Lo que hac¨ªa Elon Musk era parar un taxi

Nos esperan cuatro a?os de cenar tortilla de ibuprofeno cada noche, porque la turra trumpista viene con el volumen al m¨¢ximo. Donald Trump no lleva ni una semana de presidente y ya hemos pasado por varias crisis de comunicaci¨®n. La m¨¢s llamativa ha sido la provocada por Elon Musk: durante su discurso tras la toma de posesi¨®n de Trump hizo (dos veces) un saludo nazi, pero no era un saludo nazi porque en realidad solo entregaba su coraz¨®n al p¨²blico con un gesto que, por una tremenda casualidad, era calcado a un saludo nazi. Aunque ?por qu¨¦ no pueden ser las dos cosas? Lo nazi no es incompatible con lo cursi.

Por supuesto, entrar en X no aclaraba la pol¨¦mica: muchas cuentas de derechas defienden que era un saludo fascista, pero sobre todo con el objetivo de redoblar la indignaci¨®n de la izquierda. Otras sostienen teor¨ªas que parecen sacadas de una b¨²squeda r¨¢pida en Google, como la de que Musk hizo el saludo Bellamy, con el que los alumnos hac¨ªan el juramento a la bandera en las escuelas estadounidenses hace un siglo. Puede ser, por qu¨¦ no; tambi¨¦n podr¨ªa estar parando un taxi, pero est¨¢ bien mencionar que las escuelas cambiaron ese saludo en los a?os cuarenta porque, en fin, se parec¨ªa al saludo fascista y quedaba feo. Musk, date cuenta.

Hubo m¨¢s, y recibi¨® hasta Espa?a. El acr¨®nimo ¡°BRICS¡± se col¨® entre los asuntos m¨¢s comentados en X este martes, y no fue por los aficionados a la geopol¨ªtica. Un periodista pregunt¨® a Trump por el bajo gasto en defensa de algunos pa¨ªses de la OTAN, como Francia y Espa?a. Tal y como recoge la cr¨®nica de Miguel Jim¨¦nez en EL PA?S, Trump dijo que s¨ª, que esos pa¨ªses gastaban poco, y luego meti¨® a Espa?a entre los BRICS, el acr¨®nimo de Brasil, Rusia, India, China y Sud¨¢frica¡­ Ni uno cerca y ni uno en la OTAN: ¡°?Son un pa¨ªs BRICS? Bueno, son un pa¨ªs BRICS. Espa?a. ?Sabes lo que es un pa¨ªs BRICS? Ya lo averiguar¨¢s. Pero si los pa¨ªses BRICS quieren hacer eso [quiz¨¢ en referencia a su moneda alternativa], est¨¢ bien, pero vamos a poner al menos un arancel del 100% en los negocios que hagan con Estados Unidos. ?Sabes lo que es BRICS? Sabes lo que digo. As¨ª que esto no es ni siquiera una amenaza. De hecho, desde que hice esa declaraci¨®n, Biden dijo: ¡®Bueno, nos tienen con el agua al cuello¡¯. Y yo dije: ¡®No, los tenemos nosotros con el agua al cuello¡±.

La declaraci¨®n de Trump no tiene ning¨²n sentido en ning¨²n idioma. Si un amigo me dice algo parecido, lo llevo al m¨¦dico de inmediato.

No son solo an¨¦cdotas. Nos ayudan a entender qu¨¦ clase de gente planea destrozar el mundo en los pr¨®ximos cuatro a?os. El problema es que estas chaladuras, como la de comprar Groenlandia, captan casi toda nuestra atenci¨®n en las redes y fuera de ellas. A Trump, Musk y sus aliados, tambi¨¦n en Espa?a, se les da muy bien ocupar tiempo, tuits y titulares. Llevan m¨¢s de 10 a?os haci¨¦ndolo, y seguimos entrando al trapo. Marcan los temas del d¨ªa, aunque no siempre voluntariamente, y los imponen en sus t¨¦rminos: los inmigrantes comen perros y eso no era un saludo nazi, le ha dado un tir¨®n. Mientras tanto, prestamos menos atenci¨®n a los decretos de Trump, que dan forma a su populismo provinciano y racista, y que afectar¨¢n a la crisis clim¨¢tica, a la cooperaci¨®n internacional y al futuro de millones de personas que han nacido al otro lado de una frontera.

Por suerte, hay gente que s¨ª est¨¢ atenta. Trump y su vicepresidente, J. D. Vance, asistieron el martes a una misa oficiada por la obispa episcopal de Washington, Mariann Budde, quien en su serm¨®n pidi¨® al presidente que reconsidere sus ataques a personas desprotegidas: ¡°En el nombre de Dios, le pido que tenga piedad de las personas de nuestro pa¨ªs que tienen miedo ahora¡±. Budde se refer¨ªa a las personas de la comunidad LGTB, en especial los menores, y a los inmigrantes y refugiados. ¡°Puede que no sean ciudadanos ni tengan la documentaci¨®n adecuada, pero la inmensa mayor¨ªa de los inmigrantes no son delincuentes. Pagan impuestos y son buenos vecinos. Son fieles miembros de nuestras iglesias y mezquitas, sinagogas, gurdwaras y templos¡±.

A Trump no le gust¨® la misa. Dijo que podr¨ªa haber sido mucho mejor. Demasiado humana y demasiado cristiana para ¨¦l, supongo.