Pilar Manj¨®n: ¡°Lo que tiene que hacer es protegernos, como obliga el C¨®digo Penal¡±

El domingo conmemor¨® el octavo aniversario de los atentados que se llevaron por delante la vida de su hijo. Cuando despu¨¦s de los actos mir¨® su correo electr¨®nico, se encontr¨® con decenas de mensajes en los que, dice, se le profer¨ªan insultos. Una protecci¨®n contra esas agresiones es lo que reclama Pilar Manj¨®n, la presidenta de la Asociaci¨®n 11-M Afectados por el terrorismo (la mayoritaria) del fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, en lugar de alentar bulos conspiranoicos. Y no porque le sea moralmente exigible, sino porque la ley le obliga a ello. El art¨ªculo 578 del C¨®digo Penal, recuerda Manj¨®n, castiga con hasta dos a?os de c¨¢rcel al que menosprecie o humille a las v¨ªctimas del terrorismo. Y no cabe duda de que ella lo es.

¡°Que deje en paz el 11-M y que me proteja cuando me insulten¡±, exigi¨® ayer Manj¨®n tras conocer que Torres-Dulce consideraba la sentencia de los atentados ¡°la verdad jur¨ªdica¡± y sus hechos probados ¡°incontestables¡±. Lo hizo diez d¨ªas despu¨¦s de encargar una investigaci¨®n basada en las teor¨ªas de la conspiraci¨®n.

¡°No debi¨® estar all¨ª¡±, dijo la presidenta de la asociaci¨®n sobre la presencia del fiscal general en el acto organizado por la AVT en el bosque de los ausentes del Retiro. Torres-Dulce, sin embargo, no acudi¨® al acto que su asociaci¨®n, la que m¨¢s v¨ªctimas del 11-M agrupa, hab¨ªa convocado en la estaci¨®n de Atocha horas antes.

Todas estas cosas son las que Manj¨®n dir¨ªa al fiscal general en ese encuentro que ahora ¨¦l le ofrece. Ella solo espera que Torres-Dulce la llame. ¡°Que me convoque¡±, zanja.