Los cinco de Bateragune

Arnaldo Otegi y Rafael Diez Usabiaga son dos de los principales ide¨®logos de la izquierda abertzale. De la misma generaci¨®n, comparten similares convicciones con Miren Zabaleta, Arkaitz Rodr¨ªguez y Sonia Jacinto. Todos han sido condenados por pertenencia a banda armada acusados de refundar Batasuna bajo las ¨®rdenes de ETA.

Otegi, el pol¨ªtico con pasado militar

Arnaldo Otegi (Elgoibar, Gipuzkoa, 1958) es la cara pol¨ªtica de la izquierda abertzale y hay quien le considera su Jerry Adams. Sin embargo, no salt¨® a la palestra p¨²blica hasta 1995, cuando sustituy¨® en el Parlamento vasco a una compa?era de Herri Batasuna. Antes estuvo vinculado con ETA militar y fue condenado a seis a?os de c¨¢rcel por su implicaci¨®n en el secuestro del empresario Luis Abaitua. En 1990 sali¨® de prisi¨®n, tras cumplir la mitad de la pena. Otegi, licenciado en filosof¨ªa y forofo de la Real Sociedad, equipo del que es socio, ha adquirido un peso considerable en el seno de la izquierda abertzale tras la condena en 1997 de los miembros de la Mesa Nacional de HB. Casado y padre de dos hijos, Otegi ha sobrevivido a la disoluci¨®n de Batasuna. Se atribuye ser el impulsor del di¨¢logo y del deslinde de la izquierda abertzale de las tesis violentas de ETA, algo que ha defendido en el juicio por el caso Bateragune.

En mayo de 2005 ingres¨® en prisi¨®n preventiva acusado de pertenencia a banda armada y abandon¨® la c¨¢rcel tras pagar una fianza de 40.000 euros. Ese mismo a?o el Tribunal Supremo lo conden¨® por injurias a la Corona. En marzo de 2006 regres¨® a la c¨¢rcel acusado de inducir a actos violentos durante una huelga en el Pa¨ªs Vasco. De nuevo, abandon¨® la prisi¨®n tras abonar 250.000 euros de fianza. En 2007 entr¨® otra vez entre rejas, una vez que el Supremo confirmara la condena de 2006 de la Audiencia que le condenaba por enaltecimiento del terrorismo. Tras quedar libre en 2008, el 13 de octubre de 2009 volvi¨® a prisi¨®n por ¨²ltima vez acusado de refundar Batasuna, causa por la que ha sido condenado a 10 a?os de prisi¨®n. Tiene pendiente otro juicio por la financiaci¨®n ilegal de Batasuna a trav¨¦s de las herriko tabernas por el que el fiscal pide 12 a?os de c¨¢rcel.

Usabiaga, m¨¢s que un sindicalista

A pesar de que a Rafael Diez Usabiaga (Lasarte, Gip¨²zkoa, 1956) pueda ser conocido m¨¢s por su faceta sindicalista, por haber ocupado la secretar¨ªa general de LAB desde 1996 hasta 2008, lo cierto es que es uno de los l¨ªderes incontestables de la izquierda abertzale. La relevancia pol¨ªtica de este inform¨¢tico, hijo de guardia civil, se puso de manifiesto en 1988 durante las Conversaciones de Argel, el primer intento de di¨¢logo entre el Gobierno y ETA. Entonces particip¨® como intermediario entre el Ejecutivo y la banda terrorista. Se le considera uno de los ide¨®logos, junto con Otegi, con el que comparte casi todo su ideario pol¨ªtico, del pacto de Lizarra de 1998, en el que los partidos nacionalistas y organizaciones sociales acordaron abordar el "problema pol¨ªtico" de Euskadi a trav¨¦s de un proceso de di¨¢logo y negociaci¨®n abierto. Usabiaga tambi¨¦n impuls¨® las conversaciones previas al alto el fuego de ETA de 2006, que finaliz¨® con el atentado de la T-4 en Barajas. Entonces, el exdirigente sindicalista manifest¨®: "No se puede desarrollar ning¨²n proyecto pol¨ªtico desde la violencia". Sin embargo, nunca se ha desvinculado ni ha condenado expresamente la violencia de la banda terrorista.

Hasta su condena por el caso Bateragune, causa por la que ingres¨® en prisi¨®n el 13 de octubre de 2009, Usabiaga ha salido indemne de las causas judiciales en las que se ha visto envuelto. En 2005, la polic¨ªa lo detuvo tras interceptar varias conversaciones telef¨®nicas con miembros de Batasuna, lo que hizo sospechar una posible relaci¨®n entre LAB y ETA. Sin embrago, el juez Fernando Grande-Marlaska acord¨® su libertad bajo fianza al no hallar indicios suficientes de su pertenencia a la banda terrorista. En la actualidad se encuentra en esa misma situaci¨®n. El juez Baltasar Garz¨®n la decret¨® el 26 de abril de 2010 para que pudiera cuidar de su madre.

Miren Zabaleta, la hija d¨ªscola

Cuando Miren Zabaleta (Pamplona, 1981) fue detenida el 13 de octubre de 2008 por su pertenencia a Bateragune (fue la ¨²nica que no fue capturada en la sede de LAB, sino cuando viajaba en coche), muchos se sorprendieron, ya que se trataba de la hija de Patxi Zabaleta, fundador de Aralar y contrario a las tesis de Batasuna. Sin embargo, por esas fechas la letrada, que ingres¨® en el Colegio de Abogados de Navarra el 28 de mayo de 2007, apenas llevaba un mes en libertad bajo fianza. El 8 de septiembre de ese a?o, el juez Fernando Andreu acord¨® su salida de prisi¨®n pero mantuvo la imputaci¨®n por un delito de colaboraci¨®n con banda armada por su presunta relaci¨®n con el portal Gaztesarea, vinculado a la ilegalizada Segi. En la citada web se detect¨® que se organizaban sorteos y rifas entre los simpatizantes de ETA para financiar a la banda.

Esa tampoco era la primera vez que a Zabaleta se la relacionaba con el entorno de la banda terrorista. En febrero de 2008 se registr¨® una casa propiedad de su padre en la que ella hab¨ªa convivido junto a Mikel Garaiondo, miembro de Ekin y detenido por la polic¨ªa. El v¨ªnculo entre Zabaleta, Sonia Jacinto y Arkaitz Rodr¨ªguez con Arnaldo Otegi y Rafa Diez Usabiaga es muy fuerte. Los cinco remitieron una carta a Egin el 8 de noviembre en la que defend¨ªan una salida del conflicto, abordando "iniciativas globales y sectoriales que resquebrajen el actual bloqueo de la situaci¨®n pol¨ªtica en Euskadi y abran las puertas a otra fase pol¨ªtica". Tras su detenci¨®n por el caso Bateragune, muchos llegaron a considerarla como la nueva n¨²mero dos de Batasuna. No en vano Otegi, en una de las cartas que suele escribir desde la c¨¢rcel, hac¨ªa referencia expresa a Ant¨®n, Rodr¨ªguez y a la hija de l¨ªder de Aralar. Durante el juicio se comprob¨® la influencia que el exportavoz de Batasuna ejerce sobre Zabaleta, quien reconoci¨®: "Arnaldo me hizo ver la luz". Ese d¨ªa, su padre, que hasta entonces hab¨ªa acudido a todas las sesiones del proceso, no estaba presente. Cuando detuvieron a su hija, pese a que conden¨® el hecho, se apresur¨® a recalcar que Batasuna estaba haciendo su "propio recorrido pol¨ªtico personal" y que ten¨ªa "sus propias convicciones pol¨ªticas".

Rodr¨ªguez, cachorro de Segi

El pasado de Arkaitz Rodr¨ªguez (Donostia, 1979) podr¨ªa ilustrar la intenci¨®n de reconducir al sector m¨¢s irredento de la izquierda abertzale hacia caminos no violentos. Rodr¨ªguez, vinculado a Haika, organizaci¨®n juvenil ilegalizada, y exl¨ªder de Segi, una de las ramificaciones abertzales m¨¢s radicales, fue juzgado y absuelto en 2006 por su pertenencia a los aparatos de captaci¨®n e informaci¨®n de ETA. La banda terrorista lo reclut¨® para servir de correa de transmisi¨®n entre sus consignas y las de la izquierda abertzale, sin embargo fue Otegi quien logr¨® acercarlo hacia posturas menos dr¨¢sticas. Prueba de ello es la citada carta que ambos, junto al resto de condenados por el caso Bateragune, remitieron al diario Egin el 8 de noviembre de 2008.

Jacinto, la tesorera

Sonia Jacinto (San Sebasti¨¢n, 1977), extesorera y exapoderada del Partido Comunista de las Tierras Vascas, sabe lo que es formar parte de un proceso medi¨¢tico. En febrero de 2008 fue detenida por orden del juez Baltasar Garz¨®n, junto a otras13 personas, todas miembros de la Mesa Nacional de Batasuna -entre ellos los exdirigentes abertzales, Pernando Barrena y Juan Jos¨¦ Petrikorena-. Fue acusada por integraci¨®n y colaboraci¨®n con organizaci¨®n terrorista y asociaci¨®n il¨ªcita. Finalmente, Garz¨®n la dej¨® en libertad bajo fianza de 50.000 euros. En octubre de 2009 ingres¨® en prisi¨®n por el caso Bateragune. En agosto de 2010 el fiscal Vicente Gonz¨¢lez Mota, el mismo que ha representado al ministerio p¨²blico en el proceso por la refundaci¨®n de Batasuna, pidi¨® diez a?os de c¨¢rcel para ella por integraci¨®n de ETA, en relaci¨®n con la detenci¨®n de la c¨²pula de la formaci¨®n abertzale en febrero de 2008.