La divisi¨®n diluye el D¨ªa de Euskadi

Euskadi disfruta hoy de su d¨ªa, una fiesta que es oficial por primera vez, pero que no se celebra con el consenso de los partidos. M¨¢s bien al contrario. La unidad que las grandes fuerzas han evidenciado en la lucha contra el terrorismo y el entendimiento al que aboca el nuevo escenario pol¨ªtico derivado del cese definitivo de ETA no han podido evitar la diferencia de criterio que las principales siglas mantienen sobre el Estatuto vasco, cuyo aniversario se cumple hoy y justifica que el 25 de octubre est¨¦ marcado en rojo en el caleNdario. La divisi¨®n diluir¨¢, en consecuencia, una conmemoraci¨®n en la que Bildu ni siquiera tomar¨¢ parte.

Tras dos a?os en los que la celebraci¨®n de la efem¨¦ride se hab¨ªa reducido a un acto institucional, debido a que el calendario festivo estaba ya establecido de antemano, el Gobierno socialista ha conseguido trasladar al fin a la sociedad la importancia de una fecha que considera clave en la historia del Pa¨ªs Vasco. Pese a las ambiciones del nacionalismo y a reconocer que a¨²n no se ha completado la transferencia de las competencias en ¨¦l recogidas, el PSE ha protagonizado, desde su acceso al Ejecutivo, una enardecida defensa del Estatuto como el ¡°punto de uni¨®n entre los vascos¡±.

La celebraci¨®n del denominado D¨ªa de Euskadi fue uno de los s¨ªmbolos del cambio sobre el que quiso apoyarse el nuevo Gobierno vasco tras las pretensiones de un nuevo estatuto pol¨ªtico que abander¨® el anterior lehendakari Juan Jos¨¦ Ibarretxe. De hecho, la propuesta inicial parti¨® de su socio preferente, el PP, coincidente con los socialistas al defender el grado de autogobierno y autonom¨ªa que el actual marco ha propiciado y al reivindicar la unidad en torno a su defensa. La iniciativa, sin embargo, solo cuenta con el apoyo a?adido de UPyD, pese a las reiteradas llamadas a la unidad en esta materia.

Los dem¨¢s partidos seguir¨¢n su propio camino. El PNV se ha decantado por celebrar en la Casa de Juntas de Gernika un acto alternativo con el que marcar su propio discurso. Acostumbrados a denunciar el incumplimiento del Estatuto y tras facilitar su desarrollo durante la presente legislatura en el Congreso, los nacionalistas han vuelto a esgrimir el proyecto de un ¡°nuevo estatus pol¨ªtico¡± para Euskadi como reto. Una reivindicaci¨®n que plantean como gancho alternativo a las propuestas m¨¢s rupturistas de Bildu, coalici¨®n con la que se apresta a disputar la hegemon¨ªa entre el electorado nacionalista.

La distancia de posturas la agrandar¨¢ incluso Bildu, que ha renunciado a celebrar una fiesta que considera ajena y contra la que ni siquiera pudo votar en contra en el Parlamento, al carecer de representaci¨®n por la ilegalizaci¨®n de la izquierda abertzale. El diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, anunci¨® ayer que no acudir¨¢ a los actos de conmemoraci¨®n y que su Gobierno trabajar¨¢ hoy ¡°con normalidad¡±. Entre la coalici¨®n, la posici¨®n m¨¢s compleja la asumir¨¢ EA, que no festejar¨¢ el Estatuto, pero s¨ª asistir¨¢ al acto oficial en el que se entregar¨¢ la Cruz del ?rbol de Gernika al exlehendakari Carlos Garaikoetxea.