Arabia Saud¨ª impuso las empresas que dirigieron el fondo hispano-saud¨ª que fich¨® a Corinna Larsen
El Ministerio de Comercio intent¨® sacar a concurso la elecci¨®n de los gestores, pero los saud¨ªes se negaron. Compa?¨ªas espa?olas se comprometieron a aportar 200 millones, pero la crisis lo frustr¨®
Dos empresas extranjeras impuestas por Arabia Saud¨ª dirigieron el Fondo de Infraestructuras Hispano Saud¨ª creado en 2007 durante el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y con el apoyo del entonces rey Juan Carlos I, seg¨²n han se?alado a EL PA?S exfuncionarios espa?oles que participaron en su lanzamiento. El fondo contrat¨® a Corinna Larsen y estableci¨® su sede en Guernsey, un refugio fiscal en las islas del Canal de la Mancha.
La examiga del rey em¨¦rito pidi¨® en 2007 a los administradores del fideicomiso Peregrine, en Nueva Zelanda, que en el supuesto de su muerte entregaran a Juan Carlos I ¡°el 30% de los ingresos provenientes del Fondo de Inversiones Hispano Saud¨ª¡±, seg¨²n consta en los documentos de los Papeles de Pandora, una investigaci¨®n pilotada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ), en la que han participado EL PA?S y La Sexta. Este trabajo analiza los archivos secretos de 14 despachos de abogados y desvela sociedades instrumentales de pol¨ªticos, empresarios y artistas de m¨¢s de 90 pa¨ªses. El abogado de Larsen afirma que los documentos del fideicomiso Peregrine son falsos. La consultora no ha respondido a las preguntas de este consorcio sobre su relaci¨®n contractual con el citado fondo.
El fideicomiso o fondo fiduciario es un instrumento particularmente opaco. Se trata de un contrato en el cual el testador deja encomendado su patrimonio o parte de este a la buena fe de un representante legal (fideicomisario) para que, en caso y tiempo determinados, lo transmita a otra persona o la invierta seg¨²n las instrucciones recibidas. Los fideicomisos son herramientas habituales entre los instrumentos que ofrecen los bancos suizos para clientes que buscan opacidad y evasi¨®n fiscal.
La iniciativa para la creaci¨®n del Fondo de Infraestructuras Hispano Saud¨ª fue del Ministerio de Asuntos Exteriores, al frente del cual estaba Miguel ?ngel Moratinos, y del propio Juan Carlos I, pero la gesti¨®n del proyecto la llevaron dos empresas extranjeras: el fondo brit¨¢nico Cheyne Capital, con sede en Londres, y Arox Infraestructures AG en Z¨²rich (Suiza), una compa?¨ªa especializada en infraestructuras.
Nunca supimos que Corinna Larsen fuera contratada. Apareci¨® como otro inversor posible y dijo que traer¨ªa dinero de otros fondosUna fuente conocedora del lanzamiento del fondo
Cheyne Capital contrat¨® supuestamente a Corinna Larsen para este proyecto y la present¨® como su colaboradora en reuniones en Madrid, seg¨²n afirman personas que participaron en el proyecto. El fondo brit¨¢nico no ha respondido a las preguntas enviadas por este peri¨®dico. ¡°Nos dijeron que trabajaba para ellos y que hablar¨ªa con inversores. No supimos nada sobre sus tareas ni con qui¨¦n hablaba¡±, afirma una fuente conocedora del lanzamiento del fondo.
¡°Nunca supimos que fuera contratada. Apareci¨® como otro inversor posible y dijo que traer¨ªa dinero de otros fondos. Tampoco sab¨ªamos de su relaci¨®n con el rey¡±, afirma un exministro del Gobierno de Zapatero que particip¨® en el embri¨®n de esta iniciativa.
El apoyo institucional de Espa?a y Arabia Saud¨ª al lanzamiento del fondo fue total. Los embajadores de los dos pa¨ªses facilitaron distintos encuentros de directivos de Cheyne Capital, del Banco Morgan Stanley y de la propia Corinna Larsen con las autoridades de ambos pa¨ªses, seg¨²n reconoce uno de sus participantes. En junio de 2007, la prensa de Riad se hizo eco de una visita de la consultora alemana, en compa?¨ªa del embajador espa?ol Manuel Alabart, al pr¨ªncipe Al-Waleed bin Talal, seg¨²n public¨® el eldiario.es.
Larsen en escena
El 19 de junio de 2007, d¨ªas despu¨¦s de su viaje a Riad, Larsen asisti¨® en el palacio de El Pardo a la presentaci¨®n oficial del fondo en un acto al que acudieron el entonces ministro de Industria Joan Clos, el ministro de Finanzas saud¨ª Ibrahim ben-Abdul Aziz Al-Assaf, y el presidente de la CEOE Gerardo D¨ªaz Ferr¨¢n, entre otras autoridades y representantes del mundo pol¨ªtico y empresarial. ¡°Me la presentaron en el acto y me dijo: ¡®Este es un proyecto muy importante para Espa?a¡±, recuerda un alto funcionario espa?ol de su fugaz encuentro con la consultora alemana.
Ese mismo d¨ªa, Juan Carlos I impuso al rey de Arabia Saud¨ª Abdal¨¢ bin Abdelazziz el Tois¨®n de oro, durante su visita a Madrid. En su discurso en la cena de gala en el Palacio Real, Juan Carlos I alab¨® el proyecto del fondo hispano-saud¨ª.
El fondo brit¨¢nico Cheyne Capital contrat¨® al banco de inversiones estadounidense Morgan Stanley para que sus ejecutivos en Madrid, Londres y Riad hicieran las presentaciones y captaran a empresas que aportaran liquidez para la creaci¨®n del fondo, seg¨²n afirma una fuente del sector bancario. La promesa era participar en un gigantesco plan de infraestructuras previsto en Arabia Saud¨ª cuyo monto ascend¨ªa a varios billones de d¨®lares.
¡°En una primera fase, el objetivo era levantar 500 millones de d¨®lares, 250 por empresas espa?olas y otros 250 de capital saud¨ª. Se habl¨® con varios bancos para que financiaran las inversiones futuras del fondo. Si consigues 500 de capital se podr¨ªan obtener unos 4.000 de deuda¡±, recuerda un ejecutivo financiero que particip¨® en el lanzamiento.
Se edit¨® un folleto del fondo, y Morgan Stanley hizo distintas presentaciones. Alrededor de 14 empresas espa?olas, entre las que figuraban OHL, Sacyr, Caja Madrid (Bankia) y La Mutua, entre otras, se comprometieron a aportar unos 200 millones, pero el capital saud¨ª prometido no super¨® los 100 millones. ¡°La parte saud¨ª no funcion¨® y las empresas espa?olas dijeron: O todos o ninguno. La crisis del 2008 y 2009 acab¨® con el proyecto y, finalmente, nadie lleg¨® a poner lo que se hab¨ªa comprometido¡±, se?ala uno de los participantes.
El Fondo de Infraestructuras Hispano Saud¨ª se registr¨® en Saint Peter Port, capital de Guernsey, una isla del Canal de la Mancha de unos 70.000 habitantes, cuyo jefe de Estado es la reina Isabel II de Inglaterra. Al igual que Jersey, Man o Sark, otras islas del Canal, su econom¨ªa se basa en los servicios financieros y est¨¢ considerada un para¨ªso fiscal. ¡°En aquella ¨¦poca, lo normal era que todos los emisores en los mercados de capitales lo hicieran all¨ª para aprovechar la baja tributaci¨®n¡±, afirma una de las fuentes consultadas.
Stuart Fiertz y Jonathan Lourie, fundadores de Cheyne Capital y exdirectivos de Morgan Stanley, dirigieron el tim¨®n de este proyecto, viajaron varias veces a Espa?a y participaron en distintas reuniones con ejecutivos espa?oles, seg¨²n recuerdan las fuentes consultadas. En alguna ocasi¨®n, lo hicieron en compa?¨ªa de Larsen y la presentaron como su colaboradora.
Fiertz fue uno de los directores del fondo Energy and Infrastructure G.P Limited, creado en Guernsey el 10 de abril de 2007 y cerrado el 23 de agosto de 2012. El fondo de inversi¨®n brit¨¢nico emple¨® para ello a su sociedad Cheyne Equity Partners, con sede en T¨®rtola, otro para¨ªso fiscal en las Islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas, que figura como propietario de 8.000 acciones. A nombre de Boreas Capital Limited, domiciliada en Guernsey, se inscribieron otras 8.000 acciones.
Por Arox Infrastructure AG, la otra compa?¨ªa motora del proyecto, acud¨ªan a las reuniones en Madrid Ludovico Manfredi y Eberhard von Koerber, seg¨²n recuerdan los testigos consultados. Ambos figuran, tambi¨¦n, en el organigrama del mencionado fondo creado en Guernsey, seg¨²n ha comprobado este diario en el Registro de compa?¨ªas de la isla. Tanto Cheyne Capital como Arox quer¨ªan invertir en los proyectos que ejecutar¨ªa el fondo.
Imposici¨®n saud¨ª
?Qui¨¦n decidi¨® que dos empresas extranjeras como Cheyne Capital y Arox Infraestructures dirigieran el fondo hispano-saud¨ª? ¡°Nosotros pensamos en sacar un concurso p¨²blico, transparente y competitivo, pero los saud¨ªes dijeron que ten¨ªan que ser esas dos compa?¨ªas. Nadie de la Administraci¨®n espa?ola particip¨® en eso¡±, recuerda un alto funcionario del Ministerio de Comercio que estuvo en el lanzamiento.
¡°El representante saud¨ª coment¨® que para llevar un proyecto de esa envergadura se necesitaba una entidad financiera de ¨¢mbito mundial y eligieron a Morgan Stanley. La Administraci¨®n espa?ola no particip¨® en la gesti¨®n de los contratos, gestores y dem¨¢s, porque eso lo dominaban los saud¨ªes. Nosotros no supimos nada porque no pusimos nada, ni un euro. Con Larsen no tuvimos reuniones porque nosotros no d¨¢bamos proyectos¡±, explica esta fuente.
En 2010 los directivos de Cheyne y de Arox convocaron una reuni¨®n en Madrid con las empresas espa?olas comprometidas con el proyecto para informarles del cierre del fondo. En la misma se inform¨® de los gastos en los que se hab¨ªa incurrido, varios millones de euros en viajes, reuniones, abogados y gestiones que se ¡°prorratearon¡± entre todas. ¡°Creo que se cerr¨® en 2010, no estoy seguro. Las empresas espa?olas pagaron algo. Los gastos no fueron demasiado gravosos¡±, afirma una fuente cercana al proyecto. Otras fuentes pr¨®ximas a las empresas afectadas aseguran, en cambio, que los gastos ascendieron a unos 16 millones.
Alguna de las firmas espa?olas que participaron en el proyecto reconocen su compromiso inicial, pero ninguna de las consultadas ha facilitado a este peri¨®dico la cifra que pagaron finalmente cuando se cerr¨® el fondo.
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