Hay esperanza, hay libros

Cu¨¢l ha sido mi alegr¨ªa al ver una nueva librer¨ªa en mi barrio. No es broma. Acaban de estrenar una nueva actividad econ¨®mica que, como dir¨ªan los economistas, viene a cubrir una necesidad del mercado. Y nunca mejor dicho. Si algo necesitamos en estos tiempos las personas, y especialmente los j¨®venes, son libros. Lo que m¨¢s me ha gustado de la tienda son dos cosas. La primera, que las obras que ofrecen son de gran nivel literario, importancia hist¨®rica y de gran car¨¢cter formativo ¡ªadquir¨ª un libro de F. Hayek y encargu¨¦ otro...

Cu¨¢l ha sido mi alegr¨ªa al ver una nueva librer¨ªa en mi barrio. No es broma. Acaban de estrenar una nueva actividad econ¨®mica que, como dir¨ªan los economistas, viene a cubrir una necesidad del mercado. Y nunca mejor dicho. Si algo necesitamos en estos tiempos las personas, y especialmente los j¨®venes, son libros. Lo que m¨¢s me ha gustado de la tienda son dos cosas. La primera, que las obras que ofrecen son de gran nivel literario, importancia hist¨®rica y de gran car¨¢cter formativo ¡ªadquir¨ª un libro de F. Hayek y encargu¨¦ otro¡ª; y, por otro lado, la profesionalidad de su personal, servicial y alegre. Es decir, tienen los dos ingredientes para triunfar como emprendedores: excelente producto y magn¨ªfico trato. En estos tiempos de tel¨¦fonos inteligentes, aplicaciones inform¨¢ticas, videojuegos e inteligencia artificial donde todo se fabrica o desarrolla para que el ser humano no piense, no reflexione y sea cada vez menos humano, la vuelta a la lectura hist¨®rica, de pensamiento cl¨¢sico y fundamentos del conocimiento, abre una puerta a la esperanza.

Fernando Hern¨¢ndez. Valencia

Independizarse del mercado inmobiliario

Leo con esperanza que el Gobierno busca soluciones al problema que el alquiler tur¨ªstico genera en el acceso a la vivienda, y deseo que estas medidas no se queden ah¨ª, y afronten tambi¨¦n otros como la escasez de VPO asequibles para familias con ingresos bajos. Dentro de un mercado inmobiliario impracticable, uno se siente atracado en todo momento, y el sue?o de iniciar una vida independiente empieza casi siempre con una mala experiencia. Esperemos que este sea solo el primer paso hacia medidas tangibles contra una de las mayores preocupaciones de los espa?oles.

Ricardo Cuenca. Calvi¨¢ (Barcelona)

Gracias, Mario

Aunque Mario Vargas Llosa nos haya ¡°dedicado su silencio¡± en la que es su ¨²ltima novela, la obra literaria y period¨ªstica que nos deja convierte en ef¨ªmera su despedida. Este silencio que nos regala quedar¨¢ siempre interrumpido con la lectura de sus libros y art¨ªculos period¨ªsticos. Su retirada no es de verdad cuando la obra queda presente, y supo contarnos su verdad de forma sincera, aunque a veces no la hayamos compartido. Muchas gracias.

Jos¨¦ Luis Garrido Garc¨ªa. Valladolid

Luces, fiesta y caos

Ahora que llenamos de luces las ventanas, los balcones, los ¨¢rboles y las ramas. Que adornamos las puertas con guirnaldas y ramitas de mu¨¦rdago que inducen la presencia del beso. Ahora que descorchamos botellas, y brindamos, y regalamos cestas y peque?os paquetes envueltos en papeles brillantes. Ahora que recordamos a los nuestros mientras suenan cascabeles en los centros comerciales. Ahora. No olvidemos que hay cuerpos, casas, pueblos y ciudades destrozadas. En llamas.

Jorge Ortiz Robla. Catarroja (Valencia)

La soluci¨®n clim¨¢tica

Siempre la soluci¨®n a la sociedad ha sido dada por grandes avances y descubrimientos que han venido de los genios. Ahora adem¨¢s es necesario. Es curioso que un genio pueda arreglar lo que millones desarreglan. Por eso hay que invertir en investigaci¨®n.

Luis Mariano Moreno ?cija. Getafe (Madrid)