Oubi?a asistir¨¢ a drogodependientes o ¡°desfavorecidos¡± para reinsertarse
Es el primer narco que realizar¨¢ trabajos sociales al recibir el tercer grado
En un novedoso auto difundido este jueves, el juez central de Vigilancia Penitenciaria, Jos¨¦ Luis Castro, otorg¨® la libertad condicional al narcotraficante gallego Laureano Oubi?a pero fijando unas medidas de reinserci¨®n social sin precedentes para condenados por delitos contra la salud p¨²blica. Oubi?a, de 65 a?os, el preso por tr¨¢fico de hach¨ªs m¨¢s antiguo de Espa?a, ha pasado 11 en prisi¨®n y acept¨® prestar apoyo a personas desfavorecidas y drogodependientes para poder disfrutar de un r¨¦gimen de semilibertad, arrepinti¨¦ndose de su pasado delictivo y asumiendo el da?o que ha causado a la sociedad .
El juez impone a Oubi?a su incorporaci¨®n a actividades dirigidas a la reinserci¨®n y rehabilitaci¨®n de drogodependientes porque ¡°junto al proceso reparador de cara a la sociedad ha de incidirse en el aspecto resocializador de la condena, lo que obliga a imponer reglas de conducta del interno durante la clasificaci¨®n del tercer grado¡±.
Para el magistrado, ¡°este extremo es precisamente el quid de la cuesti¨®n, qu¨¦ hacer con estos internos en los que m¨¢s all¨¢ del cumplimiento de la condena la responsabilidad ante la sociedad se diluye al no existir v¨ªctimas concretas¡±, se?ala. ¡°Obviamente en reconocimiento del da?o causado, el arrepentimiento planteado es un importante paso pero necesita un plus de actuaciones que permitan constatar la reparaci¨®n del da?o y la obtenci¨®n por parte de la sociedad de ese efecto reparador, ya que en los delitos contra la salud p¨²blica la no visualizaci¨®n de la v¨ªctima concreta incide en no constatar el da?o y, en consecuencia, asumir por el penado los perjuicios derivados de su acci¨®n¡±, fundamenta en el auto.
Ahora ser¨¢ la Junta de Tratamiento y los Servicios Sociales Penitenciarios de la prisi¨®n donde Oubi?a cumplir¨¢ el tercer grado, probablemente A Lama (Pontevedra), los que decidan a qu¨¦ organizaci¨®n social prestar¨¢ asistencia el interno y los plazos que deber¨¢ cumplir.
Unas actividades que el juez interpreta que tendr¨¢n que adaptarse a las circunstancias personales y familiares de Oubi?a que ¡°le permitan continuar con el proceso de introspecci¨®n personal y de la asunci¨®n del da?o que causa el tr¨¢fico de drogas, lo que supone asumir el valor de pleno respeto a los derechos humanos de los dem¨¢s (v¨ªctimas, familia y sociedad), siendo el de la salud circunstancial a la propia realidad del hombre, m¨¢xime cuando la droga en general ha producido la muerte o trastornos a la salud de los consumidores y enormes perjuicios morales econ¨®micos a las familias que les apoyan en la voluntad de abandonar el consumo.
Adem¨¢s, Jos¨¦ Luis Castro estima los factores de adaptaci¨®n de Oubi?a y cree que cumple todos los requisitos para obtener el tercer grado: se ha arrepentido, cuenta con apoyo familiar, no tiene adicciones y ha presentado una oferta laboral contrastada para desempe?ar un trabajo. Tambi¨¦n ha tenido en cuenta la evoluci¨®n del interno y detalla en el auto el amplio calendario penitenciario del narcotraficante cuya ¨²ltima condena se extinguir¨¢ el 17 de julio del pr¨®ximo a?o. Resalta por ¨²ltimo el juez el hecho de que Laureano Oubi?a ¡°ha manifestado no tener inconveniente en colaborar en actividades dirigidas a reparar el da?o causado¡±.
El narcotraficante se encuentra estos d¨ªas en Vilagarc¨ªa, disfrutando de un tercer permiso desde que el 23 de septiembre pasado lograra salir de la c¨¢rcel en la que permaneci¨® ininterrumpidamente desde octubre de 2000, cuando huy¨® a Grecia tras conocer su primera condena por tr¨¢fico de hach¨ªs. Oubi?a solo abandon¨® la prisi¨®n por unas horas en febrero de 2001 para asistir al funeral de su esposa Esther Lago, fallecida en un accidente de tr¨¢fico.
El narco gallego ha hecho las maletas con dos procesos abiertos por blanqueo de dinero en la Audiencia Nacional pero todav¨ªa no se han adoptado medidas cautelares contra ¨¦l. De ambos sumarios pende su futuro penitenciario, ya que si fuese juzgado o condenado antes de la fecha que fij¨® el Tribunal Supremo para su excarcelaci¨®n definitiva, cabr¨ªa la posibilidad de que Oubi?a continuara entre rejas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.