Las bicicletas no son para Espa?a
La muerte de V¨ªctor Cabedo alerta sobre la alta siniestralidad de los ciclistas en nuestras carreteras
¡°Es un tema cultural¡±. La frase es rotunda y se repite una y otra vez entre profesionales y aficionados del ciclismo y ciudadanos, cada vez que un ciclista muere en la carretera, entrenando o simplemente paseando por las sendas, supuestamente compartidas con coches, motos, autobuses, tractores o dem¨¢s artefactos con motor. La muerte del ciclista del Euskaltel V¨ªctor Cabedo, de 23 a?os, tras chocar en una bajada con un autom¨®vil deportivo en Almed¨ªjar (Castell¨®n), que ven¨ªa en sentido contrario, ha vuelto a alertar sobre los peligros del ciclismo en carretera. El atestado a¨²n no ha aclarado las circunstancias del accidente. No se sabe si el ciclista no circulaba lo suficientemente pegado a su derecha o el autom¨®vil a la suya. Todo sucedi¨® en una curva. Una curva maldita como tantas.
De los 25 ciclistas profesionales espa?oles fallecidos, nueve lo fueron en actividades de entrenamiento. Entre los aficionados o cicloturistas, la cifra se dispara. Espa?a registra una tasa de siniestralidad ciclista que lidera el ranking europeo, con 3.496 accidentados, de los cuales 67 fallecieron en 2010. ¡°En 2011 a¨²n no tenemos los datos cotejados¡±, se?alan en la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, ¡°pero puede ser similar al de los a?os anteriores. Lo que s¨ª sabemos es que en el presente a?o ya llevamos 35 muertos solo en carretera¡±.
En todos los ¨¢mbitos se suscitan dudas. La DGT est¨¢ ultimando la posible modificaci¨®n del Reglamento de Circulaci¨®n que podr¨ªa obligar a los ciclistas a usar, como los profesionales, el casco tambi¨¦n en los trayectos urbanos. ¡°Actualmente es obligatorio para todos en los trayectos en carretera, pero en lo urbano hay una corriente que piensa que obligar a llevar el casco podr¨ªa afectar al uso de las bicicletas recomendado por razones medioambientales y saludables¡±. En breve, se har¨¢ la luz. Cuesti¨®n de meses, probablemente.
En cualquier caso, cicloturistas y profesionales creen que el asunto de la seguridad de los ciclistas en la carretera tiene m¨¢s que ver con la cultura general del tr¨¢fico. ¡°Hay muchos conductores de coches a los que los ciclistas les ponemos nerviosos¡±, afirma Pedro Horrillo, exprofesional pero practicante del deporte de las dos ruedas. ¡°Mucha gente no sabe que por nuestra seguridad se puede circular en paralelo. Y te pita. Y pone nervioso al que va delante. Hay gente que soporta ir detr¨¢s de un tractor cuando no puede adelantar y sin embargo le saca de quicio ir detr¨¢s de un ciclista¡±, asegura. ¡°Hay muchos aficionados que han dejado la carretera y se han ido a la mountain bike, al monte, para evitar sorpresas de tr¨¢fico¡±, dice otro excorredor. ¡°Aqu¨ª, si me la pego, es mi culpa, no de un coche¡±.
En el pelot¨®n ciclista crece la sensaci¨®n de que el entrenamiento es m¨¢s peligroso que la competici¨®n. ¡°Y eso que los profesionales sabemos rodar en grupo y tenemos m¨¢s recursos¡±, dice Horrillo. Pero la cultura es la base. El ciclista a¨²n no es miembro de la carretera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.