Zanahorias y palos para el fin de ETA
El acoso policial y judicial se ha mezclado en la ¨²ltima d¨¦cada con los gestos de acercamiento del Gobierno a la banda. Nada tuvo ¨¦xito durante a?os hasta que los etarras se vieron acorralados
En el caso de que este sea, de verdad, el final de ETA, ?qu¨¦ es lo que ha acabado con ella? ?La mano dura o la blanda? ?La acci¨®n policial y judicial o el di¨¢logo? ?La banda echa la persiana porque ha sido acorralada, frita a detenciones, o porque su fatal actitud en los ¡°procesos de paz¡± la alej¨® definitivamente de su menguante base social? En la ¨²ltima d¨¦cada, la de su declive, ambas v¨ªas, la de acoso y la de acercamiento por parte del Gobierno, se han cruzado. Todo se ha intentado. Ahora es el momento de las interpretaciones.
? La ley de Partidos. Se ven¨ªa del fracasado di¨¢logo de 1999. El presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar se hab¨ªa avenido a llamar a ETA ¡°Movimiento Vasco de Liberaci¨®n¡±, los enviados de su Gobierno se hab¨ªan sentado a una mesa con los etarras manifestando que no habr¨ªa ¡°ni vencedores ni vencidos¡±, 133 presos hab¨ªan sido acercados a c¨¢rceles pr¨®ximas a Euskadi antes y durante la tregua... pero nada hab¨ªa sido suficiente. La banda hab¨ªa roto las conversaciones al constatar que no se le iban a hacer concesiones pol¨ªticas. As¨ª que la siguiente d¨¦cada empez¨® con un giro de tuerca dirigido a una de las l¨ªneas de flotaci¨®n de los terroristas: su brazo pol¨ªtico. El Congreso de los Diputados aprob¨® el 27 de junio de 2002 la nueva Ley de Partidos, dise?ada por el Gobierno del PP y apoyada por PSOE, CiU, Coalici¨®n Canaria y el Partido Andalucista.
El art¨ªculo 9.2 autoriza a ilegalizar un partido ¡°cuando su actividad vulnere los principios democr¨¢ticos, particularmente cuando con la misma persiga deteriorar o destruir el r¨¦gimen de libertades o imposibilitar o eliminar el sistema democr¨¢tico¡±. Dos meses despu¨¦s, ampar¨¢ndose en ella, el juez Baltasar Garz¨®n orden¨® la suspensi¨®n de las actividades de Batasuna y el cierre de sus sedes.
? Ilegalizaci¨®n de Batasuna. El Tribunal Supremo ilegaliz¨® Batasuna, por unanimidad y a instancias del Ejecutivo, en marzo de 2003. Los jueces consideraron probado que la creaci¨®n del partido, se llamase HB, EH o Batasuna, respond¨ªa a un ¡°¨²nico designio¡±, el de ETA. Su decisi¨®n, tachada de ¡°grave atropello¡± por el PNV, ser¨ªa confirmada por el Constitucional en 2004 y por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en 2009.
? Endurecimiento del C¨®digo Penal. En 2003 el C¨®digo Penal espa?ol se convirti¨® en uno de los m¨¢s duros de Europa: PP y PSOE pactaron una reforma que elevaba a 40 a?os la pena m¨¢xima por los delitos m¨¢s graves de terrorismo y restring¨ªa tambi¨¦n el acceso al tercer grado y la libertad condicional. Ya en 1995, con Gobierno del PSOE, se hab¨ªa eliminado la redenci¨®n de penas por trabajo y as¨ª, de hecho, se hab¨ªa establecido el cumplimiento ¨ªntegro de la pena. Pero la reforma de 2003 fue la puntilla: los etarras condenados a partir de esa fecha por delitos de sangre ¡ªsi no se decide ahora otra cosa¡ª tienen la perspectiva de pasar pr¨¢cticamente toda su vida en prisi¨®n: les pueden condenar hasta a 40 a?os y solo cumpliendo estrictos requisitos pueden acceder al tercer grado.
? Doctrina Parot. Ninguna de esas reformas afectaba a algunos de los etarras m¨¢s sanguinarios, detenidos y condenados con el C¨®digo Penal anterior ¡ªel de 1973¡ª por atentados cometidos en los a?os setenta, ochenta y noventa. Por eso, a principios de esta d¨¦cada a muchos de ellos les tocaba salir de prisi¨®n, habiendo cumplido unas penas rid¨ªculas ¡ªpor aplicaci¨®n de redenciones y beneficios penitenciarios¡ª en comparaci¨®n con las condenas recibidas. A esa situaci¨®n intent¨® poner freno el Tribunal Supremo el 28 de febrero de 2006: en respuesta a un recurso presentado por Henri Parot, el Supremo resolvi¨® que la redenci¨®n de penas debe aplicarse respecto de cada una de ellas individualmente, y no sobre el m¨¢ximo legal permitido de permanencia en prisi¨®n (de modo que, de facto, la redenci¨®n se anula). La llamada desde entonces doctrina Parot mantiene en prisi¨®n a 41 presos de ETA ¡ªy a otra veintena de recursos no etarras¡ª, que vieron multiplicada de pronto su condena efectiva. Muchos de ellos la han recurrido en amparo ante el Constitucional.
? El ¡®caso De Juana¡¯. Jos¨¦ Ignacio de Juana Chaos, uno de los mayores criminales de ETA, hab¨ªa sido detenido en 1987 y condenado a 3.000 a?os de prisi¨®n por 25 asesinatos. Acogi¨¦ndose a todas las redenciones del C¨®digo Penal antiguo, le tocaba salir en febrero de 2005, habiendo cumplido solo 18 a?os. Para evitarlo, la Audiencia Nacional le imput¨® un nuevo delito de amenazas terroristas por dos art¨ªculos publicados en el diario Gara, por el que fue condenado a 12 a?os m¨¢s (reducidos luego a tres a?os). En agosto de 2006 inici¨® una huelga de hambre; la interrumpi¨®, la retom¨® de nuevo. Llevaba 115 d¨ªas sin comer cuando el Gobierno decidi¨® concederle, en marzo de 2007, en medio de una gran tensi¨®n pol¨ªtica y social, la prisi¨®n atenuada (libertad bajo vigilancia policial en su domicilio).
El PP acus¨® a Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero de ceder al chantaje de un terrorista para seguir negociando con ETA. El entonces ministro del Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, dijo en el Congreso: ¡°Es verdad que De Juana plante¨® un desaf¨ªo: ¡®O libre o muerto¡±. Y a?adi¨®: ¡°La decisi¨®n que hemos tomado es una decisi¨®n que evita muertes¡±. En plural. De Juana, encausado despu¨¦s por presunta apolog¨ªa del terrorismo, huy¨® en 2008.
? El di¨¢logo de 2006: la paz... y la pol¨ªtica. ¡°Con ETA no se hablar¨¢ de pol¨ªtica: primero la paz, despu¨¦s la pol¨ªtica¡±, afirm¨® con solemnidad el presidente Zapatero en abril de 2006, tras anunciar que, una vez comprobada la veracidad de la tregua, abrir¨ªa un proceso de di¨¢logo con ETA. El Gobierno no acerc¨® presos a las c¨¢rceles vascas ¡ªcomo s¨ª hizo el PP en 1999¡ª ni paraliz¨® las detenciones de etarras. Pero en el llamado ¡°proceso de paz¡±, sostenido por el Ejecutivo a pesar a las cr¨ªticas continuas del PP y las manifestaciones en la calle de la Asociaci¨®n de V¨ªctimas del Terrorismo, se acab¨® hablando de pol¨ªtica. La constituci¨®n en Loyola (Navarra) de dos mesas paralelas, una para hablar con la direcci¨®n de ETA y otra para tratar asuntos pol¨ªticos con Batasuna, constituy¨® el ¨²ltimo intento de salvar el proceso, pero traicion¨® el compromiso original del presidente. De pol¨ªtica se habl¨®, aunque finalmente no hubo concesiones. ETA y Batasuna se levantaron de la mesa cuando entendieron que ni se reconocer¨ªa el derecho de autodeterminaci¨®n ni se dictaminar¨ªa la uni¨®n de Euskadi y Navarra.
La banda acab¨® con la tregua el 30 de diciembre de 2006 colocando una bomba en Barajas que mat¨® a dos hombres. Las negociaciones, sin embargo, no terminaron: siguieron, de forma secreta, en los primeros meses de 2007. Cuando, de nuevo frustrada por la falta de acuerdo, ETA puso fin oficial a la tregua, a la decepci¨®n del Gobierno se uni¨® la de una parte del entorno de la banda: el sector menos duro de Batasuna, cansado de la ilegalidad.
? La ofensiva policial. Desde el a?o 2000 han sido detenidos 1.393 etarras (aunque en prisi¨®n hay 703, porque muchas detenciones no acaban en juicio ni condena, y otros van saliendo). La banda terrorista ha sido descabezada en varias ocasiones y cada vez con menos tiempo para recomponerse. La presi¨®n ha ido a m¨¢s. Entre mayo de 2008 y mayo de 2010 ¡ªtras el fracaso de la tregua y el proceso de di¨¢logo¡ª, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado asestaron cuatro golpes estrat¨¦gicos a la direcci¨®n de ETA, con la detenci¨®n de cuatro jefes que se hab¨ªan ido pasando, como un relevo, las riendas de la banda. En mayo de 2008, la polic¨ªa detuvo a Javier L¨®pez Pe?a, Thierry. Solo seis meses despu¨¦s cay¨® uno de los terroristas m¨¢s buscados, que se hab¨ªa puesto al frente de ETA, Garikoitz Aspiazu, Txeroki. Y en abril de 2009 fue capturado Jurdan Martitegi. El a?o pasado le lleg¨® el turno al jefe Mikel Kabikoitz, Ata. Desde entonces, la banda terrorista se ha movido con muchas dificultades, asfixiada econ¨®micamente y con apenas 50 o 60 miembros en activo, seg¨²n fuentes policiales.
? ANV s¨ª, ANV no: el frente electoral y la ¡®soluci¨®n Bildu¡¯. Desde el minuto uno de su ilegalizaci¨®n, Batasuna puso en marcha la estrategia de montar, impulsar o infiltrarse en listas blancas para poder seguir present¨¢ndose a las elecciones: AuB, Herritarren Zerrenda, Aukera Guztiak... Todas fueron anuladas por los tribunales. En las auton¨®micas de 2005 lleg¨® el Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV), que consigui¨® colarse (fue ilegalizado a posteriori, en 2008). Y en las municipales de 2007 apareci¨® Acci¨®n Nacionalista Vasca (ANV). Ah¨ª se produjo un punto de inflexi¨®n: el Supremo anul¨® solo la mitad de sus listas, porque el Gobierno ¡ªque en ese momento manten¨ªa los contactos con ETA, seg¨²n se supo luego¡ª solo hab¨ªa impugnado la mitad. ANV fue ilegalizada en septiembre de 2008, pero sus alcaldes y concejales ya ten¨ªan el esca?o en propiedad.
La soluci¨®n definitiva, para Batasuna, se llam¨® Bildu. Una coalici¨®n de ¡°independientes¡± abertzales con dos partidos legales (EA y Alternatiba) que no pas¨® el filtro del Supremo pero s¨ª, por la m¨ªnima, el del Constitucional. Con esa f¨®rmula concurri¨® a las municipales de este a?o y logr¨® el mayor poder atesorado en su historia. La presi¨®n de Batasuna sobre ETA para que deje las armas se hizo entonces, de pronto, visible.
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