Unos 446.000 descendientes de espa?oles han solicitado la nacionalidad
La mayor¨ªa de las peticiones amparadas en la Ley de Memoria Hist¨®rica viene de Cuba y Argentina
Gerardo Cadierno tiene 44 a?os, coordina la C¨¢mara Argentina de Industrias Electr¨®nicas y es uno de los nuevos espa?oles que han conseguido la nacionalidad de sus antepasados por la Ley de Memoria Hist¨®rica. El abuelo de Gerardo era de Malvedo, en el Ayuntamiento asturiano de Lena. No quer¨ªa ir a la guerra de Marruecos y la econom¨ªa apretaba en su familia numerosa. Se march¨® en 1920, a los 17 a?os, a Argentina, donde viv¨ªa una t¨ªa suya. All¨ª naci¨® el padre de Gerardo, que nunca adopt¨® la nacionalidad espa?ola y muri¨® como argentino. As¨ª fue que este profesional de la industria electr¨®nica no pudo solicitar la ciudadan¨ªa espa?ola hasta que hace tres a?os entr¨® en vigor la ley apodada ley de nietos porque permiti¨® por primera y ¨²nica vez que estos heredaran la nacionalidad de sus abuelos.
El pasado martes finaliz¨® el plazo de tres a?os que la Ley de Memoria Hist¨®rica estableci¨® para que hijos y nietos de espa?oles recuperaran la ciudadan¨ªa de sus antepasados, ya fueran exiliados por motivos pol¨ªticos entre 1936 y 1955 o por razones econ¨®micas. Muchos hijos de espa?oles pudieron acceder a la nacionalidad que sus padres hab¨ªan perdido al irse de Espa?a o al adoptar la ciudadan¨ªa del pa¨ªs al que hab¨ªan migrado.
El Ministerio de Asuntos Exteriores a¨²n no cuenta con los datos finales sobre las solicitudes recibidas durante los tres a?os de plazo, pero cont¨® que hasta el 30 de noviembre pasado, es decir, en dos a?os y 11 meses, unas 446.277 personas pidieron adquirir la nacionalidad por esta v¨ªa. El 95,2% es originario de Latinoam¨¦rica y m¨¢s de la mitad de las peticiones fue recibida en los consulados de La Habana (Cuba), en primer lugar, y Buenos Aires (Argentina), en segundo t¨¦rmino. Durante 2012 se seguir¨¢ analizando la validez de las solicitudes. En los primeros dos a?os el Ministerio de Justicia rechaz¨® solo el 4% de las 293.500 peticiones presentadas.
La ley de nietos ha permitido, por? primera y ¨²nica vez, heredar la nacionalidad de un abuelo?
Para sorpresa de los funcionarios, el 92,5% de las solicitudes recibidas en dos a?os y 11 meses fue presentado por hijos de espa?oles y apenas el 6,1%, por nietos. Hasta junio pr¨®ximo sigue abierta la posibilidad de que pidan la nacionalidad los nietos de abuelas espa?olas que perdieron la ciudadan¨ªa al casarse con un extranjero, de acuerdo con lo que establec¨ªa la legislaci¨®n hasta la d¨¦cada de los cincuenta.
El pasado martes se vivieron en el consulado espa?ol en Buenos Aires escenas que no se ve¨ªan desde hace diez a?os, cuando la crisis de Argentina empujaba a muchos de sus ciudadanos a buscar desesperadamente alg¨²n antepasado europeo para hacerse de un pasaporte que les permitiera emigrar sin problemas. El martes hab¨ªa otra vez colas que rodeaban toda la manzana del consulado, en el aristocr¨¢tico barrio de Recoleta, pero ya no se trasluc¨ªa angustia. Es ahora Espa?a la que est¨¢ en recesi¨®n, mientras Argentina apenas desacelera su fuerte crecimiento por el contagio de la situaci¨®n internacional.
Solo el martes unas 2.000 personas presentaron su solicitud en el consulado porte?o. Es as¨ª que en tres a?os se recibieron all¨ª m¨¢s de 70.000 peticiones. El martes, el consulado debi¨® extender el horario de atenci¨®n de las 14.30 a las 16.30 y adem¨¢s habilit¨® 40 ventanillas, en lugar de las tres o cuatro habituales. Muchos dejaron el tr¨¢mite para el ¨²ltimo d¨ªa.
¡°La motivaci¨®n principal de los solicitantes es de orden cultural, familiar, sentimental¡±, explica el vicec¨®nsul en Buenos Aires, Marcos Rodr¨ªguez. ¡°Aqu¨ª en Argentina mucha gente tiene una identidad multicultural. Tambi¨¦n hay quien ha trabajado en Espa?a, o hace negocios all¨ª o debe cobrar una herencia y calcula que la nacionalidad le facilitar¨¢ las cosas. Est¨¢n los que piensan que Argentina sufrir¨¢ otra crisis y entonces es bueno tener un pasaporte europeo¡±, enumera Rodr¨ªguez. En Cuba, en cambio, las motivaciones tambi¨¦n son pol¨ªticas: buscan una v¨ªa para salir temporal o definitivamente de la isla, con rumbo a Espa?a o EEUU.
Fue rechazado el 4% de las peticiones presentadas en los dos primeros a?os
Argentina es el pa¨ªs con m¨¢s espa?oles en el extranjero, unos 400.000, incluidos los menores de edad. M¨¢s de la mitad de esa cifra corresponde a nacidos en este pa¨ªs sudamericano. Uno de ellos es Gerardo Cadierno. ¡°Me nacionalic¨¦ espa?ol como homenaje a los que vinieron y no pudieron volver. Mis t¨ªos combatieron en las filas republicanas y uno estuvo detenido varios a?os en el campo de concentraci¨®n [nazi] de Mauthausen [Austria]. Es un derecho que ten¨ªa y lo ejerc¨ª. No hice otra especulaci¨®n¡±, cuenta Gerardo, que entre 2001 y 2005 vivi¨® en Villaviciosa (Asturias). ?l y su mujer, que tambi¨¦n recuper¨® ahora la nacionalidad de sus abuelos, hab¨ªan perdido la mayor¨ªa de sus ingresos laborales en la crisis argentina y justo fueron invitados a dar una conferencia sobre monta?ismo en Asturias. All¨ª unos parientes les consiguieron trabajo y se quedaron cuatro a?os. Finalmente optaron por volver cuando Argentina ya se recuperaba de la crisis porque prefer¨ªan desarrollar aqu¨ª su carrera y que sus hijos estuvieron cerca de sus abuelos. Gerardo no descarta migrar otra vez: ¡°Somos nietos de inmigrantes y sabemos qu¨¦ es esto de migrar¡±.
Hijos y nietos de abuelas que fueron espa?olas tienen de plazo hasta junio
Mar¨ªa Silvina Gonz¨¢lez, relacionista p¨²blica de 39 a?os, es otra argentina que se hizo espa?ola con la Ley de Memoria Hist¨®rica. ¡°De mi abuelo no s¨¦ nada¡±, reconoce Mar¨ªa Silvina. M¨¢s tarde averigua que hab¨ªa nacido en Co¨ªn (M¨¢laga) y hab¨ªa migrado a Argentina en 1913. ¡°A m¨ª no me interesaba sacar la nacionalidad espa?ola. Mi familia me dijo que me la hiciera. ¡®?Para qu¨¦?¡¯, les pregunt¨¦. 'Para no tener que sacar la visa para ir a ver a nuestro hermano en EEUU', me contest¨® otro hermano m¨ªo, que es profesor de educaci¨®n f¨ªsica y vive en un refugio de monta?a en Bariloche. A ¨¦l nunca le hubieran dado la visa como argentino para entrar a EEUU porque ah¨ª te piden que demuestres determinados ingresos¡±, relata Mar¨ªa Silvina, que descarta que se vaya a mudar a otro pa¨ªs, pero opina que la nacionalidad europea le puede abrir puertas en el futuro.
J¨®venes profesionales espa?oles en Latinoam¨¦rica
Mientras que casi medio mill¨®n de personas quieren la nacionalidad de un pa¨ªs en crisis como Espa?a, algunos j¨®venes profesionales nacidos all¨ª buscan trabajo en Latinoam¨¦rica. ¡°Vemos un cierto fen¨®meno en los ¨²ltimos dos a?os¡±, cuenta el vicec¨®nsul en Buenos Aires, Marcos Rodr¨ªguez. La mayor¨ªa de los espa?oles que migran va a otros pa¨ªses de Europa, pero fuera de este continente las preferencias est¨¢n en EEUU, Argentina, Ecuador y Venezuela. Muchos de los que vienen a estos pa¨ªses sudamericanos son nacidos aqu¨ª y vuelven a sus or¨ªgenes, pero el vicec¨®nsul reconoce que tambi¨¦n llegan originarios de Espa?a: ¡°Ya no es el inmigrante de baja cualificaci¨®n profesional, como en los cuarenta y los cincuenta, sino profesionales liberales, especialistas en marketing, publicidad, econom¨ªa, recursos humanos¡±.
En Brasil, la cantidad de espa?oles que obtuvieron el permiso de trabajo subi¨® en 2010 a 1.457, un 31,9% m¨¢s que en 2009. En Argentina, consiguieron la residencia permanente o temporaria en los primeros 11 meses del a?o pasado 1.151 personas, un 34,4% m¨¢s que en todo 2009.
Rafael Gil es uno de los j¨®venes profesionales espa?oles que busca mejor suerte en Sudam¨¦rica. De 30 a?os, licenciado en Historia y en Comunicaci¨®n Audiovisual, y con un master de Periodismo, llevaba casi tres a?os en el paro hasta que decidi¨® marcharse hace siete meses a Chile. All¨ª tambi¨¦n se le hace dif¨ªcil conseguir empleo. ¡°Me ir¨¦ ahora en el verano [austral] a sacar fotos a turistas que hacen rafting y escalada. A cambio me dan comida y alojamiento, mientras intento hacer contactos. Sin enchufe es imposible conseguir trabajo¡±, confiesa Rafael, cuya pareja lleg¨® a Chile con un contrato por dos a?os en una multinacional de energ¨ªa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.