Las elecciones del ¨®xido

La pr¨®xima elecci¨®n presidencial de Estados Unidos pasa casi ¨²nicamente por la victoria en un pu?ado de Estados del norte industrial del pa¨ªs, como demuestran los perfiles elegidos por ambos partidos para los candidatos a la vicepresidencia. El pasado martes, la aspirante dem¨®crata, Kamala Harris, present¨® como compa?ero de candidatura a Tim Walz, gobernador de Minnesota, y termin¨® as¨ª de confirmar que ambas formaciones consideran imprescindible ganar en el arco formado por Pensilvania, M¨ªchigan, Minnesota y Wisconsin. Juntos albergan menos del 15% de la poblaci¨®n del pa¨ªs, pero la aritm¨¦tica del sistema los ha convertido desde hace una d¨¦cada en el ¨¢rbitro de la Casa Blanca.

¡°No puedo esperar a debatir con ese tipo¡±, dijo Walz, de 60 a?os, en su primer acto p¨²blico como candidato. El rival en cuesti¨®n es J. D. Vance, senador por Ohio, de 39 a?os, elegido por Donald Trump para acompa?arle en el cartel presidencial del Partido Republicano. Con Walz, los dem¨®cratas sacan al terreno de juego a un hombre que ha construido su carrera como un padre de familia simp¨¢tico, al que nadie puede acusar de izquierdista (un t¨¦rmino muy da?ino pol¨ªticamente entre el electorado moderado o dudoso) con experiencia en el ej¨¦rcito y como profesor de instituto. Se ha construido una carrera pol¨ªtica como congresista y gobernador ganando en distritos republicanos. Tanto Walz como Vance son hombres blancos del interior y representan a un tipo de electorado que, fuera de la diversidad de las ciudades, comparte cierta idiosincrasia tradicional, familiar y rural. Son perfiles que contrastan de manera dr¨¢stica con los candidatos a presidente: un pomposo millonario de Manhattan y una mujer negra progresista de San Francisco. La urbes de la costa y el interior. Son pr¨¢cticamente pa¨ªses distintos. El Medio Oeste y el llamado cintur¨®n del ¨®xido, sin embargo, est¨¢n lejos de tener un electorado homog¨¦neo. La tibieza de la Casa Blanca para condenar las atrocidades de Israel en Gaza divide a las bases dem¨®cratas en lugares con fuerte presencia de musulmanes que tienen un poder pol¨ªtico no menor. Las ¨²nicas dos mujeres musulmanas en el Congreso son dem¨®cratas de Minnesota y de M¨ªchigan.

La lecci¨®n del fracaso de 2016 sigue supurando en los estrategas dem¨®cratas. Hillary Clinton obtuvo tres millones de votos m¨¢s que Donald Trump, pero perdi¨® por apenas unas decenas de miles de votos en M¨ªchigan, Wisconsin y Pensilvania. Las consecuencias de aquel error las ha pagado el mundo entero. La victoria de Joe Biden en 2020 se ciment¨® en su gran predicamento en esa zona del pa¨ªs. Recuper¨® para los dem¨®cratas los tres Estados, m¨¢s Arizona y Georgia. Este noviembre, no pueden estar m¨¢s claras las prioridades: Harris y Walz, a la vez que Vance, han comenzado su campa?a juntos esta semana con una gira, precisamente, por esos cinco Estados.