La trampa ¡®hillbilly¡¯

La elecci¨®n del compa?ero de ticket de Donald Trump para las elecciones del pr¨®ximo noviembre responde a un c¨¢lculo electoral b¨¢sico: J. D. Vance representa al electorado blanco y pobre del cintur¨®n del ¨®xido, el territorio desindustrializado que es clave en la elecci¨®n, y que ya lo fue en 2016, ...

La elecci¨®n del compa?ero de ticket de Donald Trump para las elecciones del pr¨®ximo noviembre responde a un c¨¢lculo electoral b¨¢sico: J. D. Vance representa al electorado blanco y pobre del cintur¨®n del ¨®xido, el territorio desindustrializado que es clave en la elecci¨®n, y que ya lo fue en 2016, cuando garantiz¨® la victoria de Trump en los Estados (Michigan, Pensilvania, Ohio) que le aseguraron la mayor¨ªa en el colegio electoral que le dio la presidencia (a pesar de haber perdido en voto popular).

La estrategia de Trump ahora (como entonces) pasa por aunar el apoyo de dos grupos con intereses aparentemente contradictorios. Por un lado, el gran capital (blanco, por supuesto) y por el otro los trabajadores industriales que han visto como cerraban las f¨¢bricas que hab¨ªan dado sentido a sus comunidades para trasladarlas a pa¨ªses (M¨¦xico) que garantizaban a sus propietarios menores costes laborales (adem¨¢s de sindicatos menos combativos y legislaciones m¨¢s laxas). Propietarios que son, en su mayor¨ªa, parte del voto (y del apoyo financiero) de la candidatura republicana y que, gracias a ello, se beneficiaron de la mayor rebaja impositiva a las clases m¨¢s pudientes en 30 a?os, impulsada por Trump en 2017.

?C¨®mo es posible que las ¨¢reas m¨¢s deprimidas del pa¨ªs den la presidencia a alguien que objetivamente legisla contra sus intereses? Pues creando una contraposici¨®n que esconda la anterior, algo que tradicionalmente viene haciendo el nacionalismo de derecha. Trump une los intereses contradictorios de la ¡°gran naci¨®n blanca¡± se?alando enemigos exteriores (China, los inmigrantes indocumentados) e interiores (woke), frente a los cuales no existen diferencias entre pobres y ricos blancos, todos ellos unidos en la preservaci¨®n de la Am¨¦rica eterna. As¨ª, es China la que se llev¨® sus f¨¢bricas, son los inmigrantes los que les quitan el trabajo y son los izquierdistas radicales los que han acabado con la moral y los principios que un d¨ªa hicieron grande ese pa¨ªs.

El caso particular de Vance es a¨²n m¨¢s evidente de esta discordancia de fondo en el discurso republicano. El candidato a vicepresidente, autor de un libro eleg¨ªaco del universo de los pobres blancos de los Apalaches (los hillbilly), proviene del Estado de Ohio, la zona cero de la pandemia de los opi¨¢ceos que asola a la clase empobrecida blanca y que no est¨¢ causada ni por los woke ni por China sino por una de esas familias blanqu¨ªsimas (y riqu¨ªsimas) a las que Trump rebaja sus impuestos, en buena parte gracias al voto de sus propias v¨ªctimas.