El Gobierno exige a La Rioja que atienda a los pacientes alaveses
¡°Hay una quiebra del acceso a la sanidad en igualdad efectiva¡±, seg¨²n el Ejecutivo El presidente riojano dice que no obedecer¨¢ al ministerio Sin embargo, est¨¢ previsto alcanzar un acuerdo el lunes y levantar el veto
La Rioja deber¨¢ volver a prestar asistencia sanitaria especializada a los pacientes de las poblaciones lim¨ªtrofes de ?lava. El Ministerio de Sanidad intervino ayer en el conflicto abierto entre las dos comunidades, que en los dos ¨²ltimos d¨ªas ha visto c¨®mo crec¨ªa la presi¨®n sobre el Ejecutivo riojano. Sanidad envi¨® un requerimiento en el que exige a La Rioja dejar sin efecto las instrucciones dadas a principios de septiembre a sus centros sanitarios para que no concedieran visitas al especialista a pacientes nuevos de poblaciones alavesas como Laguardia, Labastida u Oy¨®n. La medida afecta potencialmente a unos 5.000 vecinos y, en estos tres meses, ya se han visto perjudicados al menos medio millar de personas.
¡°Es el acto administrativo m¨¢s elevado que podemos hacer¡±, indicaron ayer a este diario fuentes del Ministerio de Sanidad. La medida, conf¨ªan, bastar¨¢ para resolver el problema: ¡°Tienen que obedecer, se est¨¢n saltando la ley¡±. El presidente de La Rioja, Pedro Sanz, anunci¨® ayer por la tarde que no va a aceptar la solicitud, que a¨²n no ha sido recibida por su Gobierno. Si fuera as¨ª, y aunque existen pocos precedentes de este tipo de desobediencia, el Ministerio tendr¨ªa un mes de plazo para presentar un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de La Rioja.
En todo caso, el lunes est¨¢ prevista una reuni¨®n en Logro?o entre los consejeros de Sanidad de Euskadi y La Rioja en la que se espera que se firme un preacuerdo que sirva para volver a negociar. En ¨¦l, fuentes de la Sanidad vasca aseguran que se incluir¨¢ la garant¨ªa de los riojanos de que mientras dura la negociaci¨®n, la Rioja Alavesa pueda ser atendida en el hospital de Logro?o, como suced¨ªa hasta antes de septiembre.
El escrito, firmado por la ministra de Sanidad en funciones, Leire Paj¨ªn (PSOE), y dirigido al consejero de Salud y Servicios Sociales riojano, Jos¨¦ Ignacio Nieto (PP), recuerda que los 5.000 ciudadanos de La Rioja Alavesa a los que se les ha cortado la prestaci¨®n especializada ¡ªpueden seguir acudiendo a los servicios de urgencias y se mantienen las visitas de los pacientes antiguos¡ª ¡°tradicionalmente han sido asistidos en las instituciones p¨²blicas de Logro?o por las dificultades geogr¨¢ficas que para esta poblaci¨®n supone el acceso a los centros sanitarios de Vitoria¡±.
La demanda del Gobierno se apoya, fundamentalmente, en dos ideas. La primera consiste en que ha habido por parte de La Rioja ¡°una ruptura unilateral del pacto t¨¢cito consensuado¡± entre las dos comunidades aut¨®nomas afectadas, ya que los enfermos se encontraron con que sus citas con el especialista eran canceladas. Ello supone ¡°una vulneraci¨®n del principio de lealtad institucional que debe regir los actos y relaciones entre las Administraciones p¨²blicas¡±, que recoge la Ley 30/1992 de R¨¦gimen Jur¨ªdico de las Administraciones P¨²blicas y del Procedimiento Administrativo.
El segundo argumento plantea que, como consecuencia del comportamiento de las autoridades sanitarias riojanas, los pacientes vascos han sido v¨ªctimas de ¡°la quiebra del derecho de acceso a las prestaciones sanitarias en condiciones de igualdad efectiva¡±. Los habitantes de la Rioja Alavesa llevan tres meses acudiendo a Vitoria, a una hora de viaje, para una visita al especialista, mientras que en casos como Oy¨®n el Hospital San Pedro de Logro?o est¨¢ a escasos diez minutos. La lejan¨ªa, la avanzada edad de muchos de los pacientes y la esperanza de que el conflicto se solucione han hecho que el 25% de las personas a las que se les cancel¨® la cita en Logro?o hayan rechazado el traslado a Vitoria.
El ministerio ha optado por tomar cartas en el asunto el mismo d¨ªa en el que el lehendakari, Patxi L¨®pez, se?alaba que Sanidad pod¨ªa haber actuado ¡°con m¨¢s diligencia¡±. El requerimiento insiste en que las negociaciones ¡ªque hasta el momento han fracasado¡ª entre ambas autonom¨ªas destinadas a sustituir el pacto t¨¢cito por otro escrito sobre la asistencia a los pacientes alaveses ¡°con las eventuales contraprestaciones por parte del Pa¨ªs Vasco¡± exige ¡°un tiempo m¨ªnimo de estudio¡± por parte de esta comunidad. Por lo que conmina a La Rioja a volver a la situaci¨®n anterior mientras se llega a un pacto definitivo.
Est¨¢ previsto que el encuentro del lunes entre los gestores de la sanidad vasca y riojana sirva para para volver al punto de partida. La reuni¨®n es el resultado de los ¨²ltimos dos d¨ªas, en los que las presiones hacia el Gobierno riojano han ido aumentando, tanto desde el Gobierno vasco como desde su propio partido. El jueves fue el consejero vasco de Sanidad, Rafael Bengoa, el que avis¨® de que est¨¢ en juego la cohesi¨®n nacional y alert¨® de un posible ¡°efecto domin¨®¡± en otras comunidades colindantes (Cantabria, Navarra y Castilla y Le¨®n) que cuentan con pacientes que acuden a centros sanitarios vascos. Ayer era el lehendakari L¨®pez el que exig¨ªa a Mariano Rajoy que intercediera e incid¨ªa en que el PP tiene una ¡°buena oportunidad para dejar claro cu¨¢l es su modelo de Espa?a: un modelo gestionado por los gobiernos aut¨®nomos, pero solidario y cohesionado, o un pa¨ªs troceado por caciques locales¡±.
Unos 200.000 espa?oles residen en poblaciones fronterizas cuyos recursos sanitarios m¨¢s pr¨®ximos dependen de una administraci¨®n auton¨®mica distinta a la suya. En estos casos son frecuentes tanto los acuerdos bilaterales entre comunidades para compartir la asistencia de estos vecinos como las quejas por incumplimiento de estos convenios. M¨¢s a¨²n a ra¨ªz de la crisis econ¨®mica y los recortes emprendidos por todas las administraciones sanitarias.
El mes pasado, por ejemplo, Catalu?a y Arag¨®n acordaron la creaci¨®n de una comisi¨®n que garantice la asistencia sanitaria en las zonas lim¨ªtrofes y la dote de un marco estable. El anuncio se produjo como consecuencia de las protestas de distintos alcaldes de las comarcas aragonesas de La Ribagorza, la Litera y el Bajo Cinca de atenci¨®n inadecuada de sus vecinos en Lleida. Alrededor del 10% de los pacientes del hospital Arnau de Vilanova son aragoneses.
Para evitar este tipo de problemas, el consejero vasco, Rafael Bengoa, ha reclamado en varias ocasiones que se aborde esta cuesti¨®n en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud porque ¡°no vale hacer peque?os arreglitos [convenios] por todo el pa¨ªs¡±. La idea ser¨ªa definir un patr¨®n general de cooperaci¨®n entre autonom¨ªas lim¨ªtrofes, de forma que se pudiera adaptar a cada uno de los casos concretos, pero siempre dentro de un marco general.
De esta opini¨®n es tambi¨¦n Jos¨¦ Manuel Freire, profesor de la Escuela Nacional de Salud del Instituto Carlos III y portavoz actual de sanidad del grupo socialista en la Asamblea madrile?a. ¡°Una cuesti¨®n son los desplazados o las asistencias puntuales de pacientes que acuden a recibir tratamiento a otras autonom¨ªas, en cuyo caso ser¨ªa partidario de una facturaci¨®n cruzada entre administraciones sanitarias¡±, comenta. Sin embargo, a su juicio, el caso de las poblaciones lim¨ªtrofes es diferente: ¡°son poblaciones estables, lo que exige acuerdos tambi¨¦n estables entre las autonom¨ªas¡±.
Para Freire, el escenario ideal donde alcanzar pactos ser¨ªa el Consejo Interterritorial. El problema es que se trata de una instituci¨®n ¡°mal dise?ada y mal organizada¡±. Lo ideal, a?ade, ser¨ªa crear una Agencia del Sistema Nacional de Salud que despojada de car¨¢cter pol¨ªtico y que se centrara en las cuestiones t¨¦cnicas, ¡°al estilo del Consejo Nacional de Salud y Bienestar sueco¡±.
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