 18,5%. Y tambi¨¦n han aumentado las violaciones grupales, que ya son el 8%.

Cada vez hay m¨¢s evidencia de que el acceso a contenidos pornogr¨¢ficos de corte machista y violento se realiza a edades m¨¢s tempranas. Ese tipo de pornograf¨ªa es la que les llegaba a los escolares guipuzcoanos y en ellos se les suger¨ªa cooptar a su vez a cuantos m¨¢s amigos mejor. Este suceso, que ahora investiga la Ertzaintza, ha reavivado el debate sobre las consecuencias de que los menores puedan hacer un uso indiscriminado del tel¨¦fono m¨®vil. En una edad en la que construyen su identidad, moldean su autoestima y afianzan los valores que regir¨¢n su vida adulta, hay que preguntarse si es deseable que dispongan sin l¨ªmites de una herramienta que los expone a contenidos destructivos y a unos valores machistas y de banalizaci¨®n de la violencia antag¨®nicos con los valores de respeto y tolerancia que el sistema educativo intenta transmitirles. Teniendo en cuenta adem¨¢s que se trata de una herramienta con una gran capacidad de seducci¨®n, capaz de atrapar su atenci¨®n durante horas cada d¨ªa a trav¨¦s de algoritmos que no pueden controlar. La aceptaci¨®n social es muy importante para los adolescentes y si comprueban que estos contenidos tienen mayor recompensa, trataran de imitarlos. Tambi¨¦n es necesario que los poderes p¨²blicos busquen la manera de intervenir y frenar una deriva peligrosa, pero es importante que lo hagan con las familias y los sectores implicados.