Hospitalizado 24 horas antes de ser desahuciado por la marquesa
Un barrendero enfermo ser¨¢ obligado a dejar su casa en Vallecas este jueves, propiedad de una aristocr¨¢tica familia de abogados que reclama el piso despu¨¦s de 50 a?os
La entrevista avanzaba bien, aunque se le cortaba la voz. Un descafeinado y empieza a charlar. Mariano Soler, de 56 a?os, ser¨¢ desalojado este jueves de su casa de Vallecas en la que vive desde los tres a?os. 24 horas antes de que llegue la polic¨ªa, camina por el sal¨®n como un preso esperando la ejecuci¨®n, que en el extra?o lenguaje jur¨ªdico se llama lanzamiento. Se pone de pie, se vuelve a sentar, coge el m¨®vil, lo deja y lo vuelve a coger. La propietaria del piso es Carmen Elzaburu, de 94, a?os, aunque quienes llegar¨¢n a Malgrat de Mar, 8, con la polic¨ªa, ser¨¢ alguno de sus hijos de apellido D¨ªaz de Rivera Elzaburu y de profesi¨®n marqueses, abogados y due?os de una decena de propiedades entre ellas el Club de Puerta de Hierro. A las 11.45. Es la hora de este jueves se?alada para cumplir una orden judicial que ordena devolver el piso a sus propietarios despu¨¦s de un juicio que conden¨® al inquilino por el impago de 17 euros mensuales. ¡°No pago porque no me dejan, no porque no quiera...¡±, dice Mariano que interrumpe repentinamente la conversaci¨®n.
-Me voy a tomar la tensi¨®n, dice en medio de la entrevista.
-El m¨¦dico me ha dicho que me tome la tensi¨®n cada d¨ªa.
Mariano, como se le conoce en Vallecas, empapelada con su foto, es barrendero del Ayuntamiento de Madrid, pero lleva m¨¢s de un a?o de baja debido al rosario de enfermedades que arrastra entre las coronarias y las pulmonares. Si se cumple la sentencia este jueves no tendr¨¢ donde enchufar la m¨¢quina de ox¨ªgeno con la que duerme cada d¨ªa. ¡°Se celebr¨® un juicio sin que yo me enterara donde se me conden¨® despu¨¦s de m¨¢s de 50 a?os viviendo aqu¨ª¡±, insiste.
La casa que reclaman los marqueses de Hu¨¦tor de Santill¨¢n tiene 70 metros cuadrados, una cocina con dos paquetes de arroz y aceite del d¨ªa anterior en la sart¨¦n, dos habitaciones y un peque?o sal¨®n con una mesa ordenada de donde coge el tensi¨®metro. En las paredes sin pintar hay un calendario de la fruter¨ªa, fotos de nietos, un bander¨ªn del Rayo Vallecano, im¨¢genes de v¨ªrgenes y una ventana a la calle.
Cuando lleg¨® a vivir aqu¨ª con sus padres en 1971, todo lo que hab¨ªa enfrente era campo. El bar de abajo una bodega, las casas de delante un descampado y la carretera de Valencia solo ten¨ªa un carril de ida y otro de vuelta. Sus padres hab¨ªan llegado de Toledo unos a?os antes a una de las casas bajas del final de Vallecas, donde naci¨® Mariano. Cuando ten¨ªa tres a?os, gracias a unas monjas que conoc¨ªan a Carmen Elzaburu, la familia pudo mudarse a un piso ¡°normal¡± por el que pagar¨ªan un alquiler de renta antigua de 3.000 pesetas, convertido despu¨¦s en 17 euros. Pasaron varias d¨¦cadas y nadie se hab¨ªa interesado por el piso hasta que en 2022 los due?os le pidieron que se fuera. Primero por las malas y despu¨¦s por las peores.
Mariano explica que el administrador dej¨® de recibirle los pagos y se puso en marcha la estrategia habitual que se sigue con los inquilinos d¨ªscolos en otros lugares como Lavapi¨¦s, Carabanchel, Usera o el Mercado de Torrijos de donde hay que expulsar a los inquilinos. Primero con llamadas y amenazas por tel¨¦fono, despu¨¦s dejan recibir el pago del alquiler y luego las amenazas son al telefonillo y a cualquier hora del d¨ªa. ¡°Sal de la casa, cabr¨®n¡±, ¡°Hijoputa, eso no es tuyo¡±, recuerda Mariano. Despu¨¦s llega una demanda por impago y finalmente se fija una fecha para el juicio. Pero Mariano dice que ¡°nunca le lleg¨® notificaci¨®n alguna¡± y ¡°nunca supo de ese juicio¡±. El caso es que se fija una fecha para el juicio que se celebra en ausencia del demandado y finalmente falla a favor del propietario por el impago de 17 euros mensuales.
¡°La t¨¦cnica consiste en que no llegue la notificaci¨®n. Unas veces con la direcci¨®n err¨®nea, otras que no est¨¢n y otras aprovechan la confusi¨®n con un vecino. El objetivo es conseguir que se celebre un juicio por impago al que el inquilino no se presenta¡±, dice Diego Sanz, de la Plataforma Antidesahucio de Vallekas (PAH). En mayo lleg¨® el primer desahucio, pero los m¨¦dicos que examinaron a Mariano dijeron que ten¨ªa apnea, problemas coronarios, jaquecas y fue declarado vulnerable y se retras¨® siete meses. Este jueves finalmente es la fecha se?alada.
Los propietarios del apartamento son la familia D¨ªez de Rivera Elzaburu, pertenecientes a la aristocracia madrile?a desde que Alfonso XII rescat¨® el marquesado Hu¨¦tor de Santill¨¢n. A la boda de Alonso D¨ªez de Rivera y Carmen Elzaburu, due?a del piso en el que vive Mariano, acudieron, entre otros, Franco y su yerno Crist¨®bal Mart¨ªnez-Bordi¨². Este peri¨®dico ha tratado varias veces de localizar a Ignacio D¨ªaz de Riera o Alfonso D¨ªez de Rivera o la persona de comunicaci¨®n del despacho que ambos comparten, pero no fue posible. El personal de su oficina confirm¨® que estaban enterados de que este peri¨®dico quer¨ªa incluir su versi¨®n de los hechos, pero decidieron no decir nada.
La mesa de Mariano es una peque?a farmacia donde adem¨¢s del tensi¨®metro hay ansiol¨ªticos, pastillas para el coraz¨®n, el problema pulmonar, la apnea o las jaquecas. Seg¨²n la nota que ha recibido del juzgado, a las 11.45 llegar¨¢ la polic¨ªa y los vecinos de Vallecas est¨¢n llamados a concentrarse desde una hora antes en el domicilio para impedir el desalojo. Si se cumple la sentencia ser¨¢ el punto y final a una lucha legal tan desequilibrada como pegarle a un ciego. Mientras los Elzaburu anuncian en su web que son el bufete de abogados m¨¢s antiguos de Espa?a con un imponente despacho en los rascacielos de Chamart¨ªn, Mariano cuenta con una abogada de oficio que el mensaje m¨¢s esperanzador que le ha enviado esta semana es que la otra parte ha pedido para el desalojo de este jueves ¡°suficiente polic¨ªa para garantizar la seguridad de los intervinientes en el lanzamiento¡±.
El apoyo de la PAH y de Vallecas, sin embargo, ha sido brutal. Las calles con su rostro empapelan el barrio y han aportado informaci¨®n para demostrar que la familia Elzaburu es ¡°gran tenedor¡± y Mariano ¡°vulnerable¡± para demostrar que est¨¢ protegido contra el desahucio por el llamado ¡°escudo social¡±. La ley considera gran tenedor a quien posee m¨¢s de diez propiedades y en el caso de Carmen Elzaburu ¡°hemos adjuntado al juzgado los registros de 13 propiedades. Entre ellas, tres viviendas de m¨¢s de 700 metros en la Avenida Miraflores con parcela, el Club de Puerta de Hierro, una Dehesa con siete viviendas en Toledo, un piso m¨¢s en Ciudad Real, otra finca m¨¢s en Ciudad Real¡¡±, se?alan desde la Plataforma. A estas propiedades hay que a?adir la vivienda de Mariano con aceite del d¨ªa anterior en la sart¨¦n. La justicia, sin embargo, ha dicho que no ha quedado acreditado que los Elzaburu sea ¡°grandes tenedores¡±.
Mariano termina por fin de tomarse la tensi¨®n. 203 de m¨¢xima y 129 de m¨ªnima. Y la entrevista termina de forma abrupta. Con el cuello r¨ªgido, dificultades al hablar, cualquier m¨¦dico confirmar¨ªa que puede morirse en cualquier momento.
-?Tienes abono transportes?
Mariano camina hasta la parada y sube al autob¨²s rumbo al hospital con los nervios disparados. La cara de la enfermera que lo recibe es un poema y levanta las cejas cuando escucha los datos de la tensi¨®n. La m¨ªnima de Mariano es la m¨¢xima para un hipertenso. Los m¨¦dicos han decido que siga en observaci¨®n hasta hoy, d¨ªa del desahucio.
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