El vicepresidente del Constitucional: "Me he sentido en un tribunal secuestrado"

Las cartas de renuncia de los tres magistrados del Constitucional, a las que ha tenido acceso EL PA?S, exponen motivos diversos, pero en las tres queda reflejada de forma expresa y contundente su opini¨®n de que no renovar a los magistrados del alto tribunal es una flagrante vulneraci¨®n de la Constituci¨®n. El vicepresidente, Eugeni Gay, dice en su carta de renuncia a Pascual Sala, presidente del alto tribunal, que la no renovaci¨®n le ha hecho tener "la sensaci¨®n de formar parte de un tribunal secuestrado".

En la de Eugeni Gay explica que los temas de los que trata el Constitucional exigen "el estricto y escrupuloso cumplimiento del respeto al principio del juez predeterminado por la ley, en este caso por la propia Constituci¨®n". El vicepresidente explica c¨®mo ya hab¨ªa hecho gestiones con la anterior presidenta del Constitucional, Mar¨ªa Emilia Casas, para que se diera curso al mandato constitucional de renovar a los magistrados.

"T¨² sabes cu¨¢ntas veces, de manera infructuosa, insist¨ª durante la presidencia de Mar¨ªa Emilia en la necesidad de dirigirnos al presidente del Senado y a los responsables de los partidos pol¨ªticos mayoritarios en las personas de sus secretarios generales para que dieran cumplimiento al mandato constitucional", escribe.

"La situaci¨®n en la que nos encontr¨¢bamos y los temas sobre los que deb¨ªamos deliberar y fallar exig¨ªan el estricto y escrupuloso cumplimiento del respeto al principio del juez predeterminado por la ley, en este caso por la propia Constituci¨®n. Lamentablemente no lleg¨® a hacerse, por lo que en numerosas ocasiones me o¨ªsteis decir que ten¨ªa la sensaci¨®n de formar parte de un Tribunal secuestrado".

Gay acusa al Senado de "manifiesto incumplimiento de su ineludible obligaci¨®n" de acometer la renovaci¨®n y considera su recambio como imprescindible para cumplir la Constituci¨®n desde el ¨®rgano que debe velar por su m¨¢s estricto cumplimiento. No obstante, el juez considera que esta situaci¨®n de no renovaci¨®n no resta legitimidad a las decisiones que de momento han adoptado, pese a haber caducado su mandato. Se refiere expresamente a la sentencia sobre el Estatuto de Catalu?a.

Delgado, por su lado, en una escuet¨ªsima misiva a Sala, concluye con una severa frase sobre el incumplimiento de la ley fundamental: "Y una vez m¨¢s he de destacar que las cosas salen mejor cuando se cumple la Constituci¨®n y salen peor cuando no se cumple".

En un tono diferente, Elisa P¨¦rez Vera expone que dimite "por motivos institucionales", es decir, la no renovaci¨®n, cuya no ejecuci¨®n, a su entender, desvirt¨²a la voluntad del poder constituyente cuando se incumplen los plazos de renovaci¨®n de sus miembros. La magistrada arguye otros motivos personales en los que, dice, "no procede entrar".

"Ahora, habi¨¦ndose sobrepasado en m¨¢s de seis meses la expiraci¨®n de aquel nombramiento", dice la magistrada, "sin que se haya producido el nombramiento ni, por tanto, la toma de posesi¨®n de quien ha de sucederme, me veo en la obligaci¨®n de de presentarle mi renuncia con el ruego de que, como presidente de este Tribunal, acuerde su aceptaci¨®n".