Los casos de tuberculosis aumentan por primera vez desde hace dos d¨¦cadas

Primero fue la crisis de la covid-19 y despu¨¦s, los conflictos en curso en Europa del Este, ?frica y Oriente Medio, la creciente inseguridad alimentaria y la inestabilidad pol¨ªtica y econ¨®mica: Todos estos fen¨®menos han entorpecido la lucha mundial contra la tuberculosis en los ¨²ltimos dos a?os y ahora los nuevos datos confirman que el impacto ha sido grave: Por primera vez en dos d¨¦cadas, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) ha informado de un aumento del n¨²mero de personas que contraen esta enfermedad infecciosa y su variedad resistente a los medicamentos, y tambi¨¦n de un incremento de las muertes relacionadas con la misma. Se estima que hubo 10,6 millones de nuevos pacientes en 2021, un 4,5% m¨¢s con respecto a 2020, seg¨²n los datos recogidos en su ¨²ltimo informe anual al respecto, presentado este jueves.

Los resultados del descalabro a la hora de acceder a servicios de prevenci¨®n, diagn¨®stico y tratamiento se dejaron ver el a?o pasado, cuando la OMS ya alert¨® de que el n¨²mero de fallecidos no hab¨ªa bajado por primera vez en diez a?os por efecto de la covid-19. Ahora, la tendencia se reafirma: no solo siguen subiendo las muertes, sino tambi¨¦n el n¨²mero de enfermos. ¡°Desde el a?o 2000 la incidencia ha disminuido aproximadamente un 2% al a?o. Pero este 2021, por primera vez, hemos visto un aumento del 3,6% en nuevas infecciones y de un 3% en el caso de la tuberculosis resistente¡± ha declarado en rueda de prensa la doctora Tereza Kasaeva, directora del Programa Mundial de la OMS contra la Tuberculosis. La experta ha recordado que las defunciones tambi¨¦n van al alza desde el a?o pasado, pues en 2021 ha costado la vida a 1,6 millones de personas, y ha calificado estas tendencias como ¡°muy preocupantes¡±, aunque no sorprendentes: ¡°Desde el principio de la pandemia avisamos de que si el acceso a los servicios esenciales no se proporcionaba lo antes posible, esto pod¨ªa ocurrir. Ha ocurrido, por desgracia, y la recuperaci¨®n no avanza lo suficientemente r¨¢pido¡±.

El informe se?ala el da?o que han infligido las interrupciones de estos servicios por la covid-19: un n¨²mero mucho menor de personas diagnosticadas y tratadas. Aunque en 2021 se ha producido una cierta recuperaci¨®n, esta sigue estando muy por debajo de los niveles prepand¨¦micos. Por ejemplo, el n¨²mero notificado de personas reci¨¦n diagnosticadas disminuy¨® de 7,1 millones en 2019 a 5,8 millones en 2020, y ahora se ha dado una subida parcial, con 6,4 millones en 2021. Las reducciones en el n¨²mero registrado de pacientes diagnosticados sugieren que ha crecido el n¨²mero de personas que se ha infectado y est¨¢ sin diagnosticar. Esto, a su vez, resulta en un mayor n¨²mero de muertes en primer lugar, en una mayor transmisi¨®n de la infecci¨®n en la comunidad a continuaci¨®n y, por ¨²ltimo, con cierto retraso, en un mayor n¨²mero de personas que desarrolla la enfermedad. El suministro del tratamiento preventivo tampoco se ha recuperado: en 2021 se proporcion¨® a 3,5 millones de beneficiarios, todav¨ªa ligeramente por debajo del nivel de 3,6 millones de 2019, pero un poco mejor que los 3,2 millones en 2020. Por otra parte, solo 161.746 personas o una de cada tres con tuberculosis resistente a la rifampicina ¡ªel f¨¢rmaco de primera l¨ªnea¡ª (161.746) pudieron iniciar el tratamiento.

Se estima que hubo 10,6 millones de nuevos pacientes en 2021, un 4,5% m¨¢s con respecto a 2020

La OMS ofrece cada a?o desde 1997 un extenso informe con datos de 215 pa¨ªses sobre las tendencias y la respuesta mundial a esta patolog¨ªa causada por una bacteria (Mycobacterium tuberculosis) que suele afectar a los pulmones y puede propagarse cuando un enfermo expulsa los bacilos al aire, por ejemplo, al toser. Ocho pa¨ªses representaron m¨¢s de dos tercios del total: India, Indonesia, China, Filipinas, Pakist¨¢n, Nigeria, Banglad¨¦s y la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo.

Si bien es prevenible y curable con un r¨¦gimen farmacol¨®gico de cuatro a seis meses, tambi¨¦n ha sido la infecci¨®n m¨¢s letal del mundo hasta que la covid-19 le arrebat¨® el primer puesto. Los esfuerzos de m¨²ltiples actores, desde gobiernos y poderosas instituciones internacionales hasta la ¨²ltima de las enfermeras del pueblo m¨¢s remoto del mundo, con su dinero y su trabajo, han contribuido a salvar 74 millones de vidas en lo que llevamos de siglo XXI en un intento de cumplir los objetivos de la Agenda 2030 y de la Estrategia End TB: reducir el n¨²mero de muertes en un 95% y la tasa de incidencia en un 90% entre 2015 y 2035.

Los esfuerzos de m¨²ltiples actores han contribuido a salvar 74 millones de vidas en lo que llevamos de siglo XXI

Pero el tiempo se agota y esta ambiciosa meta no se va a cumplir, ha lamentado Kasaeva: ¡°Los retrocesos en el progreso significan que los objetivos mundiales est¨¢n fuera de nuestro alcance; es necesaria una acci¨®n urgente para volver a encarrilar la respuesta¡±. A nivel mundial, la reducci¨®n del n¨²mero total de muertes entre 2015 y 2021 fue inferior al 6%, cuando ya se ten¨ªa que haber llegado a un 35% para poder cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Mientras, la reducci¨®n acumulada de la tasa de incidencia entre 2000 y 2021 fue del 10%, la mitad del 20% que se ha marcado, y aunque 26,3 millones de afectados fueron tratados entre 2018 y 2021, todav¨ªa se est¨¢ muy lejos de los 40 millones que se pretend¨ªa asistir.

La pandemia de covid-19 supuso un palo en la rueda para la lucha contra la tuberculosis, pero las razones de fondo para que una enfermedad como esta, que supone un coste humano y social enorme para los afectados, sus familias y sus comunidades, van m¨¢s all¨¢. Las crecientes tasas de pobreza, desigualdad, desnutrici¨®n y otras comorbilidades, as¨ª como la discriminaci¨®n y el estigma, son los principales impulsores de esta epidemia. Por ejemplo, de los 10,76 millones de personas que enfermaron el a?o pasado, se estima que 2,2 millones de casos son atribuibles a la desnutrici¨®n y otros 2,6 millones a otros factores de riesgo como la infecci¨®n por VIH, los trastornos por consumo de alcohol, el tabaquismo y la diabetes. ¡°Tenemos que invertir en la ampliaci¨®n de la protecci¨®n social y la cobertura sanitaria universal, en la lucha contra el estigma y la discriminaci¨®n, as¨ª como en el fortalecimiento del compromiso multisectorial y la responsabilidad¡±, ha solicitado la experta de la OMS.

Alarmante falta de financiaci¨®n

Desde la OMS insisten ¡ªpues no es la primera vez¡ª de que la respuesta a la tuberculosis se encuentra gravemente infrafinanciada: los fondos comprometidos para la prevenci¨®n, la atenci¨®n, la investigaci¨®n y el desarrollo de nuevas herramientas disminuyeron de los 6.000 millones de d¨®lares del 2019 prepand¨¦mico a 5.400 millones en 2021, lo que supone menos de la mitad del objetivo mundial de 13.000 millones de d¨®lares anuales para 2022. Al igual que en los diez a?os anteriores, la mayor parte de la financiaci¨®n utilizada en 2021, un 79%, ha procedido de fuentes nacionales. Para los pa¨ªses de ingresos bajos y medios, que son los que m¨¢s padecen este problema de salud p¨²blica, el apoyo de donantes internacionales sigue siendo crucial. En cuanto a estos, la principal fuente de apoyo es el Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria, y el Gobierno de Estados Unidos es el mayor donante bilateral para investigaci¨®n y desarrollo.

¡°Se necesitan al menos 1.100 millones [de d¨®lares] m¨¢s. Es una cantidad realmente peque?a¡±, ha reclamado Kasaeva, quien tambi¨¦n ha pedido aprovechar las ense?anzas extra¨ªdas de la investigaci¨®n para la covid-19 y catalizar las inversiones para acelerar el desarrollo de nuevas herramientas, especialmente vacunas, de las que hay actualmente 16 candidatas en distintas fases de ensayo cl¨ªnico. ¡°Creemos que es posible. La OMS va a convocar una cumbre de alto nivel sobre nuevas vacunas contra la tuberculosis a principios del a?o que viene, para poner de relieve estos problemas¡±, ha manifestado.

Las notas positivas

Como nota positiva, el informe destaca que los pa¨ªses est¨¢n aumentando la adopci¨®n de las nuevas herramientas y gu¨ªas recomendadas por la OMS, lo que se traduce en un acceso temprano a la prevenci¨®n y atenci¨®n de afectados y, por tanto, en mejores resultados. As¨ª, la proporci¨®n de personas diagnosticadas que se someten inicialmente a una prueba de diagn¨®stico r¨¢pido aument¨® del 33% al 78% en el ¨²ltimo a?o, y 109 pa¨ªses utilizan ahora el tratamiento oral, frente a los 92 del a?o pasado. Para la resistente, 92 pa¨ªses emplean ahora tratamientos m¨¢s cortos, frente a los 65 de 2020. Tambi¨¦n ha aumentado el acceso a reg¨ªmenes m¨¢s cortos para la medicaci¨®n preventiva.

Entre las desesperanzadoras p¨¢ginas de este ¨²ltimo informe de la OMS se encuentran tambi¨¦n dos casos de ¨¦xito. Por una parte, siete pa¨ªses muy end¨¦micos de ?frica subsahariana ¡ªEtiop¨ªa, Kenia, Lesoto, Namibia, Sud¨¢frica, la Rep¨²blica Unida de Tanzania y Mozambique¡ª han logrado una reducci¨®n del 22% de incidencia desde 2015, y supera as¨ª el hito previsto para el a?o 2020 de la estrategia mundial contra la enfermedad. Por otra parte, el tratamiento preventivo para las personas que viven con el VIH, y para quienes esta infecci¨®n es la principal causa de muerte, ha superado con creces el objetivo mundial de seis millones en el periodo 2018-2022, alcanzando m¨¢s de 10 millones en solo cuatro a?os. ¡°Si la pandemia nos ha ense?ado algo, es que con solidaridad, determinaci¨®n, innovaci¨®n y el uso equitativo de las herramientas, podemos superar graves amenazas sanitarias. Apliquemos esas lecciones a la tuberculosis. Ha llegado el momento de poner fin a esta larga causa de muerte. Trabajando juntos, podemos acabar con ella¡±, ha difundido en una nota de prensa el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

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