Jefes de gabinete
Una sociedad democr¨¢tica debe replantearse si es correcto que entre todos financiemos a un ej¨¦rcito de mercenarios de partido que se ocupan de crear argumentarios
Cuando te enteras de lo que hacen los jefes de Gabinete del Gobierno (nacional o auton¨®mico), por no hablar de los jefes de gabinete de los jefes de Gabinete (un cargo marxista, pero no de Karl sino de Groucho), no te lo puedes creer. ?C¨®mo puede ser que el dinero de los contribuyentes sirva para pagar a ...
Cuando te enteras de lo que hacen los jefes de Gabinete del Gobierno (nacional o auton¨®mico), por no hablar de los jefes de gabinete de los jefes de Gabinete (un cargo marxista, pero no de Karl sino de Groucho), no te lo puedes creer. ?C¨®mo puede ser que el dinero de los contribuyentes sirva para pagar a personas que se dedican a filtrar documentos (da igual si legales o ilegales, reales o inventados) para desacreditar a un oponente? Se?oras y se?ores de La Moncloa y la Puerta de Sol, les pagamos para construir otras pol¨ªticas p¨²blicas, no para destruir a otros pol¨ªticos.
Una sociedad democr¨¢tica debe replantearse si es correcto que, entre todos, financiemos a un ej¨¦rcito de mercenarios de partido que se ocupan de crear argumentarios o jugar sucio, filtrando medias verdades o mentiras. Ser¨ªa ir¨®nico que quienes m¨¢s abominan de los horrores de la desinformaci¨®n manden equipos cuyo cometido es manipular la realidad para que parezca que los culpables de todo son los rivales pol¨ªticos.
Ojal¨¢ la verg¨¹enza ajena que sentimos tras descubrir las manos de cargos p¨²blicos en un tr¨¢fico de correos y wasaps, m¨¢s propio del contraespionaje de la Guerra Fr¨ªa que de la pol¨ªtica democr¨¢tica, sirviera para reflexionar sobre la cuesti¨®n de fondo: ?Cu¨¢l es el valor a?adido, para la sociedad (no para el partido), de esos puestos de trabajo?
Pero es dif¨ªcil cuando, como ocurre en nuestro pa¨ªs, todo el ¨¦nfasis se pone en la ley. Lo ¨²nico importante es si la persona A cometi¨® un delito cuando a las 8 de la ma?ana envi¨® un mensaje al individuo B. Y no es irrelevante, pero lo sustancial es qu¨¦ impacto social tiene la actividad de A, y sus subordinadas, a las 9, 10 u 11 de todos los d¨ªas.
Y, m¨¢s all¨¢ de la trivialidad de ¡°ganar el relato¡± del d¨ªa, el uso partidista de las instituciones no beneficia ni al propio partido. Imaginemos que La Moncloa y la Fiscal¨ªa se movilizaron para contrarrestar un bulo que consist¨ªa en que la Puerta de Sol hab¨ªa filtrado a la prensa un correo de la Fiscal¨ªa al abogado del novio de Ayuso, pero no el correo previo del abogado al fiscal reconociendo los delitos de su defendido. Y pensemos: ?Qu¨¦ hubiera pasado sin esa intervenci¨®n de La Moncloa y la Fiscal¨ªa? Pues que igualmente habr¨ªamos sabido la verdad (en d¨ªas u horas) y, adem¨¢s, ahorrado el calvario legal de algunos y el descr¨¦dito de las instituciones, empezando por el esfuerzo honesto de muchas personas en La Moncloa.
En una democracia con prensa libre, la verdad, r¨¢pida o lentamente, emerge siempre del barro como una estatua de m¨¢rmol. @VictorLapuente