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Seguridad Alimentaria

Bombas en Ucrania, hambre en ?frica

Las llaman las tres c: covid, cambio clim��tico y conflictos. Han generado un efecto de crisis en buena parte del continente africano. Aqu��, en N��ger, est��n muchas de sus v��ctimas, que sufren la subida desproporcionada de precios del grano y de los fertilizantes

Pedro Armestre Celia Zafra

17 jul 2022 - 05:30CEST

N��ger es un pa��s de mujeres y ni?os. Casi el 60% de la poblaci��n tiene menos de 14 a?os. La tasa de fertilidad es de unos siete hijos por mujer. Con una poligamia aceptada y extendida, es habitual ver n��cleos familiares de 15 ni?os y ni?as, como el de la imagen, en la aldea de Ken Dema: son Tayaba y Atara, las dos esposas, e Ibrahim, el marido, junto a su numerosa descendencia. — N��ger es un pa��s de mujeres y ni?os. Casi el 60% de la poblaci��n tiene menos de 14 a?os. La tasa de fertilidad es de unos siete hijos por mujer. Con una poligamia aceptada y extendida, es habitual ver n��cleos familiares de 15 ni?os y ni?as, como el de la imagen, en la aldea de Ken Dema: son Tayaba y Atara, las dos esposas, e Ibrahim, el marido, junto a su numerosa descendencia.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

En los periodos entre cosechas, que van de junio a septiembre, se come lo que se ha podido almacenar en los graneros. Si las lluvias no llegan, las reservas se acaban, y el precio prohibitivo del grano en el mercado hace que las familias no encuentren manera de alimentar a sus hijos. En la regi��n sure?a de Maradi, 1.350 familias �Cm��s de 9.000 personas�C han podido comprar alimentos este a?o gracias a las transferencias de dinero en efectivo que ha puesto en marcha Save the Children. — En los periodos entre cosechas, que van de junio a septiembre, se come lo que se ha podido almacenar en los graneros. Si las lluvias no llegan, las reservas se acaban, y el precio prohibitivo del grano en el mercado hace que las familias no encuentren manera de alimentar a sus hijos. En la regi��n sure?a de Maradi, 1.350 familias �Cm��s de 9.000 personas�C han podido comprar alimentos este a?o gracias a las transferencias de dinero en efectivo que ha puesto en marcha Save the Children.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

Cuando las cosas vienen mal dadas, los hombres emigran hacia Libia, al norte, o a Nigeria, al sur. Miles de madres se quedan entonces solas con sus hijos sin medios para alimentarles. A menudo caminan 15 o 20 kil��metros para buscar la ayuda sanitaria que necesitan en centros de atenci��n a la desnutrici��n moderada y aguda, como este de Agui��, al sur del pa��s. Sus maridos a veces mandan dinero, a veces no. A veces vuelven, a veces no. — Cuando las cosas vienen mal dadas, los hombres emigran hacia Libia, al norte, o a Nigeria, al sur. Miles de madres se quedan entonces solas con sus hijos sin medios para alimentarles. A menudo caminan 15 o 20 kil��metros para buscar la ayuda sanitaria que necesitan en centros de atenci��n a la desnutrici��n moderada y aguda, como este de Agui��, al sur del pa��s. Sus maridos a veces mandan dinero, a veces no. A veces vuelven, a veces no.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

Un ni?o llora en brazos de su madre mientras espera su turno en el centro de recuperaci��n nutricional de Agui��, al sur de N��ger, donde se atiende a los casos moderados. — Un ni?o llora en brazos de su madre mientras espera su turno en el centro de recuperaci��n nutricional de Agui��, al sur de N��ger, donde se atiende a los casos moderados.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

La buena noticia es que la mayor��a de los ni?os y ni?as tratados aqu�� mejoran su salud. Las tasas de recuperaci��n, gracias al seguimiento sanitario, superan el 80%. En los libros de registro que muestra el personal del centro al equipo de Save The Children, se puede ver repetida la palabra ��gu��ri��, curado (en franc��s). — La buena noticia es que la mayor��a de los ni?os y ni?as tratados aqu�� mejoran su salud. Las tasas de recuperaci��n, gracias al seguimiento sanitario, superan el 80%. En los libros de registro que muestra el personal del centro al equipo de Save The Children, se puede ver repetida la palabra ��gu��ri��, curado (en franc��s).PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

En el centro vecino, donde acaban los casos m��s graves, un ni?o en estado de desnutrici��n aguda es monitorizado para revisar sus constantes vitales. ��Nunca te acostumbras a esto��, cuenta el director del Centro de Recuperaci��n (CRENI), Ibrahim Seydou. Y est�� bien que as�� sea. — En el centro vecino, donde acaban los casos m��s graves, un ni?o en estado de desnutrici��n aguda es monitorizado para revisar sus constantes vitales. ��Nunca te acostumbras a esto��, cuenta el director del Centro de Recuperaci��n (CRENI), Ibrahim Seydou. Y est�� bien que as�� sea.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

Madres esperan desde temprano a que comience la atenci��n en el centro de educaci��n nutricional de Agui��, al sur de N��ger. — Madres esperan desde temprano a que comience la atenci��n en el centro de educaci��n nutricional de Agui��, al sur de N��ger.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

En los casos moderados y agudos, que todav��a no han llegado al peor estadio del hambre, el Pumply Nut hace milagros. Con este superalimento terap��utico, los ni?os se recuperan en pocos d��as, pero el precio de este valioso reconstituyente tambi��n ha aumentado y puede seguir haci��ndolo hasta casi un 20% de lo que costaba en 2021. — En los casos moderados y agudos, que todav��a no han llegado al peor estadio del hambre, el Pumply Nut hace milagros. Con este superalimento terap��utico, los ni?os se recuperan en pocos d��as, pero el precio de este valioso reconstituyente tambi��n ha aumentado y puede seguir haci��ndolo hasta casi un 20% de lo que costaba en 2021.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

Una madre agotada es consolada por su hijo en el centro de educaci��n nutricional para casos moderados de Agui��. Al fondo, el cabello de otro ni?o se ha aclarado, un s��ntoma habitual de la malnutrici��n. — Una madre agotada es consolada por su hijo en el centro de educaci��n nutricional para casos moderados de Agui��. Al fondo, el cabello de otro ni?o se ha aclarado, un s��ntoma habitual de la malnutrici��n.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

La balanza como la gran amenaza. Sin una movilizaci��n extraordinaria de recursos, la crisis de hambre que se avecina ser�� de unas dimensiones que no ve��amos desde hace 40 a?os. Las sequ��as cada vez m��s frecuentes, la subida de precios �Cel saco de mijo y sorgo ha doblado su precio en estos meses de escasez�C y el abandono institucional pesan m��s que las vidas de muchos ni?os. — La balanza como la gran amenaza. Sin una movilizaci��n extraordinaria de recursos, la crisis de hambre que se avecina ser�� de unas dimensiones que no ve��amos desde hace 40 a?os. Las sequ��as cada vez m��s frecuentes, la subida de precios �Cel saco de mijo y sorgo ha doblado su precio en estos meses de escasez�C y el abandono institucional pesan m��s que las vidas de muchos ni?os.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

Si el estado de salud se agrava, hay que hospitalizar. Amina permanece ingresada en el centro de recuperaci��n nutricional de Agui��. Aqu�� se tratan casos de desnutrici��n aguda como este, en los que la ��nica posibilidad de recuperarse pasa ya por la alimentaci��n medicalizada. La escasez de gasolina para las ambulancias �Ctambi��n por la subida del precio del combustible�C complica la posibilidad de que lleguen a tiempo. — Si el estado de salud se agrava, hay que hospitalizar. Amina permanece ingresada en el centro de recuperaci��n nutricional de Agui��. Aqu�� se tratan casos de desnutrici��n aguda como este, en los que la ��nica posibilidad de recuperarse pasa ya por la alimentaci��n medicalizada. La escasez de gasolina para las ambulancias �Ctambi��n por la subida del precio del combustible�C complica la posibilidad de que lleguen a tiempo.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

A Tayaba ya se le muri�� un hijo. Teniendo en cuenta la tasa de mortalidad infantil del pa��s, ese es el n��mero que le tocar��a a cada madre nigerina: perder un hijo (al menos). En situaciones como la de este verano, el dinero mensual que le transfiere Save the Children le da para alimentar a su familia sin riesgos. ��Si se acaba esa transferencia, no s�� qu�� soluci��n puedo encontrar��, dice. — A Tayaba ya se le muri�� un hijo. Teniendo en cuenta la tasa de mortalidad infantil del pa��s, ese es el n��mero que le tocar��a a cada madre nigerina: perder un hijo (al menos). En situaciones como la de este verano, el dinero mensual que le transfiere Save the Children le da para alimentar a su familia sin riesgos. ��Si se acaba esa transferencia, no s�� qu�� soluci��n puedo encontrar��, dice.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

Mujeres y adolescentes muelen el mijo en un poblado junto a la carretera que une la capital de la regi��n de Maradi con la poblaci��n de Agui��. El mijo es la base de la dieta en N��ger y su preparaci��n corresponde siempre a las mujeres. — Mujeres y adolescentes muelen el mijo en un poblado junto a la carretera que une la capital de la regi��n de Maradi con la poblaci��n de Agui��. El mijo es la base de la dieta en N��ger y su preparaci��n corresponde siempre a las mujeres.PEDRO ARMESTRE (pedro armestre)

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