Pagafantas de Putin
?Hay medios espa?oles dispuestos a difundir la propaganda rusa sin cobrar por ello? Podr¨ªa ser, si su l¨ªnea est¨¢ marcada por una ideolog¨ªa eur¨®foba y ultra
Los tent¨¢culos de la propaganda del Kremlin llegan a muchos sitios, pero necesitan colaboradores nacionales y que estos tengan cierto acceso a algunos medios de comunicaci¨®n, aunque sean escu¨¢lidos. Algunos son conscientes y cobran por ello. Otros, que les dan espacio, deben creer que los intereses y la seguridad de los espa?oles preocupan m¨¢s en Mosc¨² que en Bruselas. Guillermo Rocafort P¨¦rez, quien se presenta como abogado, historiador y escritor, es uno de esos hombres de Putin en Espa?a. Varias de sus obras, puro revisionismo hist¨®rico, se publican en la editorial ultra SND Editores, firma que edita, entre otras, las obras que dej¨® el ultraderechista Blas Pi?ar. Falange lo considera ¡°amigo y camarada¡±.
Les voy a contar un cuento. El pasado 28 de febrero, Rocafort public¨® en X un v¨ªdeo de casi tres minutos de la ponencia que dio en el segundo ¡°Congreso sobre Multipolaridad¡±, celebrado en Mosc¨². Un acto en el que el Kremlin ventil¨® su propaganda en contra de la integraci¨®n econ¨®mica y pol¨ªtica que significa la Uni¨®n Europea y de la defensa mutua de la OTAN y donde difundi¨® su neofascismo y sus deseos expansionistas. Rusia sabe que la unidad es la principal fortaleza de los pa¨ªses europeos. Todos juntos plantamos cara a Mosc¨²; por separado, muy pocos podr¨ªan. La Embajada rusa en Madrid contest¨® a su mensaje dici¨¦ndole que ¡°siempre ser¨¢ bienvenido¡±. Un soldado de Putin en Espa?a, un quintacolumnista, justo cuando algunos de nuestros socios en la Uni¨®n Europea y la OTAN se sienten directamente amenazados por Mosc¨².
Rocafort no dejar¨ªa de ser un reaccionario m¨¢s, y ni siquiera el m¨¢s peligroso, si no fuera una de las personas m¨¢s citadas por el digital The Objective. En su web se encuentran decenas de piezas en las que se le presenta como ¡°abogado especializado en transparencia¡±, ¡°analista pol¨ªtico¡± o ¡°historiador¡±. En ellas opina de asuntos variopintos y nunca se informa de sus relaciones con el Kremlin.
La mayor¨ªa de esas piezas las firma Marcos Ondarra. De Rocafort se pueden leer comentarios como este: ¡°Hay una parte sustancial de la base electoral de Vox que es prorrusa, que comparte los valores del r¨¦gimen de Putin: familia, patria, ej¨¦rcito, tradiciones y espiritualidad, mientras que Zelenski representa todo lo contrario¡±. El comentario sobre Zelenski copia exactamente la propaganda del Kremlin, que vende al l¨ªder ucranio, jud¨ªo y nieto de soldados sovi¨¦ticos que lucharon contra los nazis como a un t¨ªtere neonazi. M¨¢s adelante dice que ¡°en un primer momento hubo un gran estupor y hasta Marine Le Pen critic¨® la invasi¨®n, pero luego ya las posiciones se han ido matizando porque se han dado cuenta de que Estados Unidos est¨¢ sacando rentabilidad de la situaci¨®n y Europa se est¨¢ hundiendo econ¨®micamente¡±. Otra vez un mensaje de la propaganda de Putin.
?Difunde The Objective la propaganda rusa? Tal cual. En la misma pieza se cuenta que seg¨²n una encuesta de Euroskopia, solo el 32% de los europeos rechaza la partici¨®n del territorio ucranio. O que el 60% de los alemanes quiere poner fin a la guerra ¡°a costa de Ucrania¡±. De nuevo propaganda del Kremlin. Ondarra escribe: ¡°Mientras los ciudadanos dicen que ya basta de muertes y gastos militares, sus gobiernos europeos miran en otra direcci¨®n¡±. Pero los ciudadanos no dicen eso.
Un informe del Parlamento Europeo de la misma ¨¦poca que ese art¨ªculo, a principios del a?o pasado, realizado a partir de los datos de decenas de encuestas por toda Europa, muestra (con fuentes, no como el de Euroskopia) datos muy distintos, como que el porcentaje de alemanes que preferir¨ªan partir Ucrania para acabar con la guerra era entonces del 41%, no del 60%. Casi todas las noticias que Euroskopia destacaba este pasado fin de semana en su p¨¢gina web eran negativas sobre las pol¨ªticas europeas y positivas sobre dirigentes de extrema derecha. Igual que los medios controlados por Mosc¨².
?Hay medios dispuestos a difundir la propaganda rusa sin cobrar por ello? Podr¨ªa ser, si su l¨ªnea editorial est¨¢ marcada por una ideolog¨ªa eur¨®foba y ultraderechista. Rocafort al menos viaja a Mosc¨², donde probablemente sea tratado a cuerpo de rey. ?Pero quienes le dan espacio cobran o son pagafantas de Putin, patriotas de cart¨®n piedra, enemigos de espa?oles y europeos?
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