La misma situaci¨®n que en 2007

La historia se repite. La izquierda abertzale, tras la ruptura de ETA de la tregua anterior en junio de 2007, tuvo que emplearse a fondo para convencer a la banda de que abandonara el terrorismo, lo que logr¨® cuatro a?os despu¨¦s, el 20 de octubre de 2011, y a lo que contribuy¨® la cadena de detenciones de los dirigentes etarras m¨¢s beligerantes.

Pero su tarea no acab¨®. Ahora tendr¨¢ que volver a emplearse a fondo para convencer al colectivo de presos, el sector m¨¢s enrocado hist¨®ricamente del conglomerado etarra, de que la ¨²nica salida posible para consolidar el final de la violencia, con una hoja de ruta para su excarcelaci¨®n, pasa por asumir la legalidad por la v¨ªa de la reinserci¨®n individual. No es un empe?o f¨¢cil, a juzgar por la resoluci¨®n ¡ªconocida ayer, tras un debate prolongado desde el oto?o¡ª del colectivo de presos, que hab¨ªa suscitado muchas expectativas, sobre todo porque dirigentes significados de la izquierda abertzale, como Pernando Barrena, hab¨ªan pedido a los presos de ETA que asumieran la legalidad y la reinserci¨®n individual.

Con la invocaci¨®n del colectivo de presos a la amnist¨ªa y a la autodeterminaci¨®n, la izquierda abertzale ha quedado desairada.

Se ve que en el colectivo de presos de ETA existen serias resistencias a asumir la legalidad y que la mayor¨ªa, en l¨ªnea con la izquierda abertzale, ha cedido ante la minor¨ªa para evitar la ruptura. De ah¨ª que haya surgido una resoluci¨®n muy lejana a las exigencias del momento. Ha primado, como sucedi¨® entre 2007 y 2011, el ¡°vamos m¨¢s despacio, pero vamos todos juntos¡±.

Se plantea, pues, la misma situaci¨®n que en 2007. La izquierda abertzale contempl¨® entonces que para salvar su movimiento pol¨ªtico no ten¨ªa otra soluci¨®n que convencer a ETA de que asumiera el cese del terrorismo.

Ahora, si quiere consolidar el final de la violencia y, con ello, su movimiento pol¨ªtico, necesita convencer a los presos de ETA de que asuman la reinserci¨®n individual. No hay otra salida. Ni el Gobierno ni la mayor¨ªa de los partidos, incluido el PNV, asume una amnist¨ªa.

Tampoco la contempla la mayor¨ªa de la sociedad vasca. Una mayor¨ªa de vascos exige que los presos de ETA acepten la reinserci¨®n individual, seg¨²n las encuestas.

El colectivo de presos, con esta resoluci¨®n, afronta el riesgo de la fisura interna. Puede suceder que el Gobierno tome la iniciativa con su plan de reinserci¨®n y, ante la falta de soluciones, algunos presos se acojan a ¨¦l.

La parte positiva de la resoluci¨®n es el apoyo de los presos a la decisi¨®n de ETA de cesar definitivamente las armas. Es relevante cuando algunos sectores hab¨ªan dudado de que el cese de la banda terrorista ETA fuera real, sobre todo tras la detenci¨®n el domingo de dos etarras armados en Francia.