Rajoy sugiere otro recorte dur¨ªsimo y apela a la sensatez de los espa?oles

Cinco d¨ªas despu¨¦s de las elecciones andaluzas, Mariano Rajoy pondr¨¢ en negro sobre blanco los mayores recortes de la historia de Espa?a. Ser¨¢ el viernes 30 de marzo, seg¨²n confirm¨® ayer el presidente en Roma. Hasta entonces, Rajoy y su equipo negociar¨¢n con Bruselas para que les deje recortar algo menos, unos miles de millones de euros menos. Pero lo consiga o no, el tajo ser¨¢ descomunal. Por encima de los 30.000 millones de euros.

Por primera vez, Rajoy habl¨® algo m¨¢s a fondo de esos Presupuestos. Y augur¨® que ser¨¢n extremadamente duros: ¡°Va a ser un a?o muy dif¨ªcil¡±. Mientras, a su lado, Mario Monti, el hombre elegido tambi¨¦n para llevar a cabo otro superajuste, aplaud¨ªa las reformas de su colega espa?ol. En alg¨²n momento, los gestos del italiano parec¨ªan los de un profesor complacido ante los pasos de un buen alumno.

El presidente del Gobierno teme a los Presupuestos. Es su gran prueba de fuego despu¨¦s de la reforma laboral. Hasta ayer se escudaba, para no hablar de ellos y dejar pasar los d¨ªas, en que estaba esperando las previsiones de crecimiento para Espa?a de la Comisi¨®n Europea. Llegaron: -1%, menos pesimistas que las del Banco de Espa?a (-1,5%) y el FMI (-1,7%).

Ahora el presidente ya no tiene m¨¢s excusas. Debe enfrentar a las cuentas, y ya no esconde su dureza: ¡°Es un momento dif¨ªcil, creo que la gente entiende las decisiones y las cosas que tenemos que hacer. Con los Presupuestos habr¨¢ mayores recortes del gasto p¨²blico. Menos las pensiones, todas las dem¨¢s partidas las hemos bajado o las podemos bajar. Este a?o va a ser dif¨ªcil para Espa?a, es bueno que todos seamos conscientes. El resultado de las reformas no se ver¨¢ en el corto plazo, pero a los que tengan dudas hay que decirles que estamos poniendo las bases para el futuro¡±.

El PP teme a la calle. De hecho, el Gobierno ha dado la orden a la polic¨ªa en Valencia de que evite intervenir incluso aunque haya provocaciones de los estudiantes. Rajoy sabe que uno de sus mayores riesgos pol¨ªticos es un incendio social. Tal vez por eso ayer quiso lanzar un mensaje de calma y se mostr¨® confiado en que, pese a la dureza de los Presupuestos y de algunas reformas, como la laboral, no habr¨¢ una explosi¨®n social.

¡°?Que si temo una reacci¨®n social? Nosotros hemos tomado decisiones que afectan a mucha gente. Espa?a necesita moderaci¨®n, sensatez y equilibrio. Debemos explicar las medidas. Si son percibidas como justas y equitativas, estoy convencido de que no va a haber tensi¨®n social. Este domingo hubo manifestaciones. Las respeto, pero esta reforma laboral es la que necesita Espa?a. No tomamos las decisiones para fastidiar a nadie. No tengo temor, aunque algunas cosas hayan ocurrido, a una situaci¨®n fuera de lo normal, creo en la madurez, el equilibrio y la sensatez del pueblo espa?ol¡±, dijo el presidente.

Rajoy no quiere concretar la magnitud del recorte. No lo har¨¢ mientras pueda evitarlo y ganar tiempo, sobre todo para no estropearle a Javier Arenas la campa?a electoral de las andaluzas. Tambi¨¦n porque est¨¢ en plena negociaci¨®n con Bruselas. Por eso solo apunt¨® el calendario.

Pero ayer dio un paso m¨¢s, que pol¨ªticamente es muy relevante. No solo el Estado va a revisar por completo sus cuentas. Se rebajar¨¢ la previsi¨®n de ingresos por culpa de la recesi¨®n que los recortes no har¨¢n sino profundizar. Se rebajar¨¢ tambi¨¦n el crecimiento. Rajoy anunci¨®, y es otra novedad, que la previsi¨®n del Gobierno ser¨¢ peor que ese 1% que ayer apunt¨® la Comisi¨®n Europea. Pero, sobre todo, la gran novedad es que, seg¨²n explic¨® el presidente, todas las autonom¨ªas y Ayuntamientos tendr¨¢n que revisar a la baja sus presupuestos.

Esto es, habr¨¢ recortes por todas partes. Las autonom¨ªas son las que tienen el porcentaje del gasto social, por lo que el asunto es extremadamente delicado desde el punto de vista pol¨ªtico. Buena parte del recorte recaer¨¢ en ellas.

Rajoy llevaba muy preparada la inevitable pregunta de los periodistas sobre las consecuencias de las nuevas previsiones de Bruselas, y quiso lanzar un mensaje clar¨ªsimo a las comunidades y los Ayuntamientos, la mayor¨ªa gobernados por su partido despu¨¦s del ¨¦xito de las municipales de mayo de 2011: ¡°Informaremos a las comunidades aut¨®nomas y los Ayuntamientos de que tras esta previsi¨®n tienen que adoptar las medidas correctoras correspondientes, porque los Presupuestos se han hecho sobre la base de una previsi¨®n de crecimiento que, como algunos ya preve¨ªamos, en ning¨²n caso iban a ser ciertas¡±.

Este palo llega justo despu¨¦s de la zanahoria que supuso para las autonom¨ªas la lluvia de millones en pr¨¦stamos para pagar a proveedores y moratorias para devolver dinero que le deben al Estado. De nuevo, no est¨¢ claro qu¨¦ dimensiones tendr¨¢ este golpe. Pero no ser¨¢ peque?o. Si hab¨ªan hecho unos presupuestos con un crecimiento previsto del 2,3% del PIB y ahora la ca¨ªda programada va a ser superior al 1%, el ajuste ser¨¢ dur¨ªsimo.

Rajoy no tiene as¨ª ninguna buena noticia que vender a los espa?oles. Aunque ayer se le ve¨ªa aparentemente c¨®modo con Monti, que no solo aplaudi¨® su reforma laboral sino que lleg¨® a decir que tomar¨¢ ideas para la que est¨¢ promoviendo ¨¦l en Italia. ¡°Estoy muy impresionado por las reformas en Espa?a. Tenemos mucho que aprender el uno del otro, aunque los desaf¨ªos no sean los mismos¡±, lleg¨® a decir el italiano.

La presencia de Monti, un gobernante que destaca por su capacidad para llevar adelante medidas duras con mucho coste pol¨ªtico ¡ªclaro que ¨¦l es un tecn¨®crata que no tiene que presentarse a las elecciones al final del proceso¡ª le sirvi¨® a Rajoy para exhibir ante un influyente l¨ªder europeo su voluntad firme de tirar para delante a cualquier precio.

Eso s¨ª, ambos est¨¢n empezando a darse cuenta de que la pol¨ªtica de recortes a ultranza promovida por el eje franco-alem¨¢n no est¨¢ dando buenos resultados en pa¨ªses como Espa?a e Italia. Por eso los dos reivindicaron la utilidad de la carta promovida por Monti y firmada por Rajoy, en la que se piden otro tipo de medidas para impulsar el crecimiento, sobre todo liberalizadoras.

Sin embargo, y pese a las malas previsiones conocidas ayer, ninguno de los dos admite que haya llegado la hora de suavizar los recortes, ahora que tanto Espa?a como Italia entran en recesi¨®n. Los dos parec¨ªan muy de acuerdo en eso: no hay otra salida m¨¢s que seguir reduciendo el gasto p¨²blico. Y mucho.