Pino Sosa, 75 a?os: "Se lo llevaron vivo y vivo lo reclamaba mi madre"

La madre de Pino Sosa nunca quiso firmar nada ni dar por buena el acta de defunci¨®n de su marido.- "Se lo llevaron vivo y vivo lo reclamaba", ha explicado esta ma?ana la canaria Pino Sosa, de 75 a?os, ante los jueces del Tribunal Supremo que juzgan a Baltasar Garz¨®n por abrir una causa contra el franquismo"

"Se lo llevaron de casa, los apalearon, los tuvieron presos... Se llevaron el pan y la sal de nuestras casas", ha relatado Pino Sosa. No le ha dado tiempo a contar toda su historia. S¨ª ha dejado claro que acudi¨® a la justicia para que le ayudara a buscar a su padre y "a los dem¨¢s". En la primera denuncia que present¨® ante la Audiencia Nacional llevaba los nombres de m¨¢s de 500 desaparecidos, solo de Canarias. Desde entonces (2006), la lista ha crecido bastante.

Su padre era hojalatero. "Lo detuvieron y lo llevaron a un campo de concentraci¨®n en Gando. Mi madre iba a verlo, embarazada de m¨ª. El 25 de enero 1937 nac¨ª yo, el 10 de marzo lo dejaron en libertad, porque no hab¨ªa causa, y el 19, vinieron a por ¨¦l un grupo de falangistas. Eran las seis de la? ma?ana. Mi madre corri¨® a por un abrigo para pon¨¦rselo. El falangista le dijo: 'No se preocupe, se?ora, donde va su marido no lo necesita'. Y ya no le volvimos a ver¡±.

Cuando le preguntaba a su madre d¨®nde estaba su padre,"me dec¨ªa, deja eso, deja eso". Pero Pina escuchaba a las vecinas referirse a ella, en susurros, como "la hija del latonero que tiraron a los pozos". Y por los pozos de Arucas le busca desde hace ya muchos a?os. Siendo peque?a, aunque entonces sin entender todav¨ªa lo que ocurr¨ªa, acompa?aba a su madre con otras mujeres a las que tambi¨¦n les hab¨ªan desaparecido sus maridos a tirar flores a los pozos. A todos, porque no sab¨ªan en cu¨¢l estaba.

A Pina tampoco le ha dado tiempo a contar esta ma?ana en el tribunal que el d¨ªa que hizo la comuni¨®n el cura le dijo: "T¨² eres de los comunistas de las Chorreras". Ten¨ªa 7 a?os y no lo entendi¨®. "Al llegar a casa le pregunt¨¦ a mi madre qu¨¦ hab¨ªa querido decir el cura. Ella me respondi¨® que no le hiciera caso. Pero yo vi c¨®mo le ca¨ªan dos enormes lagrimones por la cara".

Hace dos a?os? ehxumaron un pozo en el que pensaron que pod¨ªa estar su padre. "Sacamos a 24,, con las manos atadas con alambre. Los forenses nos dijeron que es posible que algunos llegaran vivos al fondo". Ninguno era ¨¦l.

"Yo represento a todas las familias de desaparecidos en Arucas. Todas con unas historias terribles. Le he preguntado a varios psic¨®logos por qu¨¦ lloro tanto", confesaba ayer, antes de acudir a declarar al Tribunal Supremo. "No quiero llorar. Queiero mirar a los ojos a los jueces y contar la verdad. Por qu¨¦ yo me qued¨¦ sin padre, por qu¨¦ otros se quedaron sin padre, porque fuimos a la justicia". Se emocion¨® un poco, pero se repuso pronto. Pino Sosa, de 75 a?os, hija de desaparecido, sali¨® de la sala si haber derramado una l¨¢grima.

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