Pablo Iglesias y la vejez tuitera

La Asociaci¨®n de Periodistas Parlamentarios (APP) celebra cada a?o una cena en la que entrega, en ambiente distendido, premios a colegas, diputados y senadores. Hay varias categor¨ªas, a saber: mejor orador/a; azote del Gobierno y de la oposici¨®n; mejor y peor relaci¨®n con la prensa; el m¨¢s activo, el revelaci¨®n... El pasado 12 de diciembre, Pablo Iglesias, cofundador de Podemos, tuite¨®: ¡°A las que fueron las ministras m¨¢s atacadas y acosadas del Gobierno, los periodistas parlamentarios las nominan como ¡®azote del Gobierno¡¯. La mayor violencia no viene de la ultraderecha, viene de un periodismo delincuente y corrupto que se siente impune y que no tiene l¨ªmites¡±. El mi¨¦rcoles por la noche, en el hotel Palace de Madrid, se celebr¨® la gala de la APP. La veterana periodista Mar¨ªa Rey enumer¨® a los candidatos al premio ¡°a quien mejor saca los colores al Gobierno¡±: Irene Montero, Ione Belarra, Cuca Gamarra y Alberto N¨²?ez Feij¨®o. Gan¨® la exministra de Igualdad. La secretaria general de Podemos y exmininistra de Derechos Sociales recogi¨® orgullosa el galard¨®n en su nombre, ya que Montero no hab¨ªa podido asistir. ¡°No voy a dejar pasar la oportunidad de sacar pecho de ser azote del Gobierno. Ha sido muy dif¨ªcil arrastrar al PSOE hacia los cambios, hab¨ªa que azotar un poquito, pero creo que ha sido en inter¨¦s general del pa¨ªs¡±, dijo en su discurso de agradecimiento.

Los tuits nacen, crecen, se reproducen y envejecen, algunos mejor que otros. Hab¨ªa tanto cable por recoger que Pablo Echenique, quien hab¨ªa retuiteado a Iglesias y sus acusaciones de periodismo corrupto por las nominaciones, escribi¨® este jueves en su cuenta de X: ¡°Aunque, en su l¨®gica cortesana, ser azote del Gobierno desde el Gobierno es algo negativo, para nosotros es un honor. Nosotros, a diferencia de otros, no venimos a calentar la silla del ministro. Cuando nosotros gobernamos es para que nuestro pueblo tenga m¨¢s derechos¡±.

Durante la pasada legislatura y hasta la constituci¨®n del nuevo Ejecutivo, las dos nominadas de Podemos como azote del Gobierno y el partido al que representaban dentro de la coalici¨®n aseguraron que el presidente, Pedro S¨¢nchez, no estaba ¡°a la altura¡± de la gravedad de lo que est¨¢ pasando en Gaza (Belarra, 29 de octubre); que en la guerra de Ucrania hac¨ªan ¡°seguidismo de EEUU¡± y que nada garantizaba que Espa?a no fuera a enviar tropas (Belarra), o que la reforma de la ley del solo s¨ª es s¨ª pactada entre el PSOE y el PP supon¨ªa ¡°traicionar al feminismo¡±, ¡°volver al C¨®digo Penal de La Manada¡± (Montero) y preguntar otra vez a las mujeres ¡°si cerraron bien las piernas¡± (Luc¨ªa Mu?oz, Echenique).

Las fricciones dentro del anterior Gobierno de coalici¨®n fueron recurrentes, pero el bipartito agot¨® unido la legislatura. A lo largo de la misma, Podemos presumi¨® a menudo de haber torcido el brazo o haber azotado a su socio a la hora de aprobar determinadas leyes. Declar¨®, por ejemplo, Belarra el pasado 30 de abril: ¡°Jam¨¢s hubiera habido una Ley de Vivienda que regulara los precios del alquiler con un Gobierno en solitario del PSOE. El PSOE lleva formando parte d¨¦cadas del consenso pol¨ªtico del pelotazo urban¨ªstico¡±.

Para marcar perfil propio y mantener y agrandar sus respectivos espacios, las marcas que compiten electoralmente entre ellas -PP y Vox, por un lado y PSOE y Podemos, por otro- suelen atacar al que tienen m¨¢s cerca. En la izquierda, cuyo tema de discusi¨®n favorito es decir qu¨¦ o qui¨¦n no lo es ¡°verdaderamente¡±, esa pugna es tan tradici¨®n como la Navidad misma. En la ultraderecha, la formaci¨®n que lidera Santiago Abascal tira frecuentemente en redes sociales de la etiqueta #soloquedaVox para acusar a su partido matriz de pusilanimidad, por ejemplo, al aceptar el l¨ªder de la oposici¨®n, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, reunirse con el presidente del pa¨ªs. Nominar a las ministras de Podemos como ¡°azote del Gobierno¡± no era violencia, corrupci¨®n o delincuencia period¨ªstica. Si acaso un piropo a la obstinaci¨®n, una broma navide?a en un ambiente distendido donde el peor premio, el de mala relaci¨®n con la prensa, suele recibirse con risas y prop¨®sito de enmienda. Bien por Belarra y Montero por salirse de la teor¨ªa de la conspiraci¨®n y tom¨¢rselo como es debido: con humor.