El Supremo anula la expulsi¨®n de un juez que asesor¨® a un narco
El alto tribunal considera que el Poder Judicial super¨® el plazo de seis meses para investigarlo
Asesor¨® jur¨ªdicamente a un narco, pero esa acci¨®n, especialmente reprobable en el caso de un magistrado, no ser¨¢ sancionada gracias a sus compa?eros del Tribunal Supremo. La Sala de lo Contencioso-Administrativo del alto tribunal ha anulado la expulsi¨®n de la judicatura de Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Mart¨ªn, el expresidente de la Audiencia de Las Palmas, acordada por el Consejo General del Poder Judicial el 22 de abril de 2010 por la comisi¨®n de cuatro faltas muy graves. La resoluci¨®n, que considera que el gobierno de los jueces se excedi¨® en el plazo de seis meses para investigarlo, podr¨ªa reintegrarlo a su puesto si no fuera por su edad. Mart¨ªn cumpli¨® 70 a?os ¨Cla edad de jubilaci¨®n de jueces y magistrados- el 5 de mayo de 2010. Pero s¨ª podr¨¢ reclamar los salarios que dej¨® de percibir tras ser apartado.
La resoluci¨®n del CGPJ lo expuls¨® de la carrera por las faltas muy graves de inobservancia del deber de abstenci¨®n a sabiendas de que concurre causa para ello, dos de ejercicio de actividades incompatibles con el cargo de magistrado y otra de intromisi¨®n en el ejercicio de la jurisdicci¨®n de otro juez. Seg¨²n el acuerdo del Pleno del Consejo, Mart¨ªn hab¨ªa maniobrado en su tribunal para tratar de obtener la puesta en libertad de Rafael Bornia, uno de los narcotraficantes m¨¢s importantes de Europa, que estaba acusado de tr¨¢fico de estupefacientes y blanqueo de dinero.
Momentos antes de iniciarse la vista contra Bornia, el 28 de julio de 2005, Mart¨ªn pregunt¨® al fiscal sobre la posibilidad de pedir la libertad del narcotraficante. Ante la negativa del fiscal el magistrado interes¨® la petici¨®n de libertad con una ¡°alta fianza¡± de 1,2 millones de euros. ¡°No, los paga y se fuga¡±, zanj¨® taxativamente el fiscal. El presidente de la Audiencia vot¨® luego, a diferencia de otros magistrados de la sala, a favor de la libertad provisional de Bornia, condenado por un delito de tr¨¢fico de droga. Un mes antes, el magistrado se hab¨ªa reunido en un reservado de un restaurante con el hermano del acusado sin saber que lo vigilaba la polic¨ªa. En esa comida, seg¨²n las llamadas intervenidas, se habr¨ªa comprometido a mediar por el narco.
La anulaci¨®n de la expulsi¨®n de Mart¨ªn no es la primera ayuda que el magistrado recibe de sus colegas del Tribunal Supremo. En enero de 2010 la Sala de lo Penal lo absolvi¨® del delito de negociaciones prohibidas a los funcionarios por el que hab¨ªa sido condenado a a?o y medio de suspensi¨®n por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. Los magistrados del alto tribunal estimaron que el asesoramiento al peligroso narcotraficante ¡°no hab¨ªa tenido la suficiente entidad¡±.
La readmisi¨®n de Mart¨ªn la firman sus compa?eros Jos¨¦ Manuel Siera, Juan Jos¨¦ Gonz¨¢lez Rivas, Pablo Lucas Murillo de la Cueva, Octavio Herrero, Luis Mar¨ªa D¨ªez-Picazo, Jos¨¦ D¨ªaz Delgado, Juan Carlos Trillo, Vicente Conde Mart¨ªn de Hijas y Nicol¨¢s Maurandi. Este ¨²ltimo magistrado ha formulado un voto particular discrepante.
Ahora, Mart¨ªn podr¨¢ reclamar los salarios que dej¨® de recibir tras la expulsi¨®n que se acaba de anular. Sin embargo, la cantidad a la que supuestamente tiene derecho no es muy alta. Mart¨ªn alcanz¨® la edad de jubilaci¨®n el 5 de mayo de 2010, solo 13 d¨ªas despu¨¦s de ser apartado. As¨ª pues, en principio, la cantidad a la que tendr¨ªa derecho ser¨ªa ¨²nicamente la equivalente a ese peque?o lapso de tiempo. Eso s¨ª, a pesar de haberse demostrado que asesor¨® a un delincuente, recupera todos los honores inherentes a la condici¨®n de juez.
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