Italia absuelve al espa?ol que ha pasado 20 meses preso confundido con un narco
Un mafioso utiliz¨® su DNI del lavacoches para sus actividades delictivas El ahora absuelto fue condenado a 14 a?os de prisi¨®n El Tribunal de Apelaci¨®n de N¨¢poles admite tras 20 meses el error de la justicia italiana
A Pepe Carvalho o a Salvo Montalbano, los detectives de V¨¢zquez Montalb¨¢n y de Andrea Camilleri, les hubiese bastado con cruzar unas palabras con ?scar S¨¢nchez Fern¨¢ndez, de 46 a?os, natural de Montgat (Barcelona) y lavacoches de profesi¨®n, para haberse percatado de que en ning¨²n caso daba el perfil de capo del narcotr¨¢fico internacional, de que algo no cuadraba, de que deb¨ªa de haber gato encerrado. Pero, ni en Espa?a ni en Italia, ?scar S¨¢nchez tuvo la fortuna de cruzarse con polic¨ªas ni con jueces tan espabilados, y los ¨²ltimos 626 d¨ªas de su vida los ha pasado en la c¨¢rcel, condenado a m¨¢s de 14 a?os por dos delitos ¨Cnarcotr¨¢fico y colaboraci¨®n con la Camorra¡ª que jam¨¢s cometi¨®. Ahora, finalmente, ha sido absuelto por el Tribunal de Apelaci¨®n de N¨¢poles.
Esta historia para no dormir hay que contarla paso por paso. El 5 de julio de 2010, ?scar S¨¢nchez fue detenido por agentes de la Guardia Civil. Si sus familiares y amigos se extra?aron del hecho en s¨ª, patidifusos se quedaron cuando se enteraron del porqu¨¦: una orden internacional de busca y captura emitida por los jueces de Regio Calabria (sur de Italia) en la que se acusaba a ?scar, que apenas hab¨ªa salido del Maresme, de ser el jefe de una banda que trasegaba grandes cantidades de coca¨ªna entre Espa?a e Italia.
Unas semanas m¨¢s tarde, con la diligencia con que se suelen dar los pasos equivocados, la Audiencia Nacional extradit¨® al lavacoches a Italia, donde fue internado primero en una c¨¢rcel de Roma y luego a otra de N¨¢poles, ambas igual de terribles. En mayo de 2011, ?scar S¨¢nchez recibi¨® su primera condena por narcotr¨¢fico. Los jueces consideraron probado que el lavacoches hab¨ªa estado en hoteles de Roma en los que jam¨¢s hab¨ªa estado, que hab¨ªa comprado tel¨¦fonos para comprar y vender coca¨ªna por los que jam¨¢s hab¨ªa hablado¡ ?C¨®mo pod¨ªa ser eso?
La respuesta hay que buscarla unos a?os antes. En 2002, ?scar S¨¢nchez conoci¨® a una mujer que le rob¨® ¨Co le pidi¨® prestado¡ª su carn¨¦ de identidad. No lo quer¨ªa de recuerdo, sino para venderlo a la delincuencia organizada. Ahora se sabe que el verdadero malandro, un uruguayo llamado Marcelo Roberto Mar¨ªn, de 42 a?os, era un experto en utilizar identidades falsas para cometer sus fechor¨ªas. As¨ª pues, mientras ?scar S¨¢nchez segu¨ªa lavando coches y llevando una vida corriente en el Maresme, su carn¨¦ de identidad viajaba por el mundo de la delincuencia en la cartera del uruguayo. De hecho, cuando la justicia italiana emiti¨® la orden internacional de busca y captura y los guardias civiles de Montgat detuvieron a ?scar, el uruguayo ya llevaba seis meses preso en la c¨¢rcel de Las Palmas, tras ser detenido por la polic¨ªa espa?ola por tr¨¢fico de drogas y falsificaci¨®n de documentos. En su poder ten¨ªa carn¨¦s italianos de conducir y de identidad falsos, pero no el de ?scar, as¨ª que ambas historias no pudieron unirse hasta meses despu¨¦s.
Hay todav¨ªa otro hecho desafortunado para ?scar. No solo no se cruz¨® en su camino con ning¨²n Carvalho ni ning¨²n Montalbano, sino que, para m¨¢s inri, el perito que analiz¨® la voz del lavacoches y la que la polic¨ªa hab¨ªa grabado al verdadero capo tampoco era un lumbrera. Dijo que las voces eran id¨¦nticas, a pesar ¨Ccomo se supo despu¨¦s¡ª de que ?scar naci¨® y vivi¨® siempre en el Maresme y el otro es un uruguayo muy viajado.
El hecho es que ?scar S¨¢nchez se segu¨ªa comiendo en una prisi¨®n italiana una condena que no era la suya. Los intentos de la polic¨ªa espa?ola ¨Ca trav¨¦s del c¨®nsul general de Espa?a en Roma, Eduardo de la Iglesia¡ª por desfacer el entuerto, chocaron una y otra vez con la pesada, oxidada y desesperante burocracia italiana. De la Iglesia, que no dud¨® en ning¨²n momento de la inocencia del preso espa?ol, siempre dijo lo que hubieran dicho los personajes literarios de V¨¢zquez Montalv¨¢n o Camilleri: ¡°Es imposible que un hombre as¨ª dirija una banda de narcotraficantes¡±.
Finalmente, el Tribunal de Apelaci¨®n de N¨¢poles absolvi¨® este mi¨¦rcoles por la ma?ana a ?scar S¨¢nchez ¡°por no haber cometido el hecho¡±. Unas horas despu¨¦s era puesto en libertad. Con solo 626 d¨ªas de retraso¡
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