AFSI, el peque?o bufete andorrano que gestion¨® la cuenta de Guardiola y cientos de sociedades opacas a la sombra de Andbank
Una peque?a gestor¨ªa desconocida es la responsable de las estructuras de clientes como el entrenador del Manchester City. Sus documentos internos revelan la falta de control sobre compa?¨ªas involucradas en casos de lavado de dinero
Andorra era el pa¨ªs favorito de los abogados del despacho paname?o Alem¨¢n, Cordero y Galindo (Alcogal). Sus empleados enviaron al menos 2.245 cartas en papel al Principado entre 2002 y 2018. Era la forma m¨¢s segura de hacer llegar certificados de acciones, poderes especiales u otra informaci¨®n b¨¢sica de las sociedades que abr¨ªan en para¨ªsos fiscales.
Una de las direcciones que m¨¢s veces encabezaba esas misivas es la de AFSI, un peque?o bufete del que hoy no hay rastro. Ni f¨ªsico ni virtual. Andbank, el segundo banco de Andorra por activos, cre¨® en 1997 esta gestor¨ªa que durante m¨¢s de 20 a?os ha administrado la apertura de sociedades en jurisdicciones opacas para clientes de muchos sitios, pero sobre todo de Espa?a. Entre otros, gestionaron la sociedad vinculada al entrenador del Manchester City, Pep Guardiola. La estrecha vinculaci¨®n con la entidad permit¨ªa abrir f¨¢cilmente una cuenta bancaria cuyo beneficiario quedaba oculto detr¨¢s de una compa?¨ªa pantalla en Belice, Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas, Panam¨¢ o las Seychelles.
La investigaci¨®n period¨ªstica de los Papeles de Pandora, coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ) y publicada en exclusiva en Espa?a por El PA?S y La Sexta, revela el papel de esta peque?a gestor¨ªa en la f¨¢brica de engranajes societarios opacos de Alcogal. Los 11,9 millones de archivos internos de este y otros 14 despachos de abogados muestran la falta de controles sobre el uso de las estructuras que AFSI ayud¨® a crear con Alcogal como proveedor de materia prima: sociedades y testaferros.
Los documentos ahondan adem¨¢s en el papel que Andorra encarn¨® como atractivo para¨ªso fiscal para fortunas inconfesables. Una industria que oper¨® en silencio amasando riqueza al menos hasta 2017, cuando este Estado de 77.543 habitantes suprimi¨® el secreto bancario, introdujo en su legislaci¨®n el delito fiscal y enfil¨® el camino para despojarse de la m¨¢cula de una econom¨ªa ligada al sigilo financiero.
Una gestora a la sombra de Andbank
La relaci¨®n de Alcogal con AFSI era estrecha. Las dos oficinas empezaron a colaborar ya en 1998, cuando AFSI ten¨ªa solo un a?o de vida. Lo formaban un grupo de profesionales del sector, pero en los estatutos de su creaci¨®n consta qui¨¦n hizo posible su puesta en marcha: una sociedad an¨®nima andorrana y el Banc Agricol i Comercial D¡¯Andorra SA, actual Andbank. Entre los directores del despacho figuraban dos directivos vinculados a Andbank Panam¨¢ hasta 2018.
Para un despacho como Alcogal, un intermediario de este tipo es clave para captar personas interesadas en sortear las leyes europeas. Para Alcogal, de hecho, este tipo de intermediarios son los verdaderos clientes. Contaba con cientos de ellos repartidos por todo el mundo y AFSI era, en 2018, el noveno con m¨¢s sociedades abiertas. Ten¨ªa 320: 212 en Panam¨¢, 102 en Belice, 5 en Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas, 1 en Seychelles. Mantener tantas sociedades lleg¨® a costar al despacho andorrano unos 60.000 d¨®lares anuales (51.500 euros), seg¨²n las facturas emitidas por Alcogal.
La correspondencia entre los dos despachos deja ver lo relativamente sencillos que eran los tr¨¢mites. Al igual que otras gestoras, AFSI eleg¨ªa un nombre para la sociedad, enviaba la petici¨®n por correo electr¨®nico a Alcogal y sus empleados a su vez enviaban por DHL la documentaci¨®n original firmada. Durante a?os no se interesaron por qui¨¦n era el due?o real de la sociedad que estaban abriendo.
Pero en 2016 la situaci¨®n se complic¨®. Ese a?o se multiplican las peticiones sobre sociedades de Panam¨¢, despu¨¦s de que el pa¨ªs centroamericano accediera a facilitar datos a las administraciones de todo el mundo como reacci¨®n tras el esc¨¢ndalo de los Papeles de Panam¨¢, la investigaci¨®n del ICIJ que dej¨® al descubierto las f¨¢bricas de sociedades pantalla en el pa¨ªs. Y los empleados de Alcogal se vieron obligados a levantar la tapa de sus sociedades para averiguar qui¨¦n estaba debajo.
?De qui¨¦n es esta sociedad?
En marzo de 2017, AFSI escribi¨® a Alcogal sobre Lelila INC. Quer¨ªa disolver la sociedad ¡°debido a publicaci¨®n de informaci¨®n negativa sobre el titular¡±. En los archivos internos de Alcogal el accionista era ¡°un portador¡±, es decir, una hoja firmada por un testaferro. El beneficiario real hab¨ªa firmado un contrato privado con AFSI el 29 de octubre de 2010, documento que solo ten¨ªan ¨¦l mismo y el despacho andorrano.
Al recibir la informaci¨®n de AFSI, Alcogal se da cuenta de que la informaci¨®n negativa es una noticia del diario Abc de 2015 donde se habla de la operaci¨®n contra la mafia de Gao Ping, que envi¨® a China de forma ilegal cerca de 70 millones de euros desde Andorra. El due?o de Lelila INC, ?ngel Cisneros P¨¦rez, es mencionado como ¡°gestor de env¨ªos de dinero para sus propias empresas, por un volumen total de 730.000 euros¡±. Los env¨ªos de dinero de la trama de Gao Ping se remontaban a 2011. Seis a?os despu¨¦s de que ocurrieran los hechos y dos a?os despu¨¦s de que apareciera el beneficiario en los medios, AFSI y Alcogal se alarmaban y pon¨ªan en marcha los tr¨¢mites para disolver la sociedad.
Ese a?o 2017 el flujo de informaci¨®n entre los dos despachos se hace m¨¢s denso, con intenci¨®n de descubrir los verdaderos accionistas de muchas de las sociedades abiertas. En mayo, los empleados de Alcogal ped¨ªan a AFSI informaci¨®n sobre otro beneficiario cuyo nombre real ignoraban: el de Tramuntana SA, constituida siete a?os antes. Hasta entonces no sab¨ªan ¡ªni parece que hubieran intentado saber¡ª que el due?o era Jaume Sabater Rovira. Al buscar su nombre en Internet se encontraron con un art¨ªculo del diario P¨²blico que detalla su papel en la consultora catalana EFIAL, desmantelada tras su implicaci¨®n en el desv¨ªo de fondos p¨²blicos en varios ayuntamientos catalanes. El art¨ªculo que describe la operativa es de un a?o antes. Se empieza el proceso de disoluci¨®n de la sociedad y, curiosamente, no se interviene sobre el resto de sociedades creadas a petici¨®n de AFSI. All¨ª Sabater Rovira aparec¨ªa como apoderado para abrir cuentas bancarias en el Banque Priv¨¦e Edmond de Rothschild de Nassau, Bahamas. Sabater ha preferido no comentar esta informaci¨®n alegando razones de privacidad.
Esta din¨¢mica, de disolver una compa?¨ªa a?os despu¨¦s de que se hubiera podido usar para saltarse la ley, no se limita a compa?¨ªas de ciudadanos espa?oles. AFSI trabajaba tambi¨¦n con clientes internacionales. A Luis Carlos Fernandes Afonso, director financiero de la Fundaci¨®n Petros, vinculado a la petrolera Petrobras y al conocido caso de corrupci¨®n Lava Jato en Brasil, le hab¨ªa abierto una sociedad en 2011, Ode Investments Group. Es el a?o en el que, seg¨²n los instructores del caso en Brasil, Alonso habr¨ªa usado varias sociedades para ocultar fondos recibidos como sobornos. En 2017, cuando Alcogal recibe la informaci¨®n apunta internamente que Alonso ¡°fue condenado en el primer grado por la mala conducta, acusado de haber cargado ¡®peaje¡¯ [a] una fundaci¨®n para la que se gan¨® un contrato en la ciudad de S?o Paulo, en 2003. (...) La condena es de 2012 y se encuentra bajo apelaci¨®n¡±. Los archivos no dejan claro qu¨¦ hacen con la sociedad, que hoy est¨¢ disuelta, pero las ¨²ltimas notas del despacho apuntan a que el beneficiario no autoriz¨® que se diera informaci¨®n de su compa?¨ªa.
AFSI trabaj¨® tambi¨¦n con otro brasile?o condenado en Lava Jato, Carlos Fernando Costa, expresidente de Petros. Esta vez escribi¨® a Panam¨¢ no para disolver la sociedad, sino para cambiar el nombre del accionista principal. Era 2017 y solo entonces Alcogal averigu¨® los cargos contra Costa, acusaciones que ¨¦l siempre ha negado. El 17 de abril renunciaron como representantes locales de la sociedad, que llevaba cinco a?os activa. Costa entrar¨¢ en prisi¨®n un a?o y medio m¨¢s tarde.
Estructuras complejas
El nombre de AFSI salpica los Papeles de Pandora en decenas de casos. Muchos de ellos ser¨¢n detallados en los pr¨®ximos d¨ªas por este peri¨®dico; otros eran estructuras abiertas para personas sin relevancia p¨²blica. Como los 90 residentes en Espa?a de los que AFSI fue obligado, por un cambio de la legislaci¨®n de Belice, a remitir informaci¨®n a Alcogal en 2018. Eran sociedades abiertas hasta 10 a?os antes y, hasta entonces, solo un documento privado entre el due?o y el despacho andorrano revelaba su beneficiario real.
El despacho tambi¨¦n pod¨ªa ayudar a crear estructuras fiscales complejas, a menudo vinculadas a una cuenta bancaria para que alguien cobrara en Andorra servicios ofrecidos en otros pa¨ªses europeos. Es lo que hizo Jose Regojo Velasco, el empresario portugu¨¦s que en enero de 2012 vendi¨® el negocio de Massimo Dutti a Inditex. Tres d¨ªas antes de que se hiciera p¨²blica la venta, la filial holandesa del gigante espa?ol del textil recibi¨® una factura de tres millones de euros a pagar en la cuenta de Andbank de Petunia Enterprises por los ¡°servicios realizados durante la operaci¨®n de la franquicia de Massimo Dutti en Portugal¡±. AFSI hab¨ªa abierto Petunia Enterprises solo dos a?os antes y, a trav¨¦s de un poder, hab¨ªa dispuesto la cuenta para Jose Regojo Velasco: la sociedad serv¨ªa como pantalla para esconder el nombre del empresario. El due?o del grupo textil portugu¨¦s no ha contestado a las preguntas remitidas por EL PA?S y La Sexta.
AFSI tambi¨¦n pidi¨® crear sociedades en las Islas V¨ªrgenes que ejercieran de accionistas de compa?¨ªas en Holanda o en las Antillas holandesas, que a su vez eran matrices de empresas con sede en pa¨ªses europeos. Es un tipo de estructura que se conoce como s¨¢ndwich holand¨¦s, como coinciden los expertos consultados: los dividendos salen de un pa¨ªs y van a una sociedad holandesa legalmente, donde no tributan. De ah¨ª ya se pueden llevar a un para¨ªso fiscal como las Antillas Holandesas pagando solo un 2%. Ah¨ª es donde se pierde el rastro, al no ser conocidos los accionistas reales de esta sociedad: las acciones nominales no aparecen en los registros de ese pa¨ªs, sino solo, bajo llave, en los cajones de los despachos que crearon las sociedades. Es decir, de AFSI.
EL PA?S ha intentado, sin ¨¦xito, recabar las versiones de AFSI, que no ha contestado a las preguntas y Andbank, que ha preferido no hacer comentarios.
Andorra, ante su pasado
Utilizar sociedades abiertas desde Andorra para lavar fondos de la delincuencia internacional fue lo que hizo estallar la intervenci¨®n, en marzo de 2015, de la Banca Privada d¡¯Andorra (BPA). Con 9.000 clientes y 8.000 millones de volumen de negocio, este peque?o banco acogi¨® dinero manchado de Odebrecht, el gigante brasile?o de la construcci¨®n que protagoniz¨® la mayor trama de sobornos de Am¨¦rica. A ra¨ªz de la investigaci¨®n afloraron en este banco tambi¨¦n 2.000 millones de la trama que saque¨® la estatal Petr¨®leos de Venezuela SA (PDVSA) o se revel¨® c¨®mo prohombres del Partido Revolucionario Institucional (PRI) mexicano eligieron tambi¨¦n Andorra para esconder su dinero.
Las autoridades andorranas quieren pasar p¨¢gina de la intervenci¨®n del banco fundado por los hermanos Cierco, pero no es f¨¢cil. En la actualidad, los juzgados del Principado instruyen una decena de causas surgidas a ra¨ªz del caso BPA. El Ejecutivo andorrano se esfuerza por proyectar la imagen de un pa¨ªs comprometido con la transparencia fiscal y la persecuci¨®n del blanqueo. Seg¨²n un documento de trabajo interno del pa¨ªs, Andorra asegura seguir los est¨¢ndares de transparencia e intercambio de informaci¨®n de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE, en sus siglas en ingl¨¦s). El peque?o Estado intercambia informaci¨®n con un centenar de pa¨ªses, entre los que se encuentran los miembros de la Uni¨®n Europea. Y la Unidad de Inteligencia Financiera de Andorra (Uifand) ¡ªun organismo p¨²blico que persigue el blanqueo¡ª sigue 40 recomendaciones del GAFI (Grupo de Acci¨®n Financiera Internacional) para evitar el delito en este pa¨ªs cincelado por monta?as que, desde 2020, es miembro del Fondo Monetario Internacional.
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