Los esfuerzos de las peque?as ciudades contra el cambio clim¨¢tico
El Pacto de las Alcald¨ªas para el Clima y la Energ¨ªa presenta los logros de las ciudades para alcanzar la neutralidad clim¨¢tica. Aunque los promotores est¨¢n muy implicados, ?ayudar¨¢n estos v¨ªnculos entre municipios a mitigar el calentamiento del planeta?
Ante la necesidad de adoptar medidas audaces y trabajar junto con otros pa¨ªses para compartir soluciones innovadoras para mitigar el cambio clim¨¢tico, surgi¨® la iniciativa de crear una alianza global desde la cual compartir conocimientos, aprender e intercambiar saberes entre distintos gobiernos locales del mundo.
Es as¨ª c¨®mo naci¨® en 2008 en Europa el Pacto de las Alcad¨ªas, con el prop¨®sito de agrupar el mayor n¨²mero de administraciones comprometidas en alcanzar y superar los objetivos de la Uni¨®n Europea en materia de clima y energ¨ªa. De hecho, este grupo pretende establecer nuevos retos medioambientales alineados con los de la UE y sus estados miembros y, a la vez, implicar a la ciudadan¨ªa, la empresa privada y a la gobernanza municipal. Hoy son m¨¢s de 7.000 autoridades involucradas de 57 pa¨ªses, predominantemente de Europa.
Como cada a?o, se ha presentado el informe de los coordinadores y el de los promotores. Este se?ala que en 2021 se marc¨® un hito, puesto que todas las ciudades pertenecientes han trabajado e intensificado su labor para lograr una visi¨®n conjunta de neutralidad clim¨¢tica para 2050. Tanto la visi¨®n como los compromisos pueden verse en este documento. En cierto modo, todas las metas marcadas persiguen construir una Europa que reduzca a cero las emisiones de gases de efecto invernadero como el di¨®xido de carbono y el metano. Esta transici¨®n es fundamental si se quiere limitar el calentamiento global muy por debajo de los 2 ¡ãC y evitar consecuencias catastr¨®ficas.
Entre las distintas acciones llevadas a cabo el a?o pasado destacan las de cinco municipios espa?oles: Ba?os de la Encina, Cambil, Fuerte del Rey y Martos, todos ellos en Ja¨¦n, y Zas en A Coru?a. Este ¨²ltimo tambi¨¦n se ha comprometido en acabar con la pobreza energ¨¦tica. A estos lugares se les reconoci¨® la val¨ªa de proyectos espec¨ªficos relacionados con la promoci¨®n del reciclaje y el compostaje, la reforestaci¨®n de especies, la recuperaci¨®n de bosques, la creaci¨®n de brigadas forestales, la mejora integral de la eficiencia energ¨¦tica del alumbrado p¨²blico, as¨ª como la promoci¨®n del verde en los n¨²cleos urbanos. Tambi¨¦n resaltaron otros relacionados con la peatonalizaci¨®n de centros urbanos (Lebrija, Santander), instalaciones para aumentar el ahorro (Elche, Alicante), ejemplos de eficiencia energ¨¦tica (Manresa, Catalu?a) y las ampliaciones de recogida puerta a puerta de residuos y material reciclable (Lli?¨¤ de Vall, Catalu?a).
De manera gradual, cada vez son m¨¢s las localidades que se suman. A modo de ejemplo, en 2019 la comunidad de Navarra ten¨ªa apenas 50 inscritos y, a d¨ªa de hoy, ya son m¨¢s de 150. En este caso, la regi¨®n organiza talleres y grupos de trabajo para impulsar la elaboraci¨®n de distintos planes de acci¨®n de car¨¢cter local junto con la iniciativa Life Nadapta.
De manera gradual, cada vez son m¨¢s las localidades que se suman a proyectos y planes de acci¨®n contra el cambio clim¨¢tico
Otro ejemplo exitoso es el de M¨¢laga que, desde 2016, ejerce sus funciones como coordinadora territorial y organiza sesiones informativas para dar a conocer a la ciudadan¨ªa la situaci¨®n actual de los Planes de Acci¨®n firmados por las localidades de la provincia, as¨ª como para poner en valor los Planes de Acci¨®n para el Clima y la Energ¨ªa Sostenible (PACES). En 2018, por ejemplo, se llev¨® a cabo la plantaci¨®n de ¨¢rboles en los municipios menores de 20.000 habitantes. Hoy son m¨¢s de 340.944 ejemplares echando ra¨ªces en toda la regi¨®n.
De la teor¨ªa a la pr¨¢ctica
El texto, publicado en octubre de 2021, pone en relieve que, a pesar de que se est¨¢ avanzando de manera positiva en la adopci¨®n de medidas para la mitigaci¨®n (especialmente en edificaci¨®n y transporte) del cambio clim¨¢tico, la adaptaci¨®n de las mismas no est¨¢ siendo satisfactoria. Entre las amenazas destacan las inundaciones, el aumento del nivel del mar, el calor extremo, las sequ¨ªas y los incendios.
Este Pacto de las Alcald¨ªas subraya la percepci¨®n existente por parte de las autoridades acerca de las nuevas ambiciones ambientales. Tal y como muestran los porcentajes, un 8% de los firmantes considera que es un objetivo demasiado ambicioso para las administraciones locales; un 28% afirma que est¨¢ alineado con la meta, comprometi¨¦ndose a cumplirlo, mientras que un 50% asegura que hay mucho camino por recorrer, planteando que hay mucho trabajo por hacer para llegar a un 40% de las emisiones en 2030. Es decir, la mitad de las partes signatarias ven el reto muy lejano.
A pesar de que se est¨¢ avanzando en la adopci¨®n de medidas para la mitigaci¨®n del cambio clim¨¢tico, la adaptaci¨®n de las mismas no est¨¢ siendo satisfactoria
Entonces, ?ayudar¨¢n estos pactos y asociaciones a mitigar el calentamiento global? Solo con leer estas cifras, surge la reflexi¨®n de la dif¨ªcil labor de proporcionar de manera unitaria una base s¨®lida sobre la que los responsables pol¨ªticos, la empresa y la sociedad puedan tomar decisiones sobre la mejor v¨ªa para acabar con la dependencia de los combustibles f¨®siles y construir un futuro m¨¢s ecol¨®gico, limpio y equitativo. No exclusivamente para Europa, puesto que el clima no entiende de divisiones, estados ni regiones. Pero es inevitable recordar la reciente Cumbre del Clima (COP26) celebrada en Glasgow en 2021, altamente criticada por muchos sectores porque, a pesar de tener el reconocimiento de los casi 200 pa¨ªses que participan en las negociaciones de la ONU, los esfuerzos que est¨¢n previstos no son suficientes.
Los argumentos que tienen m¨¢s probabilidades de atraer a los responsables en la toma de decisiones e involucrarlos en las acciones de planificaci¨®n clim¨¢tica y energ¨¦ticas son la disponibilidad de fondos de la Uni¨®n Europea para los municipios, la obtenci¨®n de visibilidad pol¨ªtica a m¨²ltiples escalas (regional, nacional), la oportunidad de ahorrar energ¨ªa, y la reducci¨®n de costos relacionados con la misma. Y, sin duda, el intercambio de conocimiento de los casos de buenas pr¨¢cticas en referencia al liderazgo son una herramienta esencial de aprendizaje y una de las materias clave para promover los objetivos deseados a largo plazo.
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