Reforma o choque de trenes

Las se?ales de alerta de que un gran malestar pol¨ªtico se estaba gestando en Catalu?a las lanz¨® ya en 2006 el entonces presidente de la Generalitat Jos¨¦ Montilla. El dirigente socialista habl¨® de una creciente ¡°desafecci¨®n¡± de amplios sectores de la sociedad catalana hacia lo que representaba Espa?a, tanto por la crisis del Estatuto como por los agravios comparativos en las infraestructuras. Este sentimiento deriv¨® en un clamor independentista en la manifestaci¨®n del 11 de septiembre de este a?o. ?Se puede rebobinar y buscar un nuevo encaje de Catalu?a en Espa?a que garantice otros 30 a?os de estabilidad pol¨ªtica? ?Tiene viabilidad la apuesta soberanista de Converg¨¨ncia i Uni¨® y otros partidos nacionalistas?

A buscar respuestas a ambas preguntas dedicaron los participantes en la mesa sobre Autonom¨ªa, federalismo e independencia. El derecho a decidir. En ¨¦l participaron el secretario general del PSOE, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba; el secretario general de Converg¨¨ncia i Uni¨®, Josep Antoni Duran i Lleida, el profesor de Derecho Constitucional Joan Ridao y el expresidente del Consejo de Estado Francisco Rubio Llorente. La reforma constitucional en clave federal y las posibilidades legales de consultar a los ciudadanos sobre la soberan¨ªa de Catalu?a fueron las apuestas que se pusieron encima de la mesa de un panel moderado por el director de R¨¤dio Barcelona, Josep Maria Girona.

El fracaso del Estatuto lleva a los nacionalistas a desconfiar de cualquier otro proceso de di¨¢logo con Espa?a

Por primera vez, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba detall¨® aspectos de la reforma constitucional que propone el PSOE y que pasar¨ªa por reconocer sin ambages el car¨¢cter federal que, de facto, ya se dibuja en el Estado de las autonom¨ªas consagrado en la Constituci¨®n de 1978. El objetivo es mejorar la eficacia. Rubalcaba enumer¨® los cuatro grandes objetivos de la reforma territorial: clarificar el reparto de las competencias, la reforma del Senado para hacerlo federal, federalizar el sistema de financiaci¨®n y garantizar la lealtad entre niveles institucionales. ¡°El mecanismo ser¨ªa abrir la Constituci¨®n y hacer al rev¨¦s que con el Estatuto: comenzar fijando las competencias del Estado¡±, dijo, recordando que la experiencia de estos a?os despeja el camino.

El malestar de Catalu?a podr¨ªa aliviarse de forma sustancial con esta reforma, considera el l¨ªder del PSOE: ¡°La ventaja es que podr¨ªamos constitucionalizar aspectos del Estatuto que el TC dijo que son inconstitucionales¡±. El propio Rubalcaba admite que la reforma constitucional no es la p¨®cima para arreglar el eterno problema catal¨¢n, pero que se podr¨ªa avanzar.

La propuesta de reforma constitucional socialista levanta todo tipo de suspicacias entre los partidos nacionalistas, que tienen muy poca confianza en que dicha operaci¨®n permita reflejar con suficiente holgura la singularidad catalana. En opini¨®n de Ridao, que fue secretario general de ERC, una reforma constitucional en clave federal ¡°es extempor¨¢nea porque el federalismo est¨¢ pensado para aquellos que quieren unirse y en estos momentos Catalu?a est¨¢ en otra fase¡±.

El exdirigente independentista dice que Catalu?a est¨¢ inmersa en una doble crisis institucional, motivada por el fracaso de 150 a?os de catalanismo que buscaba un ¡°encaje¡± en Espa?a y por la ruptura de un pacto t¨¢cito que se remonta al siglo XVIII, seg¨²n el cual Madrid hac¨ªa la pol¨ªtica y Catalu?a pon¨ªa la visi¨®n empresarial. ¡°Catalu?a ya no es la locomotora hisp¨¢nica, sino que somos un simple vag¨®n al que se le quema buena parte del carb¨®n, y adem¨¢s se le exige que llegue puntualmente, o sea, que no se endeude¡±.

Ridao, como Josep Antoni Duran i Lleida, entiende que la f¨®rmula que se tiene que encontrar es la de una consulta legal a los catalanes. ¡°Espa?a deber¨ªa hacer como el resto de Estados liberaldemocr¨¢ticos y pluralistas y autorizar la consulta¡±. Duran i Lleida, aunque consciente de las enormes dificultades legales y pol¨ªticas que plantea el refer¨¦ndum, lo apoya. ¡°Yo defiendo el derecho a la autodeterminaci¨®n, pero soy muy consciente de que en Catalu?a hay mucha gente para la que su naci¨®n es Espa?a. En el Parlament hay una mayor¨ªa para el derecho a decidir. Hay que saber si hay una mayor¨ªa para la independencia¡±.

La consulta de Artur Mas puede chocar contra muros infranqueables

Los propios nacionalistas admiten el temor de que la apuesta soberanista acabe siendo un camino sin salida o una pared de hormig¨®n contra la que choquen las ilusiones de muchos catalanes. ¡°Ya veremos si hay refer¨¦ndum, porque el PSOE y el PP van a negar todos los marcos legales. Esto, lamentablemente, es as¨ª¡±. Para Ridao, la aplicaci¨®n ¡°mec¨¢nica¡± del orden constitucional tampoco permite este refer¨¦ndum y lament¨® que la ¡°Constituci¨®n permanece escayolada¡±.

Otras voces ven m¨¢s margen en la Constituci¨®n del que ven los nacionalistas catalanes. Es el caso de Francisco Rubio Llorente. ¡°Hay instrumentos legales para consultar a los catalanes dentro de la ley sin necesidad de que el Parlamento catal¨¢n haga leyes que no tienen encaje en la Constituci¨®n¡±, dice el jurista, quien aboga por convocar un refer¨¦ndum legal mediante una ley espec¨ªfica que regule la pregunta y qui¨¦n puede votar. En este punto vuelven las discrepancias. Los nacionalistas que quieren limitarlo a los catalanes, como se hizo en Quebec o se har¨¢ en Escocia, y las otras fuerzas que abogan por consultar a todos los espa?oles.

El derecho a decidir es la punta de lanza. Rubalcaba admiti¨® que ¡°como eslogan es imbatible¡±, pero cuestiona su viabilidad porque el conjunto de los espa?oles tienen tambi¨¦n su punto de vista sobre c¨®mo debe ser Espa?a. De ah¨ª las llamadas al di¨¢logo por parte de todos. Para Duran es la hora de hacer ¡°pol¨ªtica en may¨²sculas¡±. Para Rubalcaba, la de ¡°explorar¡± la reforma constitucional.